Jueves 01 de marzo
Por la mañana, mucha actividad de entrevistas en el Arzobispado. Una de las más interesantes fue la del grupo de catecumenado, que viene a trabajar a las comunidades catecumenales que ya existen entre nosotros.
Por la tarde celebración de la Hora Santa tradicional en el Hospital de la Divina Providencia.
Cené con Monseñor Rivera, con quien también platicamos principalmente de nuestra vida jerárquica en El Salvador y de la celebración de la Conferencia de Puebla. También comentamos la próxima visita, el 10 de marzo, a San Miguel, de todos los obispos llevando a la Virgen de la Paz el documento de Puebla. Estuvimos de acuerdo en dar un testimonio de unidad, al mismo tiempo que manifestamos nuestra inconformidad con las cosas anómalas de la Conferencia Episcopal.
Con el doctor Semsch tuve una entrevista muy útil para mi salud psicológica.
Noche, entrevista del joven empresario señor Muyshondt para planear la reunión que tendrá lugar al día siguiente en su casa de la Colonia San Benito.
Viernes, 02 de marzo
Una mañana también de mucha actividad en el Arzobispado. A la hora el desayuno, el señor Sigfrido Munés, desayunó conmigo y platicamos ampliamente de la situación del país y de los posibles diálogos, que podían hacer de parte de la Iglesia una buena colaboradora en este momento tan difícil. Quedamos de reunirnos al día siguiente con Monseñor Urioste, el doctor Chávez del Demócrata Cristiano, y el señor Munés.
Por la tarde, la reunión con los empresarios promovida por el señor Muyshondt fue bastante positiva. Por parte nuestra fueron conmigo Monseñor Urioste y el Padre Ernesto Abrego, párroco de San Benito. Los invité a que expusieran todo lo que tuvieran contra la Iglesia a fin de desahogar cualquier resentimiento, cualquier aire de separación y fueron muy francos. Nos dio oportunidad para defender la posición de la Iglesia y, al mismo tiempo, ofrecerles que, en aquellas cosas en que ellos tuvieran razón, estábamos dispuestos a aceptar la verdad. Al terminar, se notaba un ambiente muy positivo porque nos comprometimos a una reunión dentro de quince días.
Por la noche, en la casa de retiros espirituales y convivencias, El Despertar en San Antonio Abad, donde fueron muertos trágicamente el Padre Octavio y cuatro jóvenes, celebramos, con la presencia de muchas comunidades, la Eucaristía en el día cuarenta de la muerte trágica de aquellos hermanos nuestros. Fue muy hermosa la concentración, la participación. A la hora del ofertorio, se les entregó a las cuatro madres de los cuatro jóvenes, cuatro ramos de flores rojas. Lo mismo al papá del Padre Octavio que estaba presente, lo cual conmovió a la muchedumbre. En mi homilía, también agradecí a las familias habernos dado esos templos de muchachos, a los que Dios escogió para ofrecer el supremo testimonio de amor.
Sabado, 03 de marzo
Desayuno de consulta con Monseñor Urioste, Sigfrido Munés y el doctor Chávez. Muy interesante acerca de la situación actual del país y de la convivencia de un diálogo que sea en búsqueda del bien de nuestro pueblo. Se me aseguró, que teniendo la solvencia moral que he logrado, no se compromete nada al buscar con sinceridad un diálogo, en un ambiente privado, con el Gobierno. De mi parte, insistí que la manera de dialogar entre grupos de la Iglesia, del capital y del Gobierno me parece más adecuado como preparación para el diálogo que se menciona.
Al medio día, visita de una familia que me cuenta de un hijo capturado junto al cuartel San Carlos y llevado luego a cuarteles de la Policía o la Guardia Nacional, fue cruelmente torturado y llevado al hospital. Yo fui al hospital y vi su situación sumamente grave. Mejor dicho, en posición agónica. He comprobado, una vez más, ¡qué poco respeto hay para el hombre en nuestra situación nacional!. Tomé nota para denunciar el caso en mi homilía de mañana.
Dediqué la tarde y la noche a preparar dicha homilía.
Domingo, 04 de marzo
Primer domingo de Cuaresma. El tema fue: “CUARESMA, RENOVACION DE NUESTRA ALIANZA CON DIOS”. Y siguiendo las lecturas de este domingo, hablé de la historia de la alianza. Cristo clave de nuestra alianza, y el bautismo, incorporación del hombre en la alianza con Dios. Invité a prepararnos para una digna celebración de la Pascua, ya que esta es la meta de la celebración de la Cuaresma. Al terminar la parte doctrinal de la homilía se fue la luz y tuve que suspender la predicación para continuar la Misa y después de Misa, dada la bendición, y diciendo que los que quisieran quedarse oirían la parte noticiosa y de denuncias, casi toda la Catedral permaneció en su puesto hasta escuchar el último aviso y salir conmigo a la despedida en la puerta de Catedral.
Por la tarde fui a San Antonio Abad. Una reunión con los principales dirigentes de aquella comunidad y estudiamos a fondo la situación, entrando con toda sinceridad en los errores que pudieron ser causa de grandes tragedias. Descubrimos que la mezcla imprudente de la política con la pastoral hace mucho mal, y hemos acordado que todo agente de pastoral respete completamente su trabajo pastoral, sin mezclarlo en implicaciones de organizaciones políticas.
Por la tarde fue pasada en la radio la homilía ya que se grabó y así pudieron escucharla también los que la interrumpieron en la mañana por falta de corriente eléctrica.
Lunes, 05 de marzo
Desde hoy hasta el viernes 09 de marzo, he ido a hacer los ejercicios espirituales, a la casa “María Eugenia” de las hermanas de La Asunción, juntamente con otros veinte sacerdotes. Los predicó el Padre Fermín Aranguren, redentorista, a quien ayudó dos días el Padre Fabián Amaya. Ambos nos dieron orientaciones muy certeras, muy oportunas, muy profundamente espirituales, muy actuales. El grupo se compactó en una unidad encantadora y hubo mucha profundidad de reflexión. ¡Unos ejercicios espirituales verdaderamente sacerdotales, de gran provecho para nuestro Ministerio! ¡Gracias a Dios!.
Durante los ejercicios salimos a la reunión del Clero que fue el martes en Domus Marie y donde se presentó el documento de Puebla y se dieron algunos avisos prácticos para la vida de la Diócesis, principalmente en Cuaresma y Semana Santa. Esa misma noche del martes, presidí la inauguración del curso de Formación en la Fe que ha organizado, por segundo año ya, en la Vicaría de La Asunción, Flor Blanca, en la casa parroquial de la Parroquia del Corazón de María. Este año funcionarán dos cursos ya que harán su segundo curso, los que el año pasado iniciaron esta idea tan oportuna de los sacerdotes de esa vicaría, unidos para una pastoral más de acuerdo con nuestro tiempo. Al final, el agregado Cultural de la Embajada de Estados Unidos, me ofreció su colaboración para la grabación más perfecta de las homilías de Catedral, lo cual acepté y agradecí.
Viernes, 09 de marzo
Después de los ejercicios espirituales, por la tarde, tuve que ocuparme en colaborar a la solución de la huelga de la Constancia y Tropical, que ya lleva varios días sin poder solucionar el problema laboral.
Sabado, 10 de marzo
Invitado por la Conferencia Episcopal asistí a la entrega del documento de Puebla a la Virgen de la Paz, según la iniciativa dada en Puebla de llevar este documento a las patronas de todos los países de América. Había invitado al Clero, religiosas y fieles y en gran número estuvimos reunidos en la Iglesia del Rosario y de allí nos dirigimos a Catedral, para tomar parte en la solemne celebración. El número de sacerdotes de la Diócesis era el más grande, eran ochenta. La ceremonia había sido organizada por los directivos de la Conferencia Episcopal. Se notó claramente la exclusión de mi persona en la participación de la ceremonia. El pueblo me tributó una aclamación inesperada a la salida, lo cual les he agradecido profundamente.
Monseñor Aparicio, al llegar la procesión de entrada, explicó el objetivo de la fiesta. Monseñor Revelo fue el encargado en exponer el resumen del documento, después del Evangelio. Y el señor Nuncio, que precidió la ceremonia, dijo al final unas palabras relacionando la devoción a la Virgen y la evangelización en América Latina.
En el convento del Calvario, Monseñor Pablo Castillo y el Padre Villacorta habían preparado, por invitación mía, una refacción que resultó un verdadero almuerzo para todos los sacerdotes de la Arquidiócesis.
Al regresar, me tenían la noticia de que habían llamado varias veces del conflicto de la Tropical y La Constancia. Y junto con el Padre Rafael Moreno hemos tratado de ayudar, hasta donde nos ha sido posible; toda esta tarde invitando a dialogar a la parte patronal y a la parte de obreros. Así hemos trabajado hasta muy entrada la noche. El Padre Moreno todavía hasta en las horas de la madrugada. Pero no se llegó más que a una sugerencia, de que no se cerrara la posibilidad de dialogar, sino que por lo menos se juntaran la parte patronal y la parte obrera para dilucidar cómo podía hacerse el diálogo. Lo cual ya es una esperanza dado el ambiente tan difícil, ya que hasta la misma fábrica, donde están los huelguistas, ha sido rodeada por un fuerte cordón militar con toda clase de armas y nos preocupa la resolución trágica que pueden tener estas cosas.
Domingo, 11 de marzo
Desde muy temprano, el Padre Moreno y yo hemos tratado de continuar nuestra colaboración. La Comisión de Derechos Humanos, por su parte, está influenciando para lograr este arreglo. En la homilía del domingo, después del punto doctrinal de la Cuaresma, como renovación del Pueblo de Dios, me he referido a los varios casos de nuestra situación, dándole prioridad a la huelga de la Constancia y La Tropical.
El Padre Moreno quedó pendiente de cualquier llamada, ya que yo tenía que ir a San Pedro Perupalán, lo cual tampoco me fue posible dada la situación de tráfico, por motivo de la huelga. Y así tuve que autorizar al Vicario del departamento de Cuscatlán, Padre Montesinos, y al párroco de San Pedro Perulapán, Padre Solórzano, para que ellos administraran la confirmación a los jóvenes y niños que habían sido preparados.
En la capital, nuestra mediación, junto con otras actividades, han logrado que se restablezca el diálogo, el cual se está realizando desde esta tarde y creo que toda la noche del domingo.
Lunes, 12 de marzo
Celebré la Misa en el Colegio Cristóbal Colón, que inicia hoy una semana josefina. Fue un espectáculo muy bello de juventud. Hablé de San José como el hombre justo, o sea, el hombre que ha comprendido su vocación en la vida y ha tratado de colocarse en el puesto que Dios le designó para el conjunto de la historia y que esta es la vocación de todo joven: Descubrir el proyecto de Dios y el puesto de cada hombre en ese proyecto.
Al medio día fui a almorzar con los seminaristas menores de Chalatenango, donde compartimos una Eucaristía y un diálogo muy constructivo para su vocación. Las hermanas de la Asunción y las hermanas Betlemitas estuvieron presentes, ya que ellas trabajan en aquel departamento.
Por la tarde, asistí a la convivencia en San Antonio Abad con los jefes de comunidades de aquellos diversos sectores. Dialogamos ampliamente a la luz de la Palabra de Dios, y creo que ha habido nuevo ánimo para continuar, a pesar de las situaciones tan difíciles que quedaron después del asesinato del Padre Octavio y de los acontecimientos de Despertar.
Por la noche, continuaban los diálogos acerca de la huelga de La Constancia y La Tropical. Llevé personalmente a un obrero que pertenece a la Comisión Negociadora. Lo llevé a la Cruz Roja donde están las dos partes dialogando, ya que este joven pertenecía a la Comisión, pero no tenía confianza de irse solo.
Martes, 13 de marzo
Este día ha sido muy intenso. En la mañana continuaron las espectativas de la negociación para entenderse la parte patronal y obrera de la Constancia y La Tropical. La negociación se prolongó todo el día, hasta como a la seis de la tarde. Mientras tanto, al medio día, hice mi grabación para el programa del miércoles y fui a almorzar, invitado por un grupo de señoras de la Colonia San Benito, donde hubo oportunidad de confrontar criterios y me dió satisfacción de la inquietud espiritual que ha despertado la predicación de la Iglesia actual. Creo que es una oportunidad magnífica para evangelizar a este sector tan difícil de la Diócesis. Y a través de un grupo de señoras evangelizadas y de buena voluntad, como las que hoy estaban en el almuerzo, siento que puede llevarse la Palabra de Dios a muchos otros hogares.
Por la tarde hubo una reunión con los obreros de la Imprenta, los cuales expusieron sus inquietudes de agruparse y de promoverse cristianamente; al mismo tiempo que me denunciaron algunas anomalías del taller. También llegaron dos jóvenes que estaban con audiencia para tratar inquietudes de sus ideologías de violencia, de las cuales no quieren ceder, a pesar del esfuerzo que he hecho por presentarles la fuerza del amor cristiano. Creen que sólo la violencia puede resolver las actuales injusticias de nuestro país.
Por invitación del señor Nuncio fui a la Nunciatura, donde me ofreció su colaboración para el asunto de la huelga. Me valí de esta buena voluntad para agradecerle y decirle que había una amenaza de que a media noche, si no desocupan el local de La Constancia y de La Tropical iban a proceder militarmente, lo cual podría traer mucha desgracia. Y ya que estaban terminando las negociaciones, que él podría suplicar al Señor Presidente de la República para que los cuerpos de seguridad evitaran cualquier acto de violencia y tuvieran un poco de paciencia para que las negociaciones terminaran en paz.
Esta noche cené en la casa del ingeniero Girón y de su señora María Elena, donde no hubo tema especial, ya que tuvieron la buena voluntad de hacerme un ambiente completamente de descanso.
Pero al regresar a la casa a las ocho y treinta de la noche, todavía hubo que dialogar con representantes laicos de una vicaría que está promoviendo mucho las comunidades de base y compartimos largo rato sobre esta evangelización a base de pequeñas comunidades, rogándoles su colaboración, aún frente a los párrocos para provocarles su buena voluntad y su colaboración.
Tuve noticia de que había arreglado todo en la situación conflictiva de la huelga de La Constancia y di gracias a Dios, a travéz de la radio, nuestra radio YSAX, y también mediante una entrevista que pidió Radio Sonora. En ambas radios hice mi comentario agradeciendo la buena voluntad de ambas partes, felicitándolos por su capacidad de diálogo y señalando, al mismo tiempo que era necesario poner un esfuerzo para quitar las raíces de esta situación que podrá provocar nuevos conflictos mientras no se arreglen de raíz las situaciones.
Miércoles, 14 de marzo
Me informaron que la evacuación de los huelguistas y otros que habían acompañado a los obreros en La Constancia y La Tropical se hizo con bastante dilación. Pues apenas en la madrugada pudieron ser recibidos en el salón de San José de la Montaña, a donde pidieron ir los obreros por tener más confianza en la Iglesia. Lamento que a los sacerdotes pedidos por los obreros para su protección no se les dió la debida atención de parte de los cuerpos de seguridad. Ya que el Padre Cortés y el párroco coadjutor del Calvario, que iban a cumplir este cometido, no se les dejó entrar al local ni bajar del bus de la Cruz Roja, ni siquiera abrir las ventanillas de vidrio para respirar aire puro. Y tuvieron que esperar allí las largas horas de la noche, hasta casi el amanecer, en que se llevaron al salón de San José de la Montaña.
Por la tarde visité y celebré la Misa en el noviciado de las Oblatas del Sagrado Corazón en la Colonia Costa Rica.
CASSETE Nº 9
DIARIO del 15 de marzo al 10 de abril
Jueves, 15 de marzo
Desayuné con los párrocos de la capital, con quienes tengo que arreglar alguna coordinación para la próxima Semana Santa, a fin de unificar algunos actos y ponernos de acuerdo en una celebración conjunta . Acordamos, sobre todo, unificar el Domingo de Ramos entre el Calvario y Catedral; darle a la procesión del Silencio de Concepción más atención pastoral; ya que es una inmensa masa que nadie controla. Para ésto tendré una alocución al principio y se seguirá transmitiendo desde la YSAX una animación, invitándo a otros párrocos a que celebren actos a esta hora, ya sea procesión del silencio también en las otras parroquias, o algún otro acto que congregue a la gente, a fin de descongestionar esa muchedumbre y aprovecharla para la reflexión de la Semana Santa. Igualmente, la procesión del Santo Entierro, la animaremos desde la radio para todas las parroquias que quieran aprovecharse de esa animación radiofónica.
Insistí en que le diéramos toda la importancia a la vigilia Pascual y que se llevaran, sobre todo, comunidades y jóvenes porque la vamos a hacer temprano, a las siete de la noche en la Catedral.
Como este día me sentía un poco indispuesto de salud, suspendí un almuerzo con don Pepe Simán y el viaje a Monte San Juan donde debía ir a dar posesión al nuevo párroco, Padre Benjamín Rodríguez. Siento que esta supresiones no me dejan satisfecho, quisiera cumplir lo que he prometido, pero la salud a veces no responde y a ésto se junta, tal vez, un poco de negligencia de mi parte.
Por la noche, sin embargo, tuve una reunión muy animada y muy simpática con los jóvenes del Seminario Menor de la Arquidiócesis, en San José de la Montaña, que se prolongó por unas dos horas, en la que los muchachos expresaron inquietudes muy interesantes, propios de su edad y de su vocación.
Viernes, 16 de marzo
Por el mismo motivo, suspendí la visita que debía hacer al pueblo del Paraíso de Chalatenango, donde las hermanas Betlemitas me esperaban con tanto cariño. Le han preparado al pueblo un agasajo para mi persona, pero oportunamente les mandé decir que no podría ir y que en mi lugar iba el Vicario General. Era una reunión de agentes de pastoral de toda la Vicaría y sé que se desarrolló bien, a pesar de no haber ido personalmente.
Por la tarde, junto con los otros sacerdotes que me acompañaron a Puebla, informamos a los seminaristas mayores de la Arquidiócesis sobre este acontecimiento y dimos lugar al diálogo que resultó muy interesante.
Más tarde fuimos a una segunda reunión con otros empresario jóvenes. Manifestaron su esperanza en la Iglesia y expresaron también sus inquietudes en el difícil momento porque atraviesa el país.
Por la noche visité la Colonia Atlacatl en cuya parroquia se está cultivando un grupo catecumenal. Les hablé de la necesidad de esta promoción bíblica, pero que, al mismo tiempo, trataran de adaptarse a la pastoral de la Iglesia local. Para mostrar así, la autenticidad de sus intenciones católicas.
Sabado, 17 de marzo
Por la mañana me visitó la televisión inglesa con la que sostuve un pequeño diálogo y, que al mismo tiempo fue fotografiado para aquella televisión, sobre la situación del país y sobre nuestra Iglesia.
Esta mañana también preparamos con el Padre Jesús Delgado y el Padre Octavio Cruz, la mesa redonda que vamos a presidir en la Universidad Nacional sobre el tema del “Papel de la Iglesia en la América Latina”.
Por la noche, celebré en la Misa del Hospital, un bautismo de un nieto del doctor Semsch.
Domingo, 18 de marzo
Este ha sido un domingo bastante cargado. Después de la Misa habitual de Catedral, que como siempre resulta un acontecimiento muy consolador para la vida pastoral de la Diócesis, fui a San José Villanueva, anticipando la fiesta del patrón San José, celebré allá una fiesta muy bonita preparada por las hermanas Pasionistas, que tienen a su cuidado aquella población y el párroco, Padre Benito Alfaro.
A media tarde fuimos ala comunidad del Cantón San José Cortés, de Ciudad Delgado. También una comunidad muy numerosa y entusiasta donde celebré la Misa y después dialogué con los agentes de pastoral. Hay muchos catequistas, hay un buen número que dá esperanzas pastorales muy grandes en aquel sector.
Y por la noche, en la parroquia San Francisco de Mejicanos estuve para dar posesión al nuevo párroco, padre Rafael Palacios, que va a llenar el vacío que dejó el Padre Octavio Ortiz, que como ya saben fue asesinado en El Despertar, de San Antonio Abad.
De
Lunes 19 de marzo al
Viernes 23 de marzo
He ido a la República Dominicana, porque en Santo Domingo se celebraba un seminario sobre el culto al Sacratísimo Corazón de Jesús, propiciado por un Instituto internacional que organiza estos eventos en diversas partes del mundo. De El Salvador fue también el Padre Santiago Garrido, que es el Director del Apostolado de la Oración. Fue un seminario muy útil en conocimientos teológicos, bíblicos y pastorales; sobre todo, en diálogo con los otros participantes de diversos países de Centro América y del Continente. Estudiamos cómo hacer atractivo al público de hoy, este culto que, sin duda, sigue siendo de actualidad, pero que, tal vez por no haberlo modernizado suficientemente es considerado por algunos como anticuado. Sin embargo, hemos comprendido, a la luz de estas reflexiones, lo necesario que es volverlo a poner en su debido honor. Para ésto, por parte de los asistentes centroamericanos, organizamos un pequeño comité que, unido con el Centro Internacional, buscará los medios para realizar estos ideales de renovación del culto al Sagrado Corazón en nuestros países. Tuve el honor de que me nombraran presidente de ese pequeño grupo centroamericano; con gusto he aceptado porque siempre ha sido mi devoción predilecta y porque sé que este culto al Sagrado Corazón traerá muchos frutos para la pastoral de nuestras diócesis.
El seminario se desarrolló en la Casa Loyola, de los padres jesuitas, un pintoresco local junto al mar. Y además tuve oportunidad de dar a conocer la situación de la Arquidiócesis por la cual se mostraban allá muy interesados los seminaristas, los religiosos y alguno que otro medio de comunicación social, como la televisión para su información diaria un día y el Padre Arango, jesuita, que sostiene un programa dominical, lo dedicó, su programa, a un diálogo con este servidor.
Sabado, 24 de marzo
Hoy tuvimos con el Padre Moreno, el Padre Fabián Amaya, el Padre Walter Guerra, y la señorita Doris Osegueda una reunión que tendremos en adelante todos los sábados, para ir orientado la Ideología de los medios de comunicación social. Resulta muy interesante también para mi gobierno esta reunión en la cual analizamos los diversos aspectos de la semana las impresiones que va causando nuestra radio y ORIENTACION.
Por la tarde, en Suchitoto, celebramos con bastantes sacerdotes asistentes la ordenación sacerdotal del Diácono Ezequiel de Jesús Gámez. La Misa fue al aire libre en el Atrio de la Iglesia y resultó muy imponente y simpático. Entre las comunidades asistentes, que fueron muy numerosas, se destacaba la comunidad de Chalatenango, ya que el Padre Gámez, a pesar de ser de Suchitoto, se ha incorporado a aquella comunidad y con ella ha celebrado una especie de alianza, para seguir cultivando su vocación sacerdotal.
Domingo, 25 de Marzo
Después de la Misa de Catedral fui a participar en el 25 aniversario del Seminario Menor de Santa Ana, llamado Seminario Juan XXIII. Invitado por el señor Obispo Barrera y con la asistencia también del señor Nuncio y muchos sacerdotes de la Diócesis. La Misa tuvo lugar a las doce del día. Entre la muchedumbre que asistía se escucharon algunos “Monseñor Romero”, lo cual no dejó de inquietarme y por lo cual también apenas terminó la Misa, procuré evadirme para evitar cualquier problema. Además en la ciudad sede tenía mis temores que atender, ya que se estaban resolviendo aquí problemas graves, laborales, en los cuales suelen acudir con frecuencia al Arzobispado. El problema principal se daba en la Fábrica Delicia, donde entre los rehenes estaba un profesional cuya mamá había muerto y no lo dejaban salir. Intercedí por él, pero lamentablemente no se pudo hacer lo que se deseaba.
Lunes, 26 de marzo
Nuevamente nos reunimos en desayuno con los sacerdotes con quienes planificamos la próxima Semana Santa. El Padre Gutiérrez ha tomado muy en serio la organización de la Semana Santa y, gracias a Dios, ha presentado ya algunas realizaciones y concretamos ya dicha celebración.
Al mediodía, almorzamos con todo el personal de la Curia Arquidiocesana, sacerdotes y seglares, para entrar en una mayor relación humana. El Diálogo que sostuvimos antes y durante el almuerzo fue de verdadero calor humano y me alegro para poder entablar relaciones más humanas y cristianas en un trabajo tan importante para toda la Arquidiócesis.
Por la tarde diálogo con dos elementos de la guerrilla, con los cuales traté de mantener la idea cristiana de la no violencia, pero esta gente está muy convencida de que no es la fuerza del amor la que arreglará la situación, sino la fuerza violenta, ya que no se quiere atender a razones y mucho menos al amor cristiano. He sentido profundamente la diferencia de pensar entre numeroso sector de nuestra patria, representado en estos interlocutores, y el sentir cristiano.
Pido al Señor que ilumine los caminos de su Iglesia para que sean comprendidos, aún por aquellos que buscan el bien de la patria, pero por caminos muy distintos de los que Cristo señaló.
Martes 27 de marzo
Sorpresivamente, me visita antes del desayuno, el doctor Nelson Segovia, que ha sido nombrado Juez Ejecutor de los rehenes que se encuentran en la huelga de la Fábrica Delicia. Me cuenta su problema que es verdaderamente grave y trato de ayudarle, según mis luces, dándole también la colaboración de Monseñor Urioste, con quien se fue a platicar luego. Más tarde hablé con él y creo que las cosas van por buen camino.
Toda la mañana la llenó la reunión con el Senado Presbiterial en la casa de las hermanas Somascas, donde nos dieron también el almuerzo. Resultó sumamente interesante el tratar de hacer una evaluación de la Arquidiócesis. Se vio tan interesante que se dijo que, de vez en cuando, debía de hacerse, y si fuere posible, no sólo en una mañana, sino dedicarle un tiempo suficiente y profundo, para tomar el pulso a la marcha de la Diócesis y orientar cada vez mejor nuestra pastoral. Se habló del cambio de senadores, ya que según los primitivos estatutos, su período es por dos años, los cuales ya terminan. Pero se dejó al Padre José Luis Bourguet el estudio de los estatutos para decidir este punto en una próxima reunión.
A las cinco de la tarde fue la Mesa Redonda en la Universidad Nacional, en la Facultad de Humanidades y Letras. El tema señalado era “PAPEL DE LA IGLESIA EN AMERICA LATINA”. Participaron el Padre Jesús Delgado, bajo el aspecto teológico, presentando la teología de la liberación; el Padre Octavio Cruz, párroco de Aguilares, licenciado en Ciencias Sociales, que presentó el marco socio-económico-político del país y de América Latina. Y finalmente yo, hablé propiamente del papel de la Iglesia en América Latina, teniendo en cuenta los documentos recientes de Puebla. La acogida que nuestra Universidad dio a esta representación de la Iglesia fue muy conmovedora. El auditorium de Derecho, que es el más grande de la Universidad, y donde tuvo lugar la Mesa Redonda, fue incapaz de contener la muchedumbre, la cual también se desbordó por los pasillos y por la terrazas que asoman al salón. Hubo mucho respeto, mucho silencio en las exposiciones, y después a la hora de las preguntas, las preguntas también demostraron el profundo interés que el mensaje de la Iglesia representa para este ambiente universitario de profesores y jóvenes bachilleres, algunos ya profesionales. Yo expresé mi agradecimiento y ofrecí la colaboración de la Iglesia en este esfuerzo de la cultura nacional. El Decano de la Facultad de Humanidades, junto con el Rector, nos ofrecieron al final una pequeña recepción donde compartimos comentarios sobre el acontecimiento. Desde luego, positivo, por parte de todos ellos. Los comentarios que luego hemos oído también son muy positivos.
Por la noche asistí a una cena con los cursillistas de cristiandad que con frecuencia me dan esta oportunidad de compartir con ellos en una forma familiar.
Miércoles, 28 de marzo
Entre las audiencias de esta mañana, la principal ha sido la de unos militares progresistas, ya retirados, con quienes conversamos ampliamente. Me acompañó Monseñor Urioste, para representar mejor la presencia de la Iglesia. Ellos expusieron bastante historia del Gobierno de El Salvador y proponían algunas soluciones para salir de esta situación. Por parte de la Iglesia nosotros admiramos su buena voluntad. Agradecimos el enriquecimiento que nos habían dado con sus informes y nos ofrecimos a colaborar. La Iglesia siempre está dispuesta a colaborar cuando se ve de parte del Gobierno un sincero de servir al pueblo, al que la Iglesia también sirve. El dialogo se tornó muy interesante y creo que todos salimos con un poco de esperanza más en el corazón. Prometimos volvernos a reunir y platicar sobre este tema. Ellos llevaron un mensaje a aquellas personas con quienes conversan, entre ellos el Presidente de la República, el pensamiento de la Iglesia en esta situación.
Suspendí un almuerzo privado que tenía con los padres redentoristas y una reunión con los obreros de la tipografía, como también mi presencia en el grupo catecumenal de María Auxiliadora. Lamento porque estas retractaciones, a veces involuntarias, no me dejan contento, pero a veces la salud no responde a la buena voluntad.
Jueves, 29 de marzo
Esta mañana, tuvimos una reunión con el Consejo de Pastoral de la Arquidiócesis. Está todavía muy incipiente, pero la reunión fue muy positiva. Cabalmente, la pregunta que lancé antes de cualquier otro punto de agenda es que expresaran si veían la importancia de esta comisión pastoral y que dieran sugerencias para un funcionamiento verdaderamente eficiente. En esta respuesta se fue casi toda la reunión, pero dejó como saldo muy útil la creación efectiva de un pequeño Consejo en el cual sólo estuviera un representante de los sacerdotes, otro de las religiosas y otro de los laicos para estudiar todas las sugerencias que habían hecho y darle una funcionalidad más efectiva a este organismo que el Concilio recomienda y que, sin duda, hará mucho bien en la pastoral de la Diócesis.
Por la tarde, la hermana Nelly Rodríguez, del Colegio Sagrado Corazón, junto con otras madres de familia, me visitaron para expresar sus inquietudes acerca de las corrientes peligrosas en que se encuentra la juventud, sus propios hijos, sobre todo, ciertas ideologías orientales, gnósticas, que van unidas a veces a otro tipo de alienaciones. Hablamos ampliamente de la juventud y propusimos algunos medios que los colegios católicos pueden emprender. Sobre todo, como una de ellas dijo, fue una reunión de terapia, porque también se tocaron puntos espirituales que a ellas personalmente les interesaban mucho.
Por la noche fue invitado a una cena con la CONFRES para felicitar a la madre Vanegas que ha sido elegida Vice-presidenta de la CLAR, y también como una expresión de solidaridad al Arzobispado. Por mi parte, les agradecí y expresó mi satisfacción de la vida que lleva la CONFRES, estimulándolos a promover cada vez más el espíritu de la vida religiosa en la línea actual de la Iglesia.
Viernes, 30 de marzo
Vino a desayunar conmigo el doctor Roberto Silva, a quien he suplicado que siempre que quiera decirme algo me lo diga con toda confianza. Y su palabra de hoy era para que aclarara, ante la gente que me escucha que, él mismo dijo, “es mucha, y no sólo es su gente, sino también aquellos que lo atacan y lo escuchan mucho”, que aclara que no había que confundir con izquierda el terrorismo, juntamente con las reivindicaciones justas, que ésto era necesario porque la acusación que se hace siempre es de que se acusa al terrorismo de que se defienden del comunismo. Y que era necesario señalar que hay muchas justas reivindicaciones en lo que llaman la izquierda. Así como también hay mucho condenable en esa izquierda cuando se convierte en terrorismo, en violencia fanática. Yo completé el concepto diciendo que, igualmente, me gustaría distinguir en la derecha también algo bueno que hay de lo malo que también hay. Le agradecí su colaboración y le pedí que siempre que hubiera alguna sugerencia la conversáramos.
Fui a almorzar con los Padres de Opus Dei en una nueva residencia que tienen y les dejé el retrato autografiado, “al Opus Dei de la Arquidiócesis, con mi bendición de pastor y amigo”.
Por la noche tuve otra entrevista con un periodista finlandés, quien además del reportaje de El Salvador, dijo que tomaba datos para un libro que él está preparando.
Sabado, 31 de marzo
Celebramos por segunda vez el desayuno de reflexión sobre la información. Asistieron Monseñor Urioste, el Padre Rafael Moreno, Fabián Amaya, Walter Guerra y la señorita Doris Osegueda. Analizamos una carta que llega de varias comunidades que se quejan de que los comentarios de la YSAX y la presentación de ORIENTACION no sigue la línea pastoral del Arzobispado, sino que presenta opciones políticas parciales y que no se dá lugar a la vida de las comunidades eclesiales de base. El análisis que hicimos fue bastante bueno y se concluyó de tener una reunión con estas comunidades para aclarar algunas situaciones que ellos ignoran y tener en cuenta también sus ideales.
Por la tarde fui a San Antonio Abad con el equipo coordinador de aquella comunidad. Tratamos algunos aspectos de la problemática de esa parroquia donde está enclavado El Despertar, que fue escenario del asesinato del Padre Octavio y de los cuatro jóvenes. Acordamos celebrar una Eucaristía el lunes Santo por la noche, para instalar allí en esa casa al Padre Rogelio, quien se encargará provisionalmente de la parroquia mientras se ordena sacerdote el Padre Coto, a quien esta comunidad espera con cariño.
Esta noche también tuve la visita de un periodista finlandés, el cual me prometió también, además del reportaje que tomó, acompañarme a la Misa de Catedral al día siguiente y al oratorio salesiano, donde compartirá mi experiencia con aquellos niños y catequistas.
Domingo 1o. de abril
La Misa de Catedral tuvo una nota muy especial, muy animadora, muy ejemplar. Fue la presencia de la Comunidad de Padres Somascos, que quisieron concelebrar conmigo y, al mismo tiempo, llevar sus instituciones, su seminario y otras obras somascas. Eran seis sacerdotes, a los cuales saludé desde el principio de la Misa, presentándolos a la comunidad como un gesto de comunión muy digno de imitarse. Y a la hora del Evangelio, uno de los sacerdotes, antes de mi homilía, expresó la intención con que habían venido, sus carismas de fundación, precisamente, para los huérfanos y desamparados. Y como esa línea con los pobres es, cabalmente, la línea auténtica del Evangelio de los santos de todos los tiempos y que quiere ser la línea de ellos, así como la solidaridad con el pastor de la Diócesis.
Después de la Misa fui a celebrar otra Eucaristía al Oratorio del Instituto Ricaldone, a donde había sido invitado y donde compartí las alegrías salesianas de aquellos catequistas y niños que se benefician por más de un millar en aquellos amplios campos. Allí administré la confirmación a algunos jóvenes y les expresé lo que significaba el ser bautizado y el recibir ese robustecimiento del Espíritu Santo que es la confirmación.
Por la tarde celebramos la Hora Santa que resultó muy concurrida y fervorosa en la Capilla del Hospital de la Divina Providencia, donde también administré el bautismo al primogénito de Roberto Cuéllar, gran colaborador de la Arquidiócesis desde su servicio a la oficina de Socorro Jurídico.
Y por la noche celebramos 50 años de vida religiosa de la Madre Juanita, una ancianita Oblata al Divino Amor, que desde hace muchos años trabaja en el Colegio de la Sagrada Familia. Compartimos con aquella comunidad impresiones de mucha sintonía con la pastoral de la Arquidiócesis.
Lunes, 02 de abril
Había pensado tomar este día de descanso, pero ha habido bastante ocupación en la oficina del Arzobispado. Pero de acuerdo con Monseñor Urioste, Vicario General, me ausentaré hasta donde sea posible de estas ocupaciones esta tarde y los dos días siguientes.
Martes, 03 de abril
A pesar de que hoy hay reunión del Clero, que se dedicará al retiro espiritual de cuaresma, Monseñor Urioste tuvo la bondad de representarme y aconsejarme que tomara día de descanso, lo cual me ha caído bien.
Miércoles, 04 de abril
Estoy cumpliendo 37 años de vida sacerdotal. Me ordené en la Pascua de 1942. Este día era entonces Sábado Santo, el 04 de abril. En la Misa del Hospital las hermanas ya lo sabían y ofrecieron por mí su comunión y me felicitaron. De acuerdo con mi proyecto de tomar estos tres días de reposo, no he asistido a la Curia, sólo he firmado algunas cartas que me han preparado. Yo agradezco esta colaboración.
Jueves, 05 de abril
Hoy se tuvo por primera vez la reunión del Consejo Ejecutivo o Secretariado del Consejo de Pastoral que fue creado con un representante de vicarías, el Padre Carlos Mejía, Vicario de La Asunción, Flor Blanca; una representante de las religiosas, fue una religiosa Oblata al Sagrado Corazón, que trabaja en Aguilares y un representante del laicado. También fue un laico de la parroquia de Miramonte. Este núcleo, con el Secretario del Consejo de Pastoral es el que tendrá la realización de todas aquellas cosas que se acuerden en el Consejo de Pastoral. Así como llevará a ese Consejo las sugerencias, críticas y demás cosas que haya que estudiarse pastoralmente. Esta reunión coincidió con una entrevista que habían pedido los representantes de Encuentros Conyugales. Es un movimiento parecido a Cursillos de Cristiandad y al Movimiento Familiar Cristiano, que nació de un grupo de Cursillos de Cristiandad y ha crecido mucho porque han sido ya muchos encuentros los que han hecho. Ellos propusieron sus problemas, sobre todo, en relación con otros movimientos familiares, y se trató de oirlos y de dar algunas pistas de solución, sobre todo, ofrecerles los servicios de este Secretariado del Consejo de Pastoral.
Por la mañana también, tuve la visita de una periodista norteamericana que traía un nuevo paquete de firmas de Francia en solidaridad con nuestra Arquidiócesis. Hubo otras visitas en esta mañana densa de trabajo.
Fui a almorzar con el periodista Jorge Pinto, a donde me llevó el Padre Benito Tovar. Compartimos las inquietudes del momento con un profesor universitario, que participó en este almuerzo.
Esta tarde asistí en la casa de ejercicios espirituales “María Eugenia” a una convivencia centroamericana de pastores bautistas. Unos cuarenta pastores deseaban verme y conversar conmigo sobre problemas cristianos, evangélicos de nuestra área centroamericana. Les contesté saludándolos y admirándoles su sentido de amplitud cristiana, y ofreciéndome a la amistad y a un trabajo ecuménico. El diálogo que surgio con ellos fue muy interesante, se tocaron varios temas de la realidad centroamericana y del compromiso que los cristianos que creemos en el Evangelio, debemos asumir en estas situaciones y realidades.
No pude asistir a la reunión que había concertado, pero fueron Monseñor Urioste y el Padre Ernesto Abrego, donde cenaron y platicaron con estos empresarios jóvenes de la situación del país. Mi ausencia parece que atrasó una iniciativa que quieren tratar en una próxima reunión conmigo.
Viernes, 06 de abril
A las ocho y media de la mañana, en el Colegio de la Sagrada Familia, dio inicio un día de retiro espiritual con maestros de diversos colegios católicos. Con el padre Isidro, Secretario de la CONFRES, presentamos el tema de la Semana Santa y la realidad actual del país. Y abrimos un diálogo con los maestros que también resultó muy interesante y se ve el interés que estos profesores, colaboradores de los colegios católicos, tienen acerca de la Iglesia y de Jesucristo.
Me visitó un periodista inglés, que tuvo necesidad de traductor y conversamos sobre la situación de los dos ingleses que están secuestrados.
Ellos mostraron su preocupación y su inconformidad con la actitud del Gobierno inglés, que no ha querido hacer nada para librar sus subalternos. Conversamos ampliamente sobre la situación del país y de la Iglesia. Se trata de uno de lo periódicos más populares que tienen una divulgación de más de un millón, en Inglaterra. Por lo cual tuve mucho interés en la entrevista con este periodista. Ofrecí los servicios que ha estado prestando la Iglesia y que seguirá prestando en favor de los ingleses secuestrados.
Fui a almorzar con los padres jesuitas de la UCA, y conversamos, sobre todo, del proyecto que tengo de escribir una carta pastoral para el 06 de agosto próximo; que quiero dedicar a problemas actuales de nuestra Arquidiócesis, como son la relación con el Gobierno, con un régimen de seguridad nacional. Y sobre todo, la presentación de una Iglesia que quiere ser auténtica y que no quiere compromisos con ninguna organización política, a la cual trata de comprender y apoyar en lo justo, pero sin identificarse con ellas. Y pedir a todos los cristianos que construyamos, en nuestras comunidades eclesiales de base, la verdadera Iglesia sin contornos ambiguos, sino que se defina verdaderamente la Iglesia que Cristo quiere construir. Los padres jesuitas comprendieron mi inquietud, dialogamos bastante sobre el tema, y me ayudarán a hacer un esbozo para construir esta carta pastoral, que mediante Dios, saldrá el 06 de agosto próximo.
En la noche, me visita el Doctor González, de la Comisión salvadoreña de Derechos Humanos, y conversamos sobre la situación tan difícil del país y la colaboración que está prestando la Comisión de Derechos Humanos, la Iglesia, y cómo podemos hacer para atraer más elementos vivos en la construcción de la paz del país.
Enseguida vino una comisión de obreros a informarse que había estallado una lucha en la fábrica ADOC, donde se han encerrado unos mil obreros en huelga, pero que están siendo atacados por un operativo militar a esta hora. Traté de comunicarme con el párroco de Soyapango, Padre Villarán, el cual fue a informarse al lugar de los hechos y me dijo que, efectivamente había un sitio en aquel lugar y que no había podido acercarse más porque no permitía el cerco militar que se ha puesto a la fábrica. También hablé con el Padre Moreno, a Santa Tecla avisándole de que estuviera alerta porque lo llamaría, si fuera necesario, para colaborar en la pacificación de esta nueva situación.
Este día he visto al médico, y gracias a Dios, ha encontrado buena mi salud.
Sabado, 07 de abril
Con la Comisión de medios de Comunicación Social, tuvimos el desayuno de reflexión, fue en la casa de las Hermanas Somascas, y discutimos aspectos de las relaciones Iglesia-Gobierno, situaciones nuevas que parecen aflorar como esperanzas en diversos sectores. Trataremos de animar las buenas intenciones que ojalá cuajen en realidades. También estudiamos la preocupación de que se resuelvan las ideologías y praxis políticas con la fe y la praxis de nuestra religión durante la Semana Santa. También se hizo la sugerencia de aclarar ésto y suplicar el mayor respeto al sentimiento religioso del pueblo. Luego estudiamos el resumen de la semana que servirá para la homilía de mañana. Y no hubo tiempo para estudiar la idea o política a seguir en el uso de los medios de comunicación social de la Arquidiócesis. Esto lo haremos en una reunión dentro de quince días.
Por la mañana recibí en audiencia al señor embajador ante la Santa Sede, doctor Lencho Llach, quien se despide para ir a Roma a pasar la Semana Santa, participando en los actos pontificios. Le comuniqué que yo también iría a Roma a la beatificación del Padre Coll, fundador de las dominicas de las Anunciatta y le supliqué intervenir para conseguir mi audiencia privada con tiempo.
Por la tarde, visita al cantón El Pepeto de la parroquia de Soyapango, donde las hermanas del colegio de la Sagrada Familia tienen una bonita catequesis. Compartí la alegría de aquel sector. Llegué a una casita donde me dieron pupusas y chocolate.
El conflicto en la fábrica ADOC parece que ha dejado un saldo trágico del cual informaré después.
Domingo, 08 de abril
Domingo de Ramos. De acuerdo con el párroco de El Calvario, Padre Francisco Sanggiano, tuvimos la bendición de palmas en la fachada del Calvario. había una muchedumbre muy impresionante de gente con palmas. Después de bendecirlas, salimos en procesión hacia la Catedral. En la Catedral se celebró la Misa, en el atrio de la Catedral, ya que la gente era tan numerosa que no hubiera cabido dentro de la Catedral. Prediqué la homilía presentando a Cristo como el mediador de la alianza nueva que llega. Una alianza cuyo mediador se identifica con el pueblo hasta presentarse como Siervo de Dios, humillado hasta la muerte. Pero la alianza nueva que Dios hace con los hombres, es para hacerlos participantes de la glorificación que Cristo consigue con esa humillación. Lamentablemente, es ya el segundo domingo en que hay interferencias en la transmisión por radio. Es muy probable que se trate de interferencia hechas en la misma central de ANTEL. Se trata de estorbar las transmisiones de mi homilías. La parte coral estuvo a cargo del Seminario de los Padres salesianos y la parte ritual a cargo del Seminario de San José de la Montaña. La ceremonia en todo su conjunto resulto esplendorosa. ¡Gracias a Dios!
Al mediodía di lugar a una expansión familiar junto con mis hermanos, almorzamos en la casa de uno de ellos.
Por la tarde fui a bendecir la Torre nueva de la Iglesia de Concepción de Santa Tecla. Su párroco, el Padre Andrés Alvarenga, el señor Alcalde y muchas personalidades y pueblo llenaban el amplio atrio de la Iglesia de Santa Tecla. Tomé la palabra junto con otros seglares, que se dirigieron a aquella muchedumbre en nombre de la parroquia. Celebré la Santa Misa en ese mismo lugar y después saludé cordialmente a la gente.
Después pasé a visitar un grupo de renovación en el Espíritu que hace una convivencia en el Colegio Parroquial, les exhorté a sentir con la Iglesia y a no quedarse solamente en emociones, sino a profundizar en una auténtica renovación en el Espíritu. Advertí un sentido de solidaridad con el obispo; un propósito de ser fiel a la Iglesia jerárquica y a no desobedecer en nada a sus pastores.
Lunes, 09 de abril
Mi principal preocupación de esta mañana fue platicar con los encargados de la radio y de los medios de comunicación del Arzobispado para ver qué se hace y qué significó ayer la interrupción de la transmisión de la ceremonia de Catedral. El Padre Pedraz ya ha comenzado las investigaciones. Y cree, en gran parte de probabilidades, que se trata de una interferencia voluntaria contra la radio católico. Le agradecí y le supliqué que siguiera poniendo las cosas en claro y que hiciera todo lo que estaba a su alcance para normalizar esta situación. Durante el día ha habido nuevas interferencias, precisamente, en los programas en que la radio transmite opiniones críticas de la situación del país. Un agregado técnico de la Embajada Norteamericana, hablando en privado con el Padre Pedraz, le manifestó su repugnancia a esta medida contra nuestra radio. El es un buen católico y está muy solidario con la posición de nuestra Arquidiócesis. Y ha prometido toda su colaboración.
Hoy preparé con el Ingeniero Oliva la grabación para el próximo miércoles, que es la entrevista a través de la radio.
Por la noche fui a San Antonio Abad, en El Despertar se celebró una bonita Misa para dar posesión al Padre Rogelio, que habitará en aquel lugar y se encargará interinamente de la Parroquia de San Antonio Abad. Fue una reunión comunitaria de mucho espíritu familiar.
Martes, 10 de abril
He mandado a reimprimir la carta que el Papa, Juan Pablo II quiere que llegue a todos los sacerdotes con motivo de este Jueves Santo. Ya que nuestra imprenta ha adquirido un sistema moderno de Offset se ha tornado muy fácil esta reproducción de quinientos ejemplares de la carta que he enviado a los otros señores obispos para sus sacerdotes. Y se repartirá a todos los sacerdotes de la Arquidiócesis.
Han continuado este día las gestiones para asegurar una buena transmisión de la radio YSAX. Se ha confirmado que se trata de interferencias.
DIARIO -10 de abril – 27 de abril 1979
Martes Santo -10 de abril (continuación)
Este día han continuado las gestiones acerca de las interferencias de la Radio YSAX, y se ha confirmado que se trata de interferencias voluntarias, para impedir, sobre todo, los programas que se refieren a la situación del país. La YSKL, que aparecía en el Canal de la YSAX, ha declarado públicamente que no es culpa de ella; que sus principios le impiden hacer una acción tan innoble. Esto deja al descubierto que se trata de manipulaciones de mala voluntad y, en concreto, los comentarios de la radio este día se referían a dejar culpable, o por lo menos, de complicidad al Gobierno si no se evitan estas interferencias. En este sentido, también se ha mandado una nota atenta, pero firme, a ANTEL, suplicándole un servicio mejor que evite estas interferencias.
Al mediodía, el Padre Pedraz, una señorita norteamericana y el doctor Italo Vallecillos, de la UCA, me visitaron para confirmar el aviso que telefónicamente me había dado el Padre Chencho Alas acerca de la visita de un Senador de Estados Unidos, que vendrá el próximo Jueves Santo. Planeamos las personas con quienes íbamos a promover esta reunión y se tendrá en el Colegio Belén, de Santa Tecla, donde nos prepararán el almuerzo, para el próximo Jueves Santo.
Por la tarde, fuí a visitar al Padre Crespín que ha estado hospitalizado, pero en su Parroquia de Santiago, de Ciudad Delgado, no lo encontré; solamente pude dejarle saludos ya que él andaba por un cantón de su parroquia, a pesar de su mala salud.
Visité también la otra parroquia de Ciudad Delgado, la de San Sebastián, donde está el Padre Gutiérrez, pero tampoco lo encontré. Los fieles arreglaban al Nazareno en la Oración tradicional del Huerto.
Visité finalmente a la Comunidad de la Madona, donde están las madres Betlemitas para comunicarles mi próximo viaje a Costa Rica y ofrecerme para su servicio, si quisieran mandar algo a su provincial, que reside precisamente en Costa Rica.
Miércoles, 11 de abril
Con el Padre Brito planeamos el reparto de la Carta del Papa a todos los sacerdotes, para que puedan recibirla todos los de la Arquidiócesis el Jueves Santo. También le supliqué ayudarme a conseguir el sacerdote que, en la próxima reunión con el diputado de Estados Unidos, estudie estos dos puntos; la influencia de las transnacionales en la injusticia social de nuestro país y la situación de nuestros paisanos indocumentados en Estados Unidos. A fin de pedir a este parlamentario su colaboración en ambos problemas.
En la Secretaría de Información platicamos ampliamente sobre el problema de las interferencias en la radio, pero al mediodía en el programa de comentarios, nuevamente hubo graves interferencias que no permitieron oír dicho programa ni el espacio de la Secretaría de Información en el cual yo tenía mi habitual entrevista de los miércoles; pero, gracias a Dios, se pudo escuchar en la hora de la noche.
Por la tarde, visité en el Colegio de Fátima de Santa Tecla, la congregación de Hermanas Dominicas, que se preparan para la beatificación de su fundador el Padre Coll, a la cual yo tendré la dicha de asistir en Roma, por invitación de la misma congregación. Platicamos mucho sobre la labor que esta congregación desarrolla en nuestro país, sobre todo, en el Colegio de Fátima y en el Colegio de Suchitoto y en otros campos de promoción humana aquí y en Centroamérica. Estimulé su buen espíritu de adaptabilidad a los sentimientos de nuestra Arquidiócesis. Me dió la impresión de una congregación que verdaderamente es fiel a sus carismas y los sabe poner al servicio de la Iglesia local.
Jueves SANTO, 12 de abril
A las nueve y media comenzó en Catedral la Misa Crismal; asistieron bastantes sacerdotes, tal vez unos 60, lo cual significa mucho, dado que el Jueves Santo todos están muy ocupados. El tema de la homilía fue “EL ESPIRITU SANTO ALMA DE LA NUEVA ALIANZA”. Desde la Misa bajamos con todos los sacerdotes a la cripta y tuvimos una pequeña recepción, fomentando así el sentido fraternal de este día de nuestro sacerdocio.
En las Vicarías, sobre todo en la de Chalatenango, se promovió una reunión con los sacerdotes que no pudieron asistir a la Catedral, y se les entregó ahí los Santos Oleos, recién consagrados.
Para las once y media estaba la reunión con un congresista norteamericano el señor Tom Harkin, que junto con otros que le acompañaban y, de parte nuestra, también el Rector de la UCA, don Pepe Simán, algunos de la Comisión de Derechos Humanos, Beto Cuéllar, del Socorro Jurídico, la señorita Doris Osegueda como encargada de los Medios de Comunicación Social. El objeto era informarse de la situación de la Iglesia y del país. Comenzamos por analizar lo que él mismo había vivido y es la interferencia a nuestra radio católica en los programas del Arzobispado. El Padre EllaCuria le presentó un cuadro de la situación del país, y Beto Cuéllar presentó casos concretos de abuso contra los Derechos Humanos. Allí almorzamos, en el Colegio Belén, y al retirarse, me dió la impresión, que iban satisfechos de su entrevista. El congresista, que es católico, me dijo que a pesar de la distancia tan enorme que nos separa, él se sentiría un feligrés de este Arzobispo. El congresista Harkin es quien ha promovido el apoyo del Congreso de Estados Unidos a la candidatura del Premio Nóbel, recaído en mi persona. Yo le agradecí, lo mismo que el interés que se ha tomado en esta visita y mostramos nuestra esperanza de que este diálogo redunde en un apoyo moral para nuestra Iglesia.
Por la tarde, este representante norteamericano asistió a los oficios de Catedral, la cual estaba bella y muy fervorosa, repleta de fieles. Celebramos la Eucaristía y el tema de la predicación fue “EL AMOR, LEY DE LA NUEVA ALIANZA”. Aproveché para repetir el mensaje de Puebla, a los hombres de América Latina llamándolos a construir la civilización del amor.
Por la noche, un grupo de seminaristas y locutores animaron desde el estudio de la YSAX, la procesión del silencio que se realiza en San Salvador y en varias poblaciones y cantones.
Viernes SANTO, 13 de abril
Gracias a Dios, se pudieron transmitir los tres actos programados: El Vía Crucis, la liturgia de la tarde, y el Santo Entierro. Con la colaboración d Aníbal Romero y de varios seminaristas, creo que se dejó un buen mensaje de este día tan trascendental en la vida de nuestra Iglesia. Y que a través de la radio fueron muchos los que pudieron escucharlo.
Una nota desagradable fue la presencia de la Banda de la Guardia Nacional en la procesión del Santo Entierro. Lo más grave es que algunos de los cofrades del Santo Entierro se oponían a la transmisión en las vocinas de las andas del Santo Entierro, dándoles preferencia a la banda y rechazando así el mensaje que de parte del Arzobispo se transmitía por radio a toda la Arquidiócesis. De lo cual tomó nota el párroco, Padre Sanggiano, a quien pienso también encarecerle que es mejor que no asista este cuerpo de la Banda, ya que pertenece a un cuerpo de seguridad que ha ofendido mucho a la Iglesia y a los cristianos. También que se examine la fe y la solidaridad con el Arzobispo de todos los que pertenecen a asociaciones parroquiales. Porque creo que en otras parroquias también ha habido estos brotes de rebeldía contra la autoridad de la Iglesia al organizar por su parte procesiones o actos de Semana Santa al margen de la autoridad de los párrocos. Haremos una evaluación de la Semana Santa, con la Comisión de Pastoral para mejorar estas situaciones de nuestras celebraciones, que deben ser netamente de la Iglesia.
Sabado SANTO, 14 de abril
Por la noche, celebramos la solemne vigilia pascual. La gente respondió maravillosamente, pues, la Catedral era incapaz de contener el gentío; se abrió la puerta para subir al Coro y aún así tuvo que quedarse mucha gente afuera de la Catedral. La participación de los jóvenes fue muy significativa, también las lecturas que se hicieron todas, fueron hechas por miembros de diversas comunidades cristianas, aún separadas. La parte de la liturgia de la Palabra resultó así una verdadera celebración ecuménica. La alegría cordial se notaba, sobre todo, a la hora de la salida cuando desde la puerta despedí a la gente hasta que una lluvia nos cerró el paso a la salida y tuve que regresar en medio del gentío, que todavía esperaba salida, recibiendo cariñosos saludos y deseando a todos felices pascuas.
Domingo DE RESURRECCION, 15 de abril
El acto principal de este día fue la solemne Misa de Catedral, a la hora de costumbre, a las ocho, pero con un ritual y una presencia multitudinaria del pueblo. La homilía tuvo como título “LA RESURRECCION, SELLO Y CLAVE DE LA NUEVA ALIANZA”. Al final de la Misa impartí la bendición papal y expliqué el sentido de la indulgencia, y la condición indispensable del arrepentimiento y de la fidelidad a Nuestro Señor.
Lunes, 16 de abril
Mi primera preocupación ha sido la situación de la Radio YSAX, ya que han continuado las interferencias puestas intencionalmente contra los mensajes del Arzobispado. Quedamos de acuerdo con el Padre Pedraz, con Monseñor Urioste, de acudir oficialmente a ANTEL y hacerles sentir su responsabilidad en este caso. También se promoverán las congregaciones religiosas y los laicos para que, por su parte, hagan valer este derecho de libertad de expresión de la Iglesia ante el Gobierno, urgiéndole que investigue y evite interferencias contra nuestra radio.
Por la tarde, salí para Costa Rica a la reunión del SEDAC, Secretariado Episcopal de América Central y Panamá, donde me encontraré toda esta semana. En el avión, llevé como compañía un pastor protestante que me había hecho una visita por la mañana en el hospital, manifestando su solidaridad con la línea de nuestra Iglesia y preocupado también del ecumenismo a nivel latinoamericano en las nuevas orientaciones del CELAM. Por mi parte, le dije que al mismo Papa había impulsado el ecumenismo en su nueva encíclica y que cada obispo en su Diócesis era el responsable de los movimientos de la Iglesia. Que, por tanto, el CELAM y cualquier orientación que hubiera en contra o al margen, no eran definitivos. Creo que le dí bastante orientación y ánimo para seguir trabajando en esta línea querida por la Iglesia.
Al llegar a Costa Rica me encontré con varios obispos amigos, de Centroamérica, que iban llegando. Con Monseñor Manresa, especialmente, y con Monseñor Luna nos hospedamos en la casa de la hermanas betlemitas. Al aeropuerto también llegaron muy amablemente, las hermanas carmelitas que ya tenían noticias de mi arrivo a San José.
Durante la cena, en la casa de las betlemitas, recibí dos llamadas telefónicas: Una del Padre Plácido, que se encuentra en San José realizando un curso de eclesiología, y otra del Padre Higinio Alas que está en Heredia y ambos me ofrecieron tener entrevista con gente que se interesa por la situación de El Salvador. Por mi parte, les dije que primero quería ver el ambiente de la reunión de obispos y el horario respectivo para ver las posibilidades y la prudencia acerca de estas entrevistas. El Padre Plácido junto con otro compañero, Agustino, llegaron poco después a visitarme personalmente y me sacaron a dar un bonito paseo nocturno por la ciudad de San José.
Martes, 17 de abril
A las nueve de la mañana me trasladé al local de la reunión del SEDAC, casa de ejercicios de los padres claretianos, pero la reunión comenzará por la tarde, por lo cual, aproveché es mañana y tarde libre para visitar a las hermanas carmelitas en Alajuela y al regresar encontré ya bastantes obispos, aunque todavía faltan algunos.
A las cinco de la tarde se celebró la Misa de inauguración, presidida por el señor obispo de Alajuela, Monseñor Bolaños, que es también Administrador Apostólico de San José. Dió la bienvenida y expresó sus esperanzas en esta reunión.
Después de cena tuvimos una reunión inicial para elaborar la agenda y la mecánica de trabajo. Prevaleció la idea de presentar brevemente las líneas del documento de Puebla y los otros puntos doctrinales que se habían señalado como conferencias, presentarlos como breves puntos de reflexión. Y luego, nos reuniremos por países, para enfocar estas orientaciones de Puebla y con ellas analizar nuestras propias realidades nacionales. De ahí, nos reuniremos para sacar las constantes y los grupos se organizarán en este orden de las constantes que aparezcan de los diversos informes por países. Después, en plenario, estudiaremos conclusiones y la función y los proyectos del SEDAC para el presente y el futuro en nuestra labor evangelizadora.
Miércoles, 18 de abril
La Eucaristía fue presidida por Monseñor Miguel Obando Bravo, Arzobispado de Managua, en su calidad de presidente del SEDAC. Tuvo una homilía para ofrecer a Dios el trabajo, dar la bienvenida a todos los obispos, que ya eran como 30, agradecer al Episcopado de Costa Rica que nos ha dado tan cordial acogida e invitarnos a un trabajo pastoral, que sea verdaderamente útil para nuestra región centroamericana y Panamá.
El trabajo de la mañana ha sido bastante pesado porque hemos oído los trabajos que se habían preparado y han resultado bastante monótonos, aunque han sido buenos enfoques, sobre todo, el de Monseñor McGrath, del documento de Puebla. No se terminaron por la mañana y hubo que ocupar parte de la tarde para seguir oyendo los seis trabajos que se habían preparado. Después sí, nos organizamos en comisiones por conferencias episcopales para estudiar, a la luz del documento de Puebla, las oportunidades y las dificultades que presentan nuestros países a la realización de los ideales propuestos por Puebla, como evangelización en el presente y en el futuro.
En una de las plenarias, el mediodía, se leyó el telegrama que vamos a escribir al Santo Padre, el cual me fue encargado junto con Monseñor García Aráuz de Guatemala; lo redactamos en nombre de todo el episcopado de Centroamérica y fue aprobado en su primera lectura.
El trabajo de conferencias episcopales resultó muy interesante. Nuestro grupo de El Salvador iba estudiando diversos aspectos presentados en los trabajos. De mi parte, propuse que debíamos presentar con toda franqueza nuestra realidad eclesial y nacional; comenzando por la división de los obispos y por los diversos problemas de relaciones con el Gobierno y de los que han sufrido verdaderos martirios por la Iglesia y otros aspectos que son materia conflictiva de nuestras relaciones episcopales. El tema resultó muy fecundo, pues, como dijo Monseñor Luis Chávez y González que también está entre nosotros; “fue duro el bombardeo”, me dijo, refiriéndose a que se me había acusado en muchas intervenciones como si yo fuera el culpable de divisiones y de malestares, hasta de la politización del Clero.
Por la noche, recibí en visita a dos universitarios que me ofrecieron traerme la copia del informe de la Comisión de Derechos Humanos de la OEA, que lo han reproducido para difundirlo en Costa Rica. También tuve una entrevista con el canal 06 de televisión y el cual debió de pasar esta misma noche.
El plenario de la noche fue para informar sobre nuestras reuniones de conferencias episcopales, y la seis conferencias dieron informes muy realistas, muy valientes, muy francos; de donde dedujimos, al final, las constantes; resultaron 12 temas muy importantes, y se van a reunir en grupos para estudiarlos más detenidamente el día de la mañana.
Jueves, 19 de abril
Presidió la Eucaristía, Monseñor Arrieta, obispo de Tilarán y presidente de la Conferencia Episcopal de Costa Rica. En su homilía nos habló de la unidad episcopal; del sentido de servicio de nuestro Ministerio y de una comprensión fraternal para todos nuestros sacerdotes.
Después del desayuno preparé un informe que me pidieron para el ex-seminarista Mauricio Oliva. Lamentablemente tuvo que ser un informe negativo.
La Asamblea Plenaria de esta mañana se dedicó a dar una explicación sobre el CELAM y su última reunión tenida en Teques, Caracas, Venezuela, explicaron Monseñor Arrieta, que es Vice-presidente por Centroamérica, y Monseñor Manresa, que fue el Vice-presidente anterior.
Jueves, 19 de abril(continuación)
La actividad dentro de la reunión continúa en pequeños grupos y en plenarios. Se va perfilando una conclusión, que se manifestará en un boletín de prensa muy claro en objetivos, de acuerdo con la iluminación que hemos estado recibiendo de Puebla, del documento de Puebla, que será sin duda carta Magna de nuestra pastoral durante mucho tiempo.
Este día fui a almorzar con un grupo de cristianos ecuménicos. Vienen de diversas partes de América Latina y se dedican a la pastoral, principalmente entre campesinos e indígenas. Tuvieron mucho interés en conocer la experiencia de El Salvador. Conmigo participaron, como salvadoreños, el Padre Plácido, el Padre Higinio Alas y dos seminaristas que estudian en San José.
(Hay aquí un defecto en la grabación, ruego perdonar, y esperar un pequeño silencio para que continúe el relato en los actos de la tarde).
Las reuniones por la tarde fueron una plenaria para recoger las conclusiones de la mañana. Y la de grupos por conferencias episcopales, para sacar conclusiones propias para nuestros países y llevar sugerencias al SEDAC, que tendrá lugar en la reunión plenaria de la noche. No pude participar grandemente en las de la tarde por atender a varias visitas.
La primera, del coronel Claramount, desterrado, candidato del Partido UNO. Me expresó su optimismo y su esperanza de volver pronto al país y seguir trabajando por la patria. Yo traté de animar esas esperanzas. la segunda visita fue por la noche; periodistas universitarios, para tener una entrevista para su periódico universitario. Tratamos el tema de las relaciones Iglesia y Estado y la situación de la Iglesia especialmente en el país. Me preguntó también sobre mi criterio al ser postulado al Premio Nóbel. En este mismo sentido fue la tercera visita de la tarde de un grupo que se llama “Comité Pro-Premio Nóbel, pro derechos humanos de El Salvador”. Ahí trabaja, orientado, el Padre Higinio Alas; estuvo nuevamente el Padre Plácido, asistió el doctor Castillo, el hermano del Lic. Baires y otras personas salvadoreñas y costarricenses a quienes agradecí este noble gesto, aceptándolo no en mi carácter personal, sino en la pastoral que trato de llevar en la Arquidiócesis y la cual corresponde a inquietudes de pastores y comunidades de diversos puntos del Continente. La última visita, ya a las ocho y media, fue del Cónsul de El Salvador, el doctor Granillo, a quien conocí desde niño en San Miguel; perdón, la última visita fue de un grupo del demócrata Cristiano que se encuentra desterrado, entre ellos el Ing. Napoleón Duarte y el doctor Antonio Morales Erlich, quienes querían recabar datos de la Iglesia, en sus últimos momentos en El Salvador; así como también manifestarme su deseo de colaborar y servir y de pedirme también la colaboración dentro de la línea pastoral. Hablamos ampliamente y les expresé mi sentido de servicio y mi esperanza en los hombres políticos que tengan verdadero amor a la Iglesia. Y, sobre todo, si tienen inspiración cristiana. Ya eran las doce da la noche y tenía que madrugar para ir al Seminario donde les prometí celebrar la Misa a la seis y media de la mañana. Ha sido un día que me ha llenado de muchas satisfacciones; así como también he tenido momentos de desilución, al pensar en la división de nuestro Episcopado salvadoreño.
Viernes, 20 de abril
Atendiendo una invitación del Seminario Mayor, fui a celebrarles la Eucaristía a la seis y media de la mañana. En la homilía elogié las características de la juventud y cómo en un seminario, la juventud Dios la quiere aprovechar para rejuvenecer la vocación sacerdotal, de tal manera que aún los que ya somos sacerdotes y vamos avanzados en la vida, encontramos en la juventud del seminario la imagen de esa resurrección de Cristo, siempre joven, siempre alegre, nunca aburrida, o sea la vida de la Iglesia, a la que nosotros como sacerdotes tenemos que servir. En este sentido también les elogié, con las palabras del Papa en su carta a los sacerdotes, la razón de ser del celibato, como un servicio de testimonio de una vida distinta de la vida mundanal, al pueblo de Dios. El Padre Montesinos, que me habían llevado y concelebró conmigo, me regresó pasando nuevamente por la casa de ejercicios para recoger algunos documentos, ya que no podía quedarme hasta terminar la reunión de los Obispos. Que según me contaron después resultó muy edificante y se vió la conveniencia de seguir sustentando este organismo del Episcopado Centroamericano, el SEDAC.
Las religiosa carmelitas, que están en Alajuela, me esperaban para llevarme luego al aeropuerto, pero antes, ya que había tiempo, fuimos a visitar al hermoso balneario Ojos de Agua, que está vecino a Alajuela. En el aeropuerto me junté para el viaje con Monseñor Ham, auxiliar de Guatemala, y Monseñor Gerardo Flores, de Alta Verapaz, también de Guatemala, con quienes viajé un viaje muy agradable, una conversación muy interesante, muy pastoral de San José a San Salvador. En San Salvador, me esperaba la familia Barraza y mi hermana, quienes me condujeron a mi residencia, en el Hospital de la Divina Providencia. Fraternizando con esta comunidad que me ha dado tan cariñoso alojamiento, les conté mis impresiones y me contaron también las novedades de la semana. Y finalmente, por la noche, vimos en preciosas diapositivas proporcionadas por la Congregación de Dominicas de la Anunciata, las diversas actividades que esta congregación tiene en El Salvador, en Guatemala, en Costa Rica y en Nicaragua. Es una revista muy oportuna ya que será beatificado el fundador de esta Congregación, Padre Francisco Coll, Catalán. Será beatificado en la primera ceremonia de este estilo, que celebrará el Papa Juan Pablo II en Roma, el domingo 29 de abril, a donde por invitación y generosidad de las religiosas, tendré la dicha de asistir, si Dios quiere.
Sabado, 21 de abril
Tuvimos, como todos los sábados, nuestro desayuno de consulta con los medios de comunicación social. Estudiamos ciertas solicitudes que hacen organizaciones de obreros, de campesinos para tener campos pagados en la emisora católica. Así también, la Comisión de Derechos Humanos de El Salvador pide un espacio en nuestra radio. Se admitió, pero exigiendo también la censura de todo lo que se publique. Se planificó para el 1o. de Mayo, programaciones especiales en que se dé a conocer la doctrina de la Iglesia, sobre el obrero, sobre el trabajo. Se citarán textos, que están muy numerosos, del Papa Juan Pablo hablando principalmente a los obreros. En esta reunión también consulté la actuación que debe tenerse en Roma con motivo de mi próximo viaje y de la entrevista que, primero Dios, tendré con el Santo Padre.
Se hicieron revelaciones muy graves acerca de la connivencia de ciertos actos violentos y asesinatos, connivencia con el Gobierno. Este caso era el intento de asesinato del doctor Méndez, miembro de la Comisión de Derechos Humanos, que actualmente se encuentra herido de una pierna, donde le alcanzó un balazo cuando tirándole a matarlo. Para mañana, si Dios quiere, por la noche, haré una visita a este colaborador que ha enfrentado el riesgo próximo de un asesinato en su propia vida.
Se habló también de otros trabajos de los medios de comunicación social. Hacia las once y media tuve una entrevista de prensa con el señor Lewis Wilton miembro de la Prensa Asociada, en nombre de la cual me hizo la entrevista, sobre la situación de la Iglesia en este país y sobre algunos puntos doctrinales de nuestra pastoral.
Invitado por el Padre Modesto Villarán, fui a Candelaria, Cuscatlán a celebrar la Misa del papá y mamá del Padre Villarán, quienes cumplen 50 años de casados. La fiesta se hizo más interesante porque un hermano del Padre Villarán con su señora se arrodillaron al lado de los festejados, porque también ellos eran festejados al cumplirse precisamente en este día, veinticinco años de vida matrimonial.
Domingo, 22 de abril
Anuncié en la homilía de Catedral el programa de predicación durante la pascua. Iremos viendo los diversos bienes pascuales, es decir, todas aquellas riquezas de la redención que las lecturas bíblicas nos van proponiendo. Para este domingo señalé “EL DON DEL ESPIRITU SANTO”, dado por Cristo el mismo día de la resurrección. Segundo, “EL DON DE LA FE”, en el episodio de Tomás y en la segunda lectura donde Juan nos habla que esta es la victoria que vence al mundo, nuestra fe. Y el tercer don “EL AMOR SOBRENATURAL QUE CREA LA VERDADERA COMUNIDAD CRISTIANA”. Lamentablemente, también hoy hubo interferencias de la radio católica, que no permitieron una trasmisión limpia de nuestra homilía, pero la emisora se ha inventado la manera de trasmitirlo después de la Misa en la planta de la antena.
Después fuí a San Pedro Perulapán donde varias veces he fallado por dificultades imprevistas. Hoy fui a renovar con aquella comunidad parroquial los compromisos bautismales y de la confirmación. Les expliqué el sentido de la pascua y de la comunidad cristiana que vive de ese misterio. Sentí mucho no quedarme al almuerzo con el padre, a pesar de las insistencias de él, pero siguiendo recomendaciones muy sabias, no quise ir a comer a un comedor público donde estaba preparado el almuerzo.
Noté, además, en el Cuartel de la Guardia Nacional, ciertas vigilancias que me parecieron inconvenientes seguir formentando con mi presencia en el pueblo.
Por la noche, celebré la Santa Misa en la parroquia de la Resurrección, Colonia Miramonte, donde los padres agustinos, siguiendo tradiciones de los párrocos anteriores, celebraron como fiesta patronal y después de la Misa ofrecieron un ágape fraternal a toda la comunidad. El tema de la predicación fue “La comunidad parroquial continúa, bajo el soplo de Cristo Resucitado, la misión de la Iglesia que Cristo le confió”. Misión que supone cruz y martirio, como lo testimoniaba el sepulcro del Padre Navarro, párroco asesinado en su misma parroquia, pero que es dolor que luego es asumido en la transformación en la victoria de Cristo resucitado, como él asumió su cruz y sus humillaciones en el mérito glorioso de su resurrección.
Después de Misa fui con el Padre Moreno y el señor Cuéllar a visitar al doctor Méndez, que fue en esta semana víctima de un atentado contra su vida. Gracias a Dios, el doctor solo sacó un balazo en la pierna y está recuperándose con bastantes probabilidades de que pronto estará muy bien. Se que este atentado fue inspirado por maniobras del mismo Gobierno, lo cual el mismo doctor no lo sabe.
Lunes, 23 de abril
Una breve conversación con el Padre Rafael Palacios, párroco de San Francisco, en Mejicanos, y con la religiosa belga, María. Pudimos constatar que en el trabajo pastoral de aquella parroquia se encuentra bastante infiltración política y que el padre está dispuesto a limpiar toda esa interferencia, para aparecer una parroquia verdaderamente pastoral.
Fui a Chalatenango para conversar con los seminaristas menores y almorzar con ellos. Fue un diálogo muy cordial y muy interesante en el cual, al final, participaron también las religiosas de La Asunción que forman comunidad en aquella parroquia.
Al regresar tuvimos una reunión con Monseñor Urioste, el Padre Pedraz, encargado de la radio, y el Padre Moreno, del Secretariado de Comunicación Social. El punto principal fue tratar sobre las interferencias de la YSAX. Se acordó que el Padre Pedraz, como encargado con la radio, junto con Monseñor Urioste, irán a ANTEL llevando una nota para pedir una solución eficaz a este problema.
Mañana tendremos, después de ésto, una reunión para ver que se hace, teniendo en cuenta la conversación tenida con el presidente de ANTEL, que será visitado mañana.
Por la noche, una interesante reunión en la Parroquia de San Sebastián, de Ciudad Delgado. El párroco, Padre Juan Antonio Gutiérrez, me invitó a tener una reunión con los dirigentes de aquella pastora, pero al llegar me encontré la Iglesia completamente llena de fieles, con los cuales tuvimos que hacer la reunión, invitándoles a comprender cuál es la verdadera misión y figura de la Iglesia y, a partir de esa verdad, discutir la división que hay entre los fieles de dicha parroquia. Se expresaron en unas participaciones muy francas los sectores tradicionales y los elementos de renovación que, bajo el título de “Familia de Dios”, trabajan en la pastoral tal como la Arquidiócesis la ha perdido. Fueron muy útiles todas las intervenciones. De mi parte, recomendé varias veces la unidad, el sentido trascendente del trabajo de la Iglesia y, sobre todo, estudiar cada vez más que es la Iglesia, para concretar nuestro trabajo pastoral a construir la verdadera Iglesia de Jesucristo.
Martes, 24 de abril
Fui a Santa Tecla por la mañana a confesarme y a visitar al Padre Isidro, que sufrió un accidente cuando viajaba para Santa Ana; gracias a Dios, no ha sido muy grave y ya está en vías de recuperación. Después de pasar brevemente por las oficinas del Arzobispado, me fui a Domus Marie a participar en la reunión de lo Cooperativa Sacerdotal. Había una asistencia de sacerdotes muy numerosa y los directivos de la Cooperativa informaron ampliamente sobre el florecimiento económico de nuestra Cooperativa Sacerdotal, “ARS”.
Por la tarde, preparé con Monseñor Urioste la entrevista que se transmite por radio todos los miércoles a la una de la tarde. Entre los temas sobre los que dialogamos se encuentra mi viaje a Roma, impresiones sobre la reunión de obispos en Costa Rica; también se habló sobre las interferencias de la radio y un diálogo que este día ha tenido Monseñor Urioste y el Padre Pedraz, encargado de la radio, con el señor presidente de ANTEL.
Miércoles, 25 de abril
Toda la mañana la dedicamos a la reunión del Consejo de Pastoral. Vinieron los diez vicarios y las representaciones de religiosas y de laicos que trabajan en la pastoral. Se va perfilando cada vez más este Organismo en el cual tengo muchas esperanzas para la coordinación y la animación de la pastoral en todas las Diócesis.
Las religiosas del Colegio de la Sagrada Familia tuvieron la bondad de darnos un refrigerio y así pudimos llegar nuestra reunión hasta la una y media de la tarde.
Monseñor Urioste, Vicario General, y el Padre Pedraz, como encargado de la radio, fueron recibidos en audiencia con el Ministro de Interior; el asunto de la audiencia es la interferencias que se están haciendo a nuestra radio católica. Hoy por la mañana, en el desayuno, nos reunimos con el Padre Pedraz, el Padre Moreno, Monseñor Urioste y el bachiller Cuéllar para tratar el mismo asunto de las interferencias, después de haber asistido el padre Pedraz y Monseñor Urioste a una entrevista con el presidente de ANTEL. La atención del señor presidente de ANTEL fue muy exquisita y prometió hacer todo lo posible por evitar estas interferencias. Nos informaron de un diálogo muy interesante, en el cual también Monseñor Urioste hizo ver al señor Ministro la popularidad de nuestra radio y la ofensa a los derechos de expresión que supone todo atropello a nuestra Emisora.
Jueves, 26 de abril
Ha sido un día de preparación para mi viaje a Roma. Sobre todo, llevo una recopilación de documentos y de testimonios de solidaridad con la Arquidiócesis, por si es necesario en Roma tocar este punto. Pero voy, más bien a escuchar ya que se han dado bastantes informes de nuestra situación.
Ha habido muchas visitas de despedida y hay bastante cariño en la gente. En la tarde estuve con los seminaristas mayores y menores. Después de expresarles mi admiración por la vocación que el Señor nos ha dado, pedía ser fieles y leales con esa vocación recibida de Dios. Continuó una serie de preguntas, principalmente, cuando se trató de la pastoral de nuestra Semana Santa. Es consolador ver como nuestros muchachos en el Seminario, compartiendo la vida pastoral con las comunidades de base, se identifican, pero llevándoles el pensamiento del Evangelio y de su Iglesia. Celebré la Eucaristía también con los padres del Seminario y con el pleno de los muchachos en la capilla. En la predicación resalté la juventud como signo de renovación, de inquietud, de exhaltación a las cosa audaces. Les invitaba a orientar con criterio evangélico y cristiano y especial todos esos ímpetus juveniles, para ser que su juventud sea una continua pascua ¡Un Cristo que resucita para no morir más!
He llegado hasta muy noche preparando la valija para mañana.
Viernes, 27 de abril
Después de celebrar la Santa Misa en el Hospital de la Divina Providencia, en un carro de las madres dominicas de La Anunciata, fui llevado al campo de aviación; donde tomé la TACA que me condujo a Guatemala donde me esperaba la provincial de la congregación, que me ha obsequiado este viaje hacia Roma y en el avión IBERIA nos dirigimos, hacia el mediodía hacia España, Hicimos escala en Managua, luego en Santo Domingo, donde tuvimos que esperar tres horas porque había algún desperfecto en el avión, pero no era sustancial. Pudimos recorrer la amplia tienda libre de aquel aeropuerto. Y ya muy tarde, casi anocheciendo salimos para España. Vuelo sin novedad, sobre el mar toda la noche. Se distrae la atención de los viajeros con películas, con comidas y, por el retardo, llegamos a Madrid hacia el mediodía, después de una noche sumamente breve ya que vamos al encuentro del día en este vuelo hacia Europa.
No pudimos empalmar…
Sábado 28 de abril(continúa)
La noche en que uno vuela de América a Europa es una noche sumamente breve. Y ya amanecimos el sábado 28 de abril en Madrid; por el retardo que tuvimos en Santo Domingo, es ya el mediodía de este sábado. Y por haber perdido la combinación de avión que nos llevaría a Roma, por el retraso sufrido en Santo Domingo, se nos dá un vuelo en ALITALIA, pero con el descuido de no habernos embarcado nuestras dos vasijas. Al darnos cuenta en Roma, a donde llegamos como a las 03 de la tarde, reclamamos en ALITALIA, la cual únicamente nos prometió hacer el reclamo a Madrid. Pero no contentos con esperar el resultado de un reclamo, pensamos que en los vuelos subsiguientes podía llegar esa misma tarde nuestro equipaje y así pasamos esperando hasta la diez de la noche en que llegó el último vuelo sin traer nuestro equipaje. Entonces sí encarecimos al señor encargado de ALITALIA que hiciera el reclamo y que nos urgían nuestra valijas. Nos prometió enviarlas a nuestro hospedaje cuando llegaron.
En un taxi de un señor ya bastante de edad, pero muy amable, nos condujo a la casa de las madres dominicas de la Anunciata que tienen en Monte Mario para huéspedes. Todavía encontramos algunos obispos españoles que estaban cenando, pues habían llegado tarde como nosotros y así pudimos compartir la cena que no habíamos tomado.
Así transcurre otro día verdaderamente dichoso, porque encontrarme en Roma, para mí, siempre es una bendición del Señor.
Domingo, 29 de abril
¡Este amanecer en Roma evoca tantos recuerdos! Estos paisajes que yo conocí cuando estudiaba mi Teología, cuando me ordené sacerdote y viví mis primeros meses sacerdotales, es una renovación para mi espíritu. Ahora, con nuevas responsabilidades, siento que Roma es una bendición del Señor que confirma mi misión, mi trabajo, que Dios comparte dándome esa dicha de poder colaborar humildemente en la implantación de su Reino en el mundo.
Es el día de la beatificación del Padre Francisco Coll, fundador de las religiosas dominicas de la Anunciata. Pero hasta hoy me doy cuenta que no solamente él será beatificado, sino el Padre Labal, un francés que trabajó en la evangelización de los negros liberados de la esclavitud. Las dos figuras, dos grandes misioneros, dos grandes evangelizadores. El Papa destacó en su homilía esta característica que coincide con sus principales preocupaciones de la catequesis, para lo cual prepara un próximo documento tomado del Sínodo de 1977, que fue precisamente sobre la catequesis.
Como no tenía ropa, pues mi valija no ha llegado, un obispo, el señor obispo de Tarragona, me prestó una sotana y una faja que me quedaron exactamente a mi medida. Una providencia también del Señor porque así pude entrar con los obispos a un puesto muy distinguido en la ceremonia de la beatificación.
He visto de cerca al Santo Padre, he gozado con aquel coro, con aquella participación del pueblo. No hay duda que la renovación litúrgica ha cambiado notablemente el triunfalismo de otros tiempos en una verdadera asamblea de oración, de reflexión.
El Papa, con su sencillez característica, sin silla gestatoria, caminando con todos los concelebrantes, es objeto de un entusiasmo cada vez mayor.
A la hora de la beatificación se descubre, como siempre, en la gloria de Bernini, las dos imágenes de los dos nuevos beatos y son saludados con un caluroso aplauso y con el Te Deum, mejor dicho con el canto del Gloria a Dios en el Cielo. Luego siguen las lecturas. Se leyó la primera lectura en español en honor al Padre Coll; la segunda, en francés, en honor al beato Labal y el Evangelio en latín.
El Papa pronunció una preciosa homilía en que unió las glorias de los dos beatos y las orientó hacia la preocupación actual de la Iglesia, que es la verdadera evangelización y la catequesis de los hombres.
Cuando salíamos era ya casi el medio día. El Papa, a pesar del cansancio de la ceremonia, tuvo una audiencia para las dominicas y para todos aquellos que se han interesado y participan en esta beatificación. Y a las doce, un poco pasadas, se asomó como de costumbre al balcón de su habitación desde donde dirigió nuevas palabras en torno al concepto de la catequesis y de los dos ejemplos de evangelizadores que eran los dos nuevos beatos. Dijo que para él era un día sumamente importante porque, por primera vez, hacía este servicio de pontífice a la Iglesia, de darle dos nuevos ejemplares de santidad y esperaba que fueran sus grandes protectores en el cielo. El discurso fue interrumpido varias veces por el aplauso de aquella plaza que estaba completamente llena. Al final evocó cosas concretas de la semana, felicitó, se unió en oración a muchas intenciones de Roma y del mundo. Mencionó los conflictos de Uganda y de otras partes del mundo pidiendo oraciones por la paz. Y así rezamos con esta motivación el Regina Celi, que es la oración del medio día a la Virgen, en el tiempo pascual.
Al regresar a la casa de las hermanas dominicas encontré varias personas conocidas entre las religiosas, obispos y sacerdotes, ya que las hermanas habían convidado para una recepción y un almuerzo que resultó sumamente fraternal y animado.
La tarde la dediqué al descanso y por la noche, después de cena, salí para conocer la ruta que me conecta con la Plaza Risorgimento, que ocuparé para mis diligencias en Roma. Es un camino sumamente breve desde el hospital de la Universidad Gemeli, donde tiene su terminal la ruta 50, hasta Piaza Risorgimento que está muy cerca del Vaticano donde también tiene su terminal. Me parece, pues, un servicio muy útil para mi situación. Después de dar una vuelta por la Plaza de San Pedro, ya no se ve iluminada la ventana de la habitación del Papa; parece que está en reparación y él vive en otro lado. Regresé con la satisfacción de haber vivido un día tan lleno y feliz en esta Roma inmortal.
Lunes, 30 de abril
La provincial de Centroamérica de las hermanas Dominicas, la Madre Nieves, me dá la grata noticia de que ya contestaron de ALITALIA que ya me encontraron las valijas y que ella irá a recogerlas al aeropuerto. Yo salí hacia el Vaticano para ver el resultado de mi solicitud de audiencia con el Santo Padre.
Una lluvia torrencial me impidió caminar más rápido y luego me encontré, sorpresivamente, con la casa donde fabrican sotanas y se venden todos estos asuntos eclesiásticos y perdí gran parte de la mañana en este negocio que, por otra parte, fue muy oportuno para dar tiempo de que me hagan dos nuevas sotanas.
Compré un traje clergyman y fui al Vaticano, donde lamentablemente no encontré al prefecto de la casa pontificia, quien tendría la razón que darme acerca de la audiencia. Solamente me dijeron que preguntara al día siguiente.
Esta tarde, en un teatro dominico, se representó en una forma muy artística, aspectos de la vida del nuevo beato dominico, el Padre Francisco Coll. Los números eran representados por jóvenes de Barcelona la mayoría.
Y de ahí nos dirigimos a la Iglesia de los dominicos, en la Plaza Minerva, donde concelebramos, presididos por el Cardenal de Barcelona, unos sesenta entre obispos y sacerdotes, y la Iglesia completamente llena de religiosas y de peregrinos que habían venido a la peregrinación, a la beatificación del Padre Coll. Fue impresionante esta concelebración y un nuevo motivo de santificación para la congregación fundada por este ilustre dominico. Por mi parte, sentí la alegría de esta vida de la Iglesia que siempre es fecunda en santidad.
Por la noche nos mostraran, en la cena, más de ciento cincuenta retratos tomados en la ceremonia de la beatificación para que señaláramos los que quisiéramos comprar; pero como son sumamente caros, más de tres dólares cada uno, había que limitarse en las peticiones.
Martes, 01 de mayo
En Roma, el primero de mayo, día del trabajo, se suspende toda actividad comercial y también dejan de circular los buses por donde uno puede conducirse a diversas partes. Para aprovechar este día, sin embargo, tuve que ocupar taxi bastante caros, pero así pude ir a preguntar nuevamente a la casa pontificia por mi audiencia con el Papa; pero también la casa Pontificia, la prefectura de la casa pontificia, estaba cerrada. Y a pesar de que un guardia suizo me dejó tocar la puerta, me dí cuenta que era de más esperar.
Me dirigí luego a la casa generalicia de los padres jesuitas, donde un asistente del padre general, de América del Sur, me recibió muy amablemente, indicándome que los de Centroamérica estarían hasta por la tarde. Y me dió esperanzas también de una audiencia con el Padre Arrupe. Una vez que conoció mi nombre, el Padre se mostró mucho más atento y agradecido por lo que se ha hecho en nuestra Arquidiócesis por la Compañía de Jesús.
Luego me dirigí a la casa generalicia de las Oblata al Divino Amor, donde sorprendí muy gratamente a la madre general, la Madre Gloria. Ahí también saludé a la Madre Valle y a todas las religiosas del Consejo Superior. Me invitaron a almorzar con ellas y departí momentos muy cordiales. Tuvieron la bondad, la madre general y la Madre Juana, que es amiga ya de la visita anterior, de conducirme en carro hasta mi posada, donde las madres dominicas, en Monte Mario.
La tarde se ocupó en la concelebración, a la seis de la tarde, en la hermosa Basílica del Corazón de María, donde los padres claretianos, para significar una antigua amistad con el nuevo beato Padre Coll, invitaron a los dominicos. El padre general de los dominicos y el Padre general de lo claretianos asistieron al celebrante principal que fue el Cardenal Tarancón, a quien saludé y también muy amablemente me ofreció su casa en Madrid cuando pasara por allá.
La concelebración estuvo espléndida, lo mismo que ayer; unos 60 entre obispos y sacerdotes, y el amplio templo completamente lleno de religiosas y de peregrinos. Predicó el padre general de los claretianos sobre las similitudes entre esto dos santos, San Antonio María Claret y el Padre Francisco Coll.
Al regresar a la casa me dieron razón que el Padre Arrupe tenía mucho interés en platica conmigo y que hablara para concertar la visita, lo cual haré mañana, di Dios quiere.
Miércoles, 02 de mayo
Hoy participé en la audiencia general del Papa. Tuvo lugar en la Plaza de San Pedro ya que la cantidad de peregrinos ascendía a uno ciento treinta mil personas; entre ellas estaba el numeroso grupo de religiosas dominicas y de peregrinos que habían venido a la beatificación del Padre Coll, así como también los religiosos y peregrinos de la beatificación del Padre Labal, y muchos peregrinos más que llenaban completamente la plaza.
El Papa sale por la puerta de las campanas y recorre en jeep, en diversas direcciones la plaza, saludando cariñosamente a todos. La muchedumbre, naturalmente, aplaude cuando el Papa pasa junto a ellos. Al bajarse del jeep y dirigirse a la sede, todavía se entretiene varios minutos más platicando y dando la mano a los que están en el trayecto. Y desde la Cátedra invoca el nombre de la Santísima Trinidad y da comienzo la alocución después de señalar, el Secretario, los diversos grupos de habla italiana. El tema que abordó el Papa fue el de la Santísima Virgen María ya que nos encontramos comenzando el mes de la Virgen, que coincide con el tiempo pascual.
Los conceptos profundos y agradables van saliendo de la boca y del corazón del Papa, el cual culmina con un sentido de nostalgia, al mencionar a la patrona de su pueblo, Nuestra Señora de Czestochowa, a la cual él visitaba al principio de mayo cuando se celebran allá a las fiestas patronales, y hoy no podrá asistir, pero que en principio de junio asistirá con todos los obispos y demás peregrinos que saldrán al encuentro del Papa en su visita a su país.
El Papa dirigió también el saludo y el mensaje abreviado en lengua francesa, alemana española, catalana, portuguesa. Al terminar sus palabras llamó junto a su trono a todos los obispos que éramos unos cuarenta y junto con el Papa dimos la bendición. Después fue saludando uno por uno, allí en el mismo trono. Al estrecharle la mano y pedirle una bendición para la Arquidiócesis de San Salvador, él me dijo que tendríamos que platicar en privado, lo cual -le dije- que era mi mayor deseo y que había solicitado la audiencia. Espero que el Papa me concederá esta audiencia privada y por eso no le entregué los papeles que llevaba preparados como memorandum, por si no era posible tener la audiencia, que quedaran en sus manos varios asuntos que deben completar el informe del Visitador Apostólico. En el memorandum le pregunto al Santo Padre sus orientaciones, después de las informaciones que, sin duda, habrá traído muy abundantes el Visitador Apostólico, así como le dejé fotocopia de la carta mandada en noviembre con la diversidad de problemas que, como metropolitano, informaba a su Santidad acerca de la situación de la Iglesia y del Estado en nuestro país.
Ahí mismo, al bajar de la sede del Papa, platiqué con Mons. Martín y Mons. Monduzzi, encargados de organizar las audiencias, para rogarles encarecidamente la audiencia que solicité desde antess de Semana Santa. Me dieron esperanza, pero para la semana próxima.
Insistiré, porque es mi mayor deseo y mi mayor necesidad conversar con el Papa en esta visita a Roma.
Por la tarde, fui a la Curia generalicia de los jesuitas, donde saludé al Padre Juan Bosco y con el cual concertamos la conferencia telefónica del miércoles para transmitirla por nuestra emisora YSAX. En Salvador hablaba para este diálogo Monseñor Urioste y el diálogo se refirió a las diversas formas en que he encontrado a Roma, y principalmente, la ceremonia de la beatificación del domingo, la audiencia de este día y también el rezo del Regina Celi en la Plaza de San Pedro.
Informé que el Papa, en esta temporada breve que he estado yo en Roma, ha ejercitado un magisterio muy abundante de doctrina principalmente acerca de la Santísima Virgen María, acerca de la catequesis, de la cual eran modelo los dos beatificados, acerca de la vida religiosa que se ha visto con motivo de estas beatificaciones de dos religiosos, muy representada en Roma. Y referí también como el Papa felicitaba y agradecía a todas las personas que se dedican a la catequesis, recomendándoles que fueran como los dos bienaventurados, testigos vivientes, que viven de verdad la resurrección de Jesucristo, como el Señor dijo en el Evangelio del domingo recién pasado: “Me conoce el que guarda los mandamientos”.
Me convidaron los jesuitas para almorzar mañana con el Padre Arrupe, así como también con otros jesuitas que tienen interés en dialogar conmigo acerca de la situación de El Salvador y de otras circunstancias que también a mi me servirán de mucho. También recibí invitación de los padres claretianos para ir a cenar mañana a la Iglesia del Corazón de María con el Padre General de los claretianos. Lo haré con sentimientos de gratitud para las comunidades claretianas que trabajan en nuestra Arquidiócesis.
Jueves, 3 mayo
Obispos y sacerdotes españoles que han venido a la beatificación del Padre Coll y estaban en la residencia de las hermanas Dominicas, han regresado a sus residencias durante todo el día. me he quedado bastante solo, pero he ocupado el día en arreglar algunos asuntos. En primer lugar, fui a la prefectura de la Casa Apostólica para concertar mi audiencia con el Papa que posiblemente tendré el miércoles o jueves de la próxima semana, porque me explican que hay muchos obispos en visita Ad Limina y ellos tienen la preferencia en estos días. Expliqué, por mi parte, la urgencia de ver al Papa dada la situación de mi Diócesis y mi situación de estar tan lejos y querer aprovechar el tiempo en otros asuntos también. Sin embargo, caigo en la cuenta, y he de tener paciencia para esperar mi turno.
Fui luego a pedir las audiencias con el Cardenal Prefecto de la Congregación para los Obispos, Baggio, y el Cardenal Pironio, Prefecto de la Congregación para los Religiosos. A este último, más bien, en carácter amistoso.
Fui a almorzar a la Curia Generalicia de los Padres Jesuitas. Y me hicieron el honor de ponerme en la mesa del Padre Arrupe con quien conversé antes de almuerzo sobre la situación eclesial de mi país. Y él también me contó varios proyectos de la Compañía en América Latina. El Padre Juan Bosco Estrada, muy buen amigo de la Curia Generalicia, me cedió después de almuerzo su cuarto para hacer un rato de siesta. Conservé también con varios jesuitas que se interesaron por la situación del país, la cual es muy importante dado el trabajo mundial que aquí se lleva.
Visité luego, bajo una tarde primaveral, la Iglesia de los Doce Apóstoles, bajo cuyo altar de la confesión se encuentra la tumba de los apóstoles San Felipe y Santiago el Menor, cuya fiesta se celebra litúrgicamente este día 03 de mayo.
Olvidaba decir que por la mañana hice también una nueva visita a la Basílica de San Pedro y junto a los altares, muy queridos de San Pedro y de sus sucesores actuales en este siglo, pedí mucho la fidelidad, “A” mi fe cristiana y el valor, si fuera necesario, de morir como murieron todos estos mártires, o de vivir consagrando mi vida como la consagraron estos modernos sucesores de Pedro. Me ha impresionado más que todas las tumbas, la sencillez de la tumba del Papa Pablo VI.
Visité hoy la Universidad Gregoriana. Me asomé al aula principal y a todos aquellos claustros que me recuerdan los años de mi juventud estudiantil. ¡Recordé tantas cosas!
Luego visité al Padre López Gall, con quien sostuve una conversación muy interesante que me hizo conocer el criterio que se tiene de mi actuación en varios sectores de la Curia romana. Y él me dijo que era todo muy positivo y que siguiera adelante. Me dijo también con sencillez de amigo, el juicio negativo que se tiene en algunos sectores para con los escritos teológicos del Padre Jon Sobrino.
Finalmente fui a cenar a la casa generalicia de los padres claretianos, habiendo compartido la mesa principal con el padre general que mañana saldrá rumbo a Alemania para festejar a su antecesor que ya cumple más de ochenta años de vida. Recordé con ellos los días de mi seminario menor y también mi primera misa, que celebré precisamente en el templo anexo a este centro de autoridad claretiana, el templo del Corazón de María. Y al pedírseme un autógrafo para su libro de visitas, escribí así: “Hoy he vuelto a mis orígenes”… Al cenar con ustedes, he recordado el Seminario menor que hice con los queridos padres claretianos. Y en este lugar celebré mi primera misa en 1945. Gracias y bendición”.
Viernes, 04 de mayo
Preocupado por el asunto principal de mi visita a Roma, después de asistir a la beatificación del Padre Coll, fui nuevamente a la Prefectura de la Casa Pontificia a apresurar la concesión de la audiencia con el Santo Padre, No encontré a Mons. Martín, pero dejé la dirección más clara donde podía remitirse la respuesta, esperando hablarle telefónicamente cuando esté en su oficina. No ha dejado de preocuparme mucho esta actitud para con un pastor de una Diócesis, cuando he pedido con tiempo, la audiencia y se va dejando al tiempo la respuesta; hasta temo que no se me vaya a conceder porque hay muchos obispos en visita Ad Limina y hay también otros criterios para dar preferencia a otras solicitudes. Lo he dejado todo en las manos de Dios diciéndole que, de mi parte, he hecho todo lo posible que, a pesar de todo, creo y amo a la Santa Iglesia y seré siempre fiel, con su gracia, a la Santa Sede, al magisterio del Papa y que comprendo la parte humana, limitada, defectuosa de su Santa Iglesia que siempre es el instrumento de salvación de la humanidad y a la cual quiero servir sin ninguna reserva.
En estos criterios sobrenaturales y muy eclesiales me alimentó la visita con Mons. De Nicoló, un viejo amigo de la Sagrada Congregación para la Educación de la Fe, donde conversé con todo cariño y confianza fraternal acerca de mi situación de la relación con los obispos, con el Gobierno, con el nuncio. Y comprendió que, dado mi temperamento y mi formación, él estaba seguro de que se trataba de exageraciones cuando llegan a Roma informaciones negativas acerca de mi actuación arzobispal. Su palabra ha sido muy luminosa y muy animadora. Le doy gracias al Señor.
Fui en seguida a visitar a la comunidad de las hermanas de Betania. Son cuatro religiosas salvadoreñas y guatemaltecas que atienden una casa de estudiantes universitarios en Via Aurelia 172. Allí me ofrecieron almuerzo y los jóvenes, que ya son profesionales algunos, se mostraron muy interesados en conocer la situación de mi país y me dieron cita con otros periodistas para la noche, antes de la cena. Yo accedí con gusto, dada la sinceridad y el ambiente católico en que se mueve la prensa que ellos atienden.
Fui en seguida a visitar a la hermanas pasionistas que atienden la casa de los padres pasionistas, la Curia Generalicia de los padres pasionistas y la casa de ejercicios espirituales, anexo a la famosa Iglesia de San Juan y San Pablo, donde está sepultado el fundador de las congregaciones pasionistas, San Pablo de la Cruz.
La mayoría de estas religiosas, que son diez, son mexicanas y conocen El Salvador. Estuvieron sumamente felices de mi visita y me citaron para almorzar con ellas al día siguiente y celebrarles una hora santa. Yo accedí, dado el cariño y la oración que aquí se ofrece a Dios por la situación de nuestra Iglesia salvadoreña. Tuvieron la bondad de llevarme en su carro a la comunidad de hermanas de Betania, donde ya era ya hora de cenar y de tener la entrevista de prensa a la que aludí antes.
Sabado, 05 de mayo
Hoy volví a insistir sobre mi deseo de tener la audiencia con el Papa. Monseñor Martín fue a ver a su colaborador y luego salió diciéndome muy contento: “Le traigo buenas noticias, será recibido el lunes. Mañana domingo por la tarde llegará el billete que acostumbramos enviar anunciando la ora de la audiencia”. Le agradecí cordialmente y, le he dado gracia a Dios, naturalmente.
Después fui a la Plaza Minerva para buscar entre los artistas de arte sagrado el báculo que siempre he deseado, parecido al que usó Pablo VI y sigue usando Juan Pablo II. En arte sagrado encontré quien me lo va a hacer y la Madre Gloria se comprometió a conseguir quien lo costearía, para que no fuera un gasto que pudiera parecer un antitestimonio de mi parte. Será pues un obsequio del pueblo y representará el Santo Cristo en forma de báculo.
Fui a almorzar con las hermanas Pasionistas del Convento de San Juan y Pablo. Y allí descansé y celebré la Santa Misa, predicándoles sobre el tema de la vocación y de la colaboración que hemos de dar a Dios todos los que hemos sido llamados para colaborar con el trabajo y el espíritu del Buen Pastor en medio de todos los hombres. Las hermanas pasionistas me llevaron a mi posada, donde cené con la hermanas dominicas y compartí con ellas el recreo de la noche.
Domingo, 06 de mayo
Después de celebrar en privado, en la capilla de las hermanas Dominicas, me fui a la Plaza de San Pedro para asistir con el pueblo al rezo del Regina Celi que el Papa acostumbra todos los domingos al medio día. Allí me esperaba la Madre Gloria y la Hermana Juana, con quienes salimos luego a almorzar en Castegandolfo. Un paseo precioso, lástima que estaba muy nublado y llovía a veces. Y en el comedor, pintoresco, frente al lago, había mucha humedad y el ambiente, el paisaje no tenía visibilidad. Pero me he dado cuenta de lo pintoresco del lugar donde el Santo Padre pasa sus días de descanso en vacaciones. Un ambiente pobre; tal vez se destaca demasiado, en medio de ese ambiente, la inmensa propiedad de Castelgandolfo, lugar de verano del Papa.
Lunes, 07 de mayo
Amanecí, terminando la preparación de los documentos que pienso entregar en la audiencia del Santo Padre. Se trata de cuatro informes de comisiones extranjeras que han llegado a El Salvador a estudiar la situación del país. Se trata de documentos de solidaridad, de denuncia, también de mi postulación al Premio Nóbel y otros que han surgido después de la visita apostólica de Monseñor Quarracino para completar dicha visita. Le llevo también la carta escrita en noviembre y que dudé si se la entregaron.
A las doce y veinte minutos fui recibido en audiencia privada por el Santo Padre. Sentado en su mesa de escritorio, me ofreció también una silla. Me dijo que me pusiera el solideo que yo me había quitado y llevaba en la mano. Comenzó a preguntarme por la situación del país. Le invité atentamente a que siguiéramos el memorandum que llevaba escrito, a lo cual él accedió gustoso. Comenzamos a leer y yo le iba sacando los documentos. Cuando saqué el folder de las informaciones extranjeras sobre la situación del país se sonrió viendo que era un volumen muy grueso y que no habría tiempo de ver. Yo le pedí disculpas y le dije que era para que ordena un estudio y que le dieran un resumen, pero que a mí me interesaba que tuviera una idea de cómo criterios imparciales bosquejan la situación de injusticia y de atropello que hay en nuestro país. Le dí también un folder con el retrato del Padre Octavio, muerto, y con mucha información sobre ese asesinato.
Después de entregarle, con una breve explicación cada uno de los siete folders, el Papa comenzó a comentar, de acuerdo con el último punto del memorandum, que se refería a un diálogo en búsqueda sincera del pensamiento del Papa y de un mejor servicio a nuestro pueblo. Confesó que es muy difícil una labor pastoral en el ambiente político en que me toca actuar. Recomendó mucho equilibrio y prudencia, sobre todo, al hacer las denuncias concretas, que era mejor mantenerse en los principios, porque era riesgoso caer en errores o equivocaciones al hacer las denuncias concretas.
Yo le aclaré y él me dió la razón de que hay circunstancias, le cité, por ejemplo, el caso del Padre Octavio, en que se tiene que ser muy concreto porque la injusticia, el atropello ha sido muy concreto. Me recordó su situación en Polonia, donde tuvo que hacer frente a un Gobierno no católico y con el cual había que desarrollar la Iglesia a pesar de las dificultades. Le dió mucha importancia a la unión del Episcopado. Volviendo a recordar su tiempo pastoral en Polonia, dijo que éste era el problema principal, mantener la unidad Episcopal. Le aclaré también que yo era lo que más deseaba, pero que tenía en cuenta que una unión no tiene que ser fingida, sino sobre el Evangelio y la verdad.
Se refirió al informe de la visita apostólica de monseñor Quarracino, el cual reconoce una situación sumamente delicada y quien recomendó como solución a las deficiencia pastorales y a la falta de unidad entre los obispos, un administrador apostólico sede plena.
Al terminar la visita, en que me dió oportunidad de exponer mi pensamiento y él también expuso sus criterios, me invitó a tomarnos una fotografía y me entregó algunos obsequios piadosos. El apartó los folders para continuar la serie de audiencias que aún faltaban y yo salí complacido por este encuentro, pero preocupado por advertir que influía una información negativa acerca de mi pastoral, aunque en el fondo recordé que había recomendado “audacia y valor, pero al mimo tiempo, mesurada por una prudencia y un equilibrio necesario”. Aunque mi impresión no fue del todo satisfactoria, a primera vista, creo que ha sido una visita y una entrevista sumamente útil ya que ha sido muy franco y yo he aprendido a que no se debe esperar siempre una aprobación rotunda, sino que es más útil recibir advertencias que pueden mejorar nuestro trabajo.
Después de la audiencia, me estaba esperando el Padre Toral, quien me llevó a su comunidad de padres y hermanos josefinos en la Villa Santa…, donde almorcé. Y allí llegó la Madre María Castro Llerena; para saludarme hizo un viaje desde el pueblo donde ella se encuentra a una hora y minutos de Roma. Recordamos a su primo hermano, Monseñor Castro Peña, y otros recuerdos de la querida patria. Ella es salvadoreña.
Por la tarde, la Madre Gloria y la Hermana Juana me acompañaron en su camioneta a visitar al artista del báculo, donde la madre logró una notable rebaja y un perfeccionamiento del proyecto de la obra. Luego fuimos a recoger ropa que he mandado hacer en la sastrería del Clero y volví a cenar con las Oblatas al Divino Amor, para regresar después a mi posada con las hermanas dominicas.
Martes, 08 de mayo
En Roma el tiempo se lo puede tragar a uno. Yo había proyectado algo para antes de la audiencia que tengo con el Cardenal Baggio, a las once de la mañana. Sin embargo, sólo pude hacer unos pequeños arreglos con el sastre, el cual todavía no ha terminado mis trabajos. Y me dirigí a la Plaza de San Pedro para encomendarme a los grandes pontífices, que reposan en la criptas del Vaticano y que han dado tanta inspiración y orientación a mi vida, y sostener este momento de recogimiento para luego ir a hablar cosas muy importantes a la Congregación para los Obispos que preside el Cardenal Baggio.
En la Plaza de San Pedro me encontré con Monseñor Eduardo Cassuli, que fue Secretario de la Nunciatura, creo que estando Monseñor Torpigliani en El Salvador. Fue muy cariñoso, hizo muchos recuerdos y comprendió mi difícil situación. Dijo que estaba siempre recordándome y orando para que fuera un pastor digno de estas circunstancias.
La conversación con el Cardenal Baggio fue muy cordial, a pesar de que yo esperaba un poco de severidad como la vez anterior, el año pasado. El era muy deseoso de encontrarse conmigo y me dijo que le hubiera sorprendido sí habiendo venido a Roma no hubiera ido. Yo le expliqué que desde el primer día que llegué a Roma busqué esta audiencia que por sus ocupaciones no se me había podido conceder. El expresó sus preocupaciones, sobre todo en la división de los obispo, en la situación del Obispo auxiliar. Y fue muy franco en reconocer el error del auxiliar al firmar el permiso de cambio de estatutos de Cáritas que tocaba firmar al propio Arzobispo. El, como Vicario General, debió de estar de acuerdo y si sabía que no estaba de acuerdo el Arzobispo, hizo mal en hacerlo. Pero dijo que yo también había sido muy severo en tomar la medida de su destitución y dejarlo como en el aire.
Traté de explicar toda esta situación porque, además, advertí que, entre las causales que había puesto Monseñor Revelo para este acto, estaba el que Cáritas se politizaba y caía en manos de guerrilleros. También el pretexto de que yo estaba en la clínica, enfermo. Lo cual expliqué al Cardenal que ni una ni otra cosa eran suficiente razón para aquel acto. Se refirió a la visita apostólica y a la sugerencia que ya el Papa había insinuado en su conversación de ayer, o sea que, arreglar la situación con el nombramiento de un administrador apostólico, sede plena; pero el Cardenal Baggio analizaba como una sugerencia poco práctica ya que no veía entre los obispos actuales quien pudiera ser ese administrador apostólico que se entendiera conmigo. Y llevarlo de afuera del país también le parecía absurdo, dada la situación de nuestro país. Por lo cual, ésto todavía queda en estudio y, de mi parte, le manifesté mi mejor voluntad de arreglar las cosas en lo que mi capacidad permita.
Me referí a los informes llevados al Papa que son imparciales y que expresan una situación de verdadera persecución contra la Iglesia. Me refería especialmente al informe de la OEA y a su insistencia de recomendar al Gobierno prevenir la persecución sistemática a la Iglesia católica en su misión de evangelizar. El Cardenal fue muy cordial cuando me dijo: “no estamos tratando entre enemigos, sino entre trabajadores de la misma causa y estamos, desde luego, en un noventa por ciento de acuerdo. Y es así que el ciento por ciento es la verdad y es el Evangelio”. Le dije que me daba mucho ánimo esa palabra y que la depresión que había sacado de mi audiencia con el Santo Padre, encontraba aquí, en la plática con él, una esperanza de que mi situación y la de mi Diócesis tienen solución si la seguimos buscando con la buena voluntad y amor a la Iglesia.
Parecía bastante satisfecho, hablamos de otras cosas y el tiempo había terminado. Me obsequió dos libros y me expresó su mejor voluntad de ayudar en todo a mi servicio a la Iglesia.
Salí satisfecho y a la salida me encontré providencialmente con Monseñor De Nicoló, gran amigo, con quien le dije que quería comentar, en forma confidencial y como dirección espiritual, mi situación de ánimo de ayer y de hoy me dió luces muy claras inspiradas en un gran amor a la Iglesia y cómo la virtud, sobre todo la humildad, en estos casos es una llave muy segura para encontrar solución. Que estuviera seguro -me dijo- de la buena voluntad que reina en la Curia romana, que ha cambiado enormemente, que él como viviéndola, me lo puede decir, que hay muy buena voluntad de ayudar en todo a los servidores de la Iglesia en todas partes. Que la influencia del actual pontífice era muy beneficiosa para la Curia romana y para toda la Iglesia. Me dió algunas normas prácticas para dirigirme a la Secretaría del Estado, refiriéndome a la sugerencia anterior, de que lo tomara todo como una voz de Dios que está buscándole, aún a mi misma situación, una solución de mucho beneficio a la Iglesia. Que tuviera mucho cuidado en hacer una reacción que fuera más espectacular, porque más bien, al sugerirme esta idea del administrador apostólico podía haber en la mente del Santo Padre y del Cardenal Baggio, una búsqueda de mi reacción y mi reacción, si fuera negativa, podía echarlo a perder todo. Que tuviera humildad y paciencia y escribiera al Secretario de Estado dándole mis impresiones y mi sugerencia, por ejemplo, de que un eventual Nuncio que se entendiera bien con el Arzobispo, podía solucionar ese papel que se sugiere para un posible, pero difícil, administrador apostólico. Creo haber comprendido bien la idea y trataré de realizarla con esa buena voluntad para la Iglesia que, gracias a Dios, siempre he tratad de conservar y acrecentar.
Acudí luego a Radio Vaticana, donde tenía una invitación del Padre Suárez, encargado de la transmisión para América Latina y donde gravé una entrevista con él acerca de la situación de la Iglesia en El Salvador, de mi trabajo y de mis impresiones de la visita al Santo Padre. En resumen, describí nuestra situación y mi trabajo, según mis intenciones, y sobre todo, dije que había salido muy optimista de la visita al Santo Padre, porque me había dado cuenta de que él sabe escuchar y se nota que está buscando el conocimiento de la realidad de nuestro mundo latinoamericano y que por eso creo que es muy grande la responsabilidad de todos los que tenemos el honor y la dicha de platicar directamente con el Papa, de informarle, no según nuestra manera de ver, sino hasta donde sea posible, la realidad sincera de la Iglesia en nuestros países.
Con el Padre Suárez y el encargado de los programas para España, me fui a la casa de los jesuitas, donde residen todos los escritores y trabajadores de radio, son como unas treinta personas, para almorzar con ellos y compartir luego, la sobremesa que es muy fraternal. El Padre Juan Bosco me cedió, como el otro día, su cuarto para descansar una siesta muy agradable. Y después el mismo Padre Juan Bosco me acompañó a arreglar mi boleto de regreso, pasando por Barcelona y Madrid para visitar la cuna de esta congregación dominica que ha tenido la bondad de proporcionarme mi viaje a Europa con motivo de la beatificación del Padre Coll.
Recogí luego mis trabajos en la sastrería del amigo Mangenelli, que ha sido muy amable en todo su trato conmigo. También compré unas estampas para que se puedan poner en todas las casas parroquiales de Su Santidad Juan Pablo II, pero la famosa venta Soprani parecía una colmena de compradores y me fue muy difícil comprar otras cosas. Terminé el día cenando con las Madres Oblatas, quienes me proporcionaron su vehículo, tanto para ir a su casa como para regresar a mi posada de las hermanas dominicas, donde esta noche he arreglado mis valijas para mi viaje de mañana.
Miércoles, 09 de mayo
Después de agradecer a las hermanas Dominicas, representadas por su superiora general y por la provincial de Centroamérica, el generoso obsequio de un viaje a Roma, felicitándolas por toda la realización de las ceremonias y festejos del fundador Beato Padre Francisco Coll, me despedí de ellas, ya que esta misma noche voy a tomar el avión de regreso pasando por Barcelona, Madrid y El Salvador.
Me dirigí luego a visitar a Monseñor Pironio con quien había concertado una audiencia para las once y media de la mañana. El tráfico, en las cercanías del Vaticano, se hacía imposible. La audiencia general atrae a muchedumbre de gente y los vehículos, autobuses grandes de turistas y peregrinos, invaden todas las calles adyacentes a la Plaza de San Pedro.
Pero, con unos minutos de retraso, llegué y todavía tuve que esperar un poco al Cardenal Pironio, quien me acogió en una forma tan fraternal y cordial que, este sólo encuentro, bastaba para colmarme de consuelo y de ánimo. Le expuse confidencialmente mi situación en mi Diócesis y ante la Santa Sede. Me abrió su corazón diciéndome lo que él también tiene que sufrir, cómo siente profundamente los problemas de América Latina y que no sean del todo comprendidos por el Ministerio Supremo de la Iglesia y, sin embargo, hay que seguir trabajando, informando lo más que se pueda, la verdad de nuestra realidad. Y me dijo: “lo peor que puedes hacer es desanimarte. ¡Animo Romero!” me dijo muchas veces. Y agradeciéndole otras consultas, una conversación larga y fraternal, me fui, dejándome en el corazón una nueva fortaleza de mi viaje a Roma.
Cuando bajaba de la Sagrada Congregación para Religiosos, donde el Cardenal Pironio es perfecto, me detuve en la Plaza de San Pedro, donde el Papa todavía predicaba sus mensajes en diversos idiomas y la gente acogía con fervor y aplausos. Pero en la periferia, donde yo me encontraba había mucha distracción. Muchacho y turistas que más bien se distraían y no atendían a la voz del pastor. Lo cual me dá la dimensión de nuestros auditorios, sin embargo, siempre hay que sembrar. Y el Papa lo estaba haciendo incansablemente y actuando como un pastor que dá abundante pasto de doctrina al pueblo, del cual depende si quiere o no acogerlo.
Luego me dirigí a la Curia generalicia de los jesuitas, donde el buen Padre Juan Bosco me llevó a conocer el jardín y luego a almorzar y me prestó su cuarto para dormir la siesta. Después, juntos concelebramos la Eucaristía. Después me hizo el favor de llamar por teléfono a El Salvador, con Monseñor Urioste, con quien entablamos el diálogo que se grabó para transmitir en YSAX.
Me contó la situación difícil de la violencia en el país. Lo más grave, el enfrentamiento entre el Bloque Popular Revolucionario y los Cuerpos de Seguridad junto a Catedral. Y en la Catedral de San Salvador, me dijo que estaban tendidos nueve cadáveres asesinados en esa circunstancia y se cree que son más los muertos.
Me valí de esta circunstancia para enviar un mensaje de paz y transmitirles el pensamiento del Papa. En la audiencia recordó el asesinato de Aldo Moro hace un año.
DIARIO – 09 de mayo- 28 de mayo
Miércoles, 09 de mayo(continuación)
Después de la transmisión por teléfono a El Salvador con informaciones que me dió Monseñor Urioste y comunicaciones que yo le dí de parte, sobre todo, de la audiencia privada con el Santo Padre, aplicando todo a la situación trágica de este día en la Catedral de San Salvador, fui a hacer mi última visita a la Basílica de San Pedro, junto a la tumba de San Pío X, oré intensamente, teniendo en cuenta todos los intercesores que significan para mí, sobre todo, los sepulcros de San Pedro y de los últimos Papas. Fui a comprar, luego, unos recordatorios a la venta junto a la Plaza de San Pedro, donde se distribuye el Observatore Romano y con las madres Oblatas al Divino Amor, me dirigí al aeropuerto.
El viaje de Roma a Barcelona fue muy tranquilo. Y en Barcelona a las once de la noche, me esperaba la Madre Grau y otra religiosa dominicana, quienes me condujeron con un taxi, llevado por un motorista muy simpático, muy platicador, por todas las calles principales de Barcelona, principalmente, junto a la Iglesia de la Sagrada Familia y nos dirigimos luego a Vich, donde me instalaron en una casita que las religiosas domínicas han dedicado para hospitalidad de los sacerdotes. Hicimos el plan para el día de mañana, ir a conocer el lugar del nacimiento del Padre Francisco Coll y también para mí significa mucho esta población de Vich, ya que aquí están los orígenes del Padre Claret, cuyos misioneros inspiraron mis primeros año de seminario.
Jueves, 10 de mayo
En España amanece una hora más temprano, por el cambio oficial ente Italia y España. Sentí, pues, que era muy temprano y, sin embargo, eran ya las ocho de la mañana. Me arreglé rápidamente y fui a desayunar con las hermanas de la casa que las dominica tienen en Vich. Es una comunidad numerosa, ya que atienden colegio, enfermería de las mismas religiosas ancianas y otro conjunto de apostolados muy fecundos en esta ciudad donde nació la congregación. Después del desayuno, me acompañó la Madre Grau y otra religiosa, que organiza el archivo, y un conjunto de recuerdos del Padre Coll, a visitar este archivo, este museo, donde hay también una información muy amplia de la actividad que hacen las religiosas en todo el mundo. He tomado nota para llevar esta vitalidad de la Congregación como una repuesta de la generosa invitación que me hicieron a participar en la beatificación de su fundador.
Después fuimos a visitar la Catedral de Vich, reconstruida dos veces, ya que últimamente fue víctima de la guerra civil española. Pero es hermosa y con un modernismo sano; en la parte de la cripta se descubre todavía la primitiva Iglesia, después de la cual hubo dos, hasta la presente. Los cuadros, dibujados tres veces, según me explicaron, porque la primera vez se perdieron en el camino, se los robaron. La segunda vez los destruyeron los comunistas en la Guerra Civil, y por último, el artista que desde París estaba haciendo esta decoración, por su cuenta, realizó el diseño que actualmente adorna en una forma bellísima la Catedral. El claustro en estilo gótico original, muy interesante. Después tuve la dicha de ir a visitar la tumba del Padre Antonio María Claret, fundador de los claretianos. Hay un relicario muy rico y el templo magnífico donde el centro es el cadáver adornado con una mascarilla de plata y adornos episcopales. Y, sobre todo, se ha reconstruido en su forma original los lugares que fueron testigos de la creación de este Instituto Religioso cordimariano. Un retrato, en el fondo, da la medida, 1’50, pequeña de altura era la figura del Padre Claret y de los otros compañeros de la fundación; nombres que yo conocí desde mis primeros años de seminario, ya que me comencé a formar para el sacerdocio con esta congregación que entonces fue llevada por Monseñor Dueñas a San Miguel. Hice estos recuerdos con lo padres, los cuales me agradecieron mucho la visita y yo les agradecí mucho su acogida, siempre cordial.
Después del almuerzo fuimos al pueblo donde nació el Padre Francisco Coll. Está a unos 40 kilómetros de Vich, el camino muy pintoresco, en un atardecer brillante de primavera y el pueblito humilde, recostado en una montaña, evoca los orígenes de aquel Santo cuya casa han recuperado para su comunidad las religiosas fundadas por él; donde tienen además una casa de ejercicios que tienen perspectivas sumamente tranquilas y bellas adornadas con jardines, donde verdaderamente se siente un acercarse, a través de la naturaleza, con Nuestro Señor. Fui también a visitar la Iglesia donde fue bautizado y, al regresar, celebré la Misa en la capillita que abarca la casita primitiva del Padre Coll, junto con cuatro religiosas, tuve una Eucaristía muy íntima evocando las grandes necesidades de mi país. Con las religiosas hemos pedido mucho para que nuestra vida de la Iglesia y del país encuentren una solución conforme al corazón de Dios.
Viernes, 11 de mayo
Después de celebrar la Misa en la capilla de las hermanas ancianitas y enfermas, donde les invité a unirse en oración con las necesidades de la Iglesia y que eran una fuerza muy grande para la Iglesia Universal; salimos después del desayuno, también por la carretera de Manrresa, que pasamos muy cerca de la cueva de Manrresa donde San Ignacio hizo sus ejercicios espirituales y escribió el libro famoso de los ejercicios. Subimos luego por una hermosa carretera hasta el Monasterio de Monserrat. Era la hora en que los monjes benedictinos se preparaban para cantar su Misa de la abadía, en catalán, pero con una piedad y un ritmo gregoriano verdaderamente emocionantes. Había mucha gente. Después recé el rosario a la Virgen de Monserrat. Y descendimos a Barcelona nuevamente. La Madre Grau ha estado muy fina durante este paso por Monserrat, por Vich, y por el pueblo del Padre Coll y ha traído hasta el aeropuerto su generosidad, dejándome ya encaminado en el puente aéreo, nombre que recibe un servicio de cada hora, un ación entre Barcelona y Madrid. En Madrid me esperaba la hermana Raymunda, también de la misma Congregación, la religiosa que expulsaron de Guatemala y que se alegró mucho al volverme a ver. Me llevó a su residencia donde, con otras religiosas, cuidan una hermosísima residencia de empleadas y estudiantes. Hacen mucho bien en esta casa. Me comuniqué con el Padre Pedro, de los pasionistas, quien vino junto con María, la escritora que escribe en Vida Nueva, y que hizo un bonito reportaje, cuyo producto económico lo destinó a los pobres de la Arquidiócesis. Tuve mucho gusto de conocerla y de saludar al Padre Pedro Ferradas y compartir con ellos muchos recuerdos e impresiones de nuestra vida en El Salvador. Concertamos una entrevista de prensa para la noche y salí con las hermanas, después del almuerzo y después de la siesta, a visitar su casa de ejercicios espirituales, que tienen en las hermosas serranías, a unos 50 kilómetros de Madrid. La casa se llama El Roble y allá acuden muchas personas a pasar días de retiro espiritual o de convivencias.
Después de cenar, en Madrid, estuvieron algunos periodistas, no sólo entrevistándome sino conversando ya en intimidad fraternal sobre la situación de la Iglesia, los temores para América Latina, sus impresiones sobre el Papa y un conjunto de preocupaciones que me dió mucho gusto que compartieran con nosotros los problemas de nuestra América Latina. Les dije que tenían ellos una gran misión de Iglesia en este sentido, ya que, estaban sensibles a nuestra problemática en esa Europa, donde yo notaba bastante indiferencia o desconocimiento para los problemas de nuestra América.
Cené a la diez de la noche, de Madrid, y las hermanas Raymunda y otra, que maneja muy bien, me condujeron al aeropuerto, donde me despedí de ellas agradeciéndoles todas sus bondades en Europa y me dirigí a esperar el avión que saldrá a la dos y cincuenta y cinco de la madrugada, para llegar a las ocho y media de la mañana, hora de El Salvador.
Sabado, 12 de mayo
Este sábado 12 de mayo, amanece en Costa Rica, después de una noche muy larga, ocho horas más larga que las ordinarias para el vuelo de Europa a América. Pasamos por San Juan, Puerto Rico; por San José, Costa Rica; y llegamos a El Salvador puntuales a las ocho y media. Fue un viaje sin dificultades. Lo dediqué a rezar, a ponerme muy en la presencia de Dios, pidiéndole queme iluminara y que nos ayudara a resolver la grave situación que voy a encontrar en el país.
En el aeropuerto llovía torrencialmente. Bajamos del avión bajo paraguas. Ví que había varios amigos, sacerdotes y seglares, esperándome, las religiosas domínicas muy fieles también para concluir una obra de tanta generosidad como fue obsequiarme este viaje a la beatificación de su fundador y después de saludarnos en la puerta de Ilopango, tomé el carro de las religiosas y me dirigí a mi residencia, después de haber hablado también con Monseñor Urioste, brevemente, sobre los problema y quedando de que por la noche nos reuniríamos con otros que me ayudaran a informarme de la situación de la Diócesis en esta semana tan trágica, donde me han contado tantas cosas que han acaecído, violentas, trágicas, pero que con la ayuda de Dios sabremos iluminar desde el Evangelio y de la Iglesia.
En el aeropuerto había varios periodistas tomando fotografías, pero ninguno me hizo ninguna pregunta. Periodistas extranjero sí se han anunciado este día para entrevistarme mañana, después de la Misa que será en el Rosario ya que la Catedral continúa ocupada por el Bloque Popular Revolucionario.
Sin embargo, algunos periodistas vinieron sorpresivamente y los atendí, aunque les dije que todavía no estaba yo plenamente capacitado para dar opiniones sobre los últimos hechos porque acaba de llegar y esta noche tendría una reunión para analizar la situación. Efectivamente, por la noche, nos reunimos con Monseñor Urioste, el Padre Moreno, el Padre Brito, la niña Doris Osegueda y el Bachiller Cuéllar. Analizamos muchos puntos interesantes de la situación actual del país. Vimos la conveniencia de dedicar algún día, o más tiempo para reflexionar sobre ciertas cosas que impiden una comprensión mejor del ambiente y, en todo caso, para profundizar en nuestros análisis sobre la Iglesia y nuestra situación política y social. Después de esta conversación muy interesante sobre la situación general, preparamos el informe de la semana, que me sirve para la homilía del día siguiente.
Dos jóvenes del Bloque Popular Revolucionario vinieron a pedirme una Misa en Catedral, en sufragio de cuatro nuevos matados por las fuerzas del Estado mientras se dedicaban a actividades de su organización. Analicé con los padres que estábamos en reunión esta petición; les dije que para mi era difícil comprender como no podía yo celebrar la Misa oficial de las ocho en Catedral, porque ésta está ocupada por el Bloque Popular Revolucionario. ¿Cómo podría celebrarse una Misa sólo porque la pide el Bloque aunque sea por los difuntos, en una Catedral ocupada por ellos? Y que, por tanto, aparecería nuestra Misa como subordinada a la estrategia y a los ideales del Bloque. Por lo cual, les propuse que, como cristianos, teníamos que celebrar el sufragio por estos difuntos, pero que lo haríamos en la basílica. Y el párroco de la Basílica, Padre Cortés, se encargará de organizar esta liturgia. Ellos aceptaron y creo que se ha resuelto uno de esos problemas inesperados, que son difíciles de solucionar por las complicaciones que puede tener.
Domingo, 13 d mayo
Por estar ocupada la Catedral, la Misa de este domingo se tuvo en la Iglesia del Rosario, la cual estaba completamente repleta y había aún gente afuera. Gente cariñosa que, al darse cuenta que yo entraba, me recibieron con un caluroso aplauso; me fui a revestir y junto con los padres dominicos y los seminaristas nos encaminamos al altar. Estaban en el lugar destacados de sus hermanas dominicas de la Anunciata y algunas alumnas de sus colegios, ya que esta Misa quería ser un homenaje al nuevo Beato, el Beato Francisco Coll Gitard, y ellas, las hermanas dominicas se habían encargado de arreglar la liturgia de este día. La homilía fue un informe de mi viaje a Roma, con el objetivo principal de participar en la beatificación del Padre Coll, por invitación y bajo el patrocinio de las hermanas dominicas. Mi peregrinación por España, mis impresiones desde allá acerca de lo sucedido en El Salvador y el punto central doctrinal de mi homilía era, el Evangelio, la Vid y los sarmientos me dieron el tema de “LA GRACIA COMO DON DE LA PASCUA”. Enfoqué con esta doctrina la realidad que hemos vivido en El Salvador esta semana, sobre todo, la masacre del 08 de mayo. El que quiera tener más datos sobre la iluminación de la realidad nacional en esta semana tan trágica, puede obtener la homilía que se transcribe domingo a domingo y donde está al pie de la letra lo que yo dije en esta ocasión.
Habían en la Misa muchos periodistas, trabajadores de la televisión que estuvieron tomando muchos detalles de nuestra Misa y con ellos, al terminar la Misa, tuvimos una entrevista de prensa, en el salón de la Escuela Parroquial del Rosario. Fue muy interesante, ya que, el conjunto de preguntas sugería temas muy actuales y muy oportunos con la situación del país y con la situación del mundo.
Fui luego a almorzar con las hermanas dominicas en el Colegio de Fátima, en Santa Tecla, donde estaban los padres dominicos, los maristas de Santa Tecla y las diversas comunidades de religiosas dominicas que trabajan en nuestra Arquidiócesis. Y ésto fue lo más resaltante; además, olvidaba que esta noche, invitados por periodistas norteamericanos estuvimos en el Hotel Camino Real para ver un documental acerca de lo sucedido en Catedral y que fue captado por un reportero de televisión. Lamentablemente, la cinta está girando fuera del país, pero mañana mismo nos avisará el señor periodista acerca de la visión que nos dará de esta película. Esto fue lo más resaltante de nuestro primer domingo al regreso de Roma.
Lunes, 14 de mayo
La primera mañana después del regreso de Roma, trabajada en la Curia Arquidiocesana ha sido una mañana muy densa. En el campo pastoral, una entrevista con el Padre Benito Tovar, Vicario del departamento de La Libertad, quien presenta al joven Astul Guirola, que ya terminó sus estudios de Teología, pertenece a la Diócesis de Santa Ana, y el cual posiblemente pueda ordenarse sacerdote para trabajar si quiera un tiempo en nuestra Arquidiócesis. Le dí unas letras para respaldar la petición de permiso que él hará a su obispo, Monseñor Barrera. También saludos a varios sacerdotes que han venido a la Curia y religiosas con quienes, gracias a Dios, compartimos las preocupaciones pastorales y eclesiales.
Lo más sobresaliente fue en el campo de relaciones con la política y la diplomacia, ya que, tuve la visita del Embajador de Perú, que traía una solicitud del embajador de Venezuela capturado por el Bloque Popular Revolucionario en su propia Embajada y que pide a la Iglesia una intervención. De mi parte, le prometí toda buena voluntad, pero que necesitamos también que la petición viniera de parte del Bloque, ya que una mediación supone petición de las dos partes. Sin embargo, le prometí estudiar más a fondo la solicitud y que, desde luego, llevara al Embajador de Venezuela el consuelo de la Iglesia y la seguridad de que estamos plenamente con el mejor deseo de ayudar a normalizar esta situación. También la visita de un enviado especial de Francia para normalizar la ocupación de su propia Embajada, donde está también el señor embajador y otras personas como rehenes. También a este señor le prometí toda nuestra ayuda y lo invité a la reunión que estábamos celebrando con el Vicario General, Monseñor Urioste, con los encargados de la Secretaría de Prensa y comunicación, Padre Rafael Moreno y el Padre Pedraz y el Padre Fabián Amaya y el Secretario, Padre Brito. Con todos ellos y el enviado de Francia estudiamos todas las posibilidades para que la Iglesia pudiera actuar con eficacia en este deseo, en el cual ella también está afectada, ya que, está ocupada la Catedral por el mismo Bloque y se ha sabido esta mañana que han ocupado también las Iglesias de Suchitoto y de Apopa.
Por la tarde, también supimos que habían ocupado la Iglesia de Aguilares. Se llegó a la conclusión de que lo más urgente era un contacto con los dirigentes del Bloque y para ésto se ofreció el enviado de Francia, quien a través de los ocupantes de su embajada, y teniendo ya conseguido el local de la Universidad Nacional, convocará a esa entrevista a los dirigentes, del Bloque y a donde irá una representación de la Iglesia formada por el Padre Fabián Amaya, el Padre Brito y el encargado del Socorro Jurídico, doctor Infieri Roberto Cuéllar.
Por la tarde, se reunieron estos tres representantes junto con el Vicario General y la Secretaría de la Información para llevar conceptos claros a la reunión, pero lamentablemente sólo ellos se presentaron con los representantes del Bloque, los cuales no quisieron pasar adelante mientras no estuvieran las representaciones de las embajadas afectadas, principalmente del representante de Francia que los había invitado. Y así no se pudo regresar a pesar de todo el esfuerzo que se ha hecho; seguimos orando y esperando porque la solución tiende a agravarse. Se está anunciando para mañana una gran manifestación del Bloque Popular Revolucionario conmemorativa de los asesinatos del 08 de mayo por parte de la Policía Nacional.
Por último, fui a cenar con las hermanas Oblatas al Divino Amor para entregarles correspondencia de la casa generalicia y saludos personales de la superiora general, que fue tan amable conmigo en mi estadía en Roma.
Hubo por la tarde, una nota de gran consuelo. El llamamiento que hice el domingo en la homilía a la enfermeras para que celebráramos una Eucaristía en la capilla del Hospital de la Divina Providencia, fue atendido con todo entusiasmo y la capilla estaba repleta de enfermeras; concelebró conmigo Monseñor José López Sandoval, asesor eclesiástico del movimiento de enfermeras nacional. Les dirigí un mensaje en que las invité a mirar en cada enfermo el doble rostro de Cristo, rostro sufriente, doloroso, moribundo y el rostro glorioso que le dió precisamente esa pasión. Aprendió en el sufrimiento la obediencia, pero por ello fue constituido principio y causa de esperanza de todo los que creen en él. Al final de la Misa hubo un saludo muy cordial, además de las palabras del Padre López Sandoval y una despedida que nos hizo sentir la comunión que la Iglesia despierta en los corazones. Muchas manifestaron su deseo de que pudiera realizarse esta reunión con más frecuencia.
Martes, 15 de mayo
Por la mañana, con un pequeño grupo de consejeros hicimos un análisis de la situación actual y de la participación que la Iglesia puede tener. Preparamos como conclusión un pronunciamiento en que se hace ver la culpabilidad que puede haber en los diversos sectores para haber creado esta difícil situación.
Por la tarde, reunión de prensa en el salón de la Biblioteca del Arzobispado. Acudieron bastantes, quizá algunos 25 ó 30, entre periodistas extranjeros y nacionales y aparatos de televisión. Se les presentó el pronunciamiento que, a través de ellos, se está dando a conocer al público.
Miércoles, 16 de mayo
Desayuné con Monseñor Urioste y con el doctor Chávez, que es vínculo de unión en el diálogo tenido con miembros de ANEP, con Democracia Cristiana y con el Gobierno, diálogo al cual ha participado la Iglesia. El me informó de toda la actividad de acercamiento tenía durante los últimos meses, abriendo bastantes cauces de esperanza para un mutuo entendimiento. Sobre todo, en busca de una solución en que haya más participación de todos los elementos vivos de la nación en la búsqueda del bien común. Escribí en seguida el artículo que mandaré a La Prensa y que se refiere a mi retorno de Roma y mi esperanza puesta en Dios, a pesar de la dificultades que parecen insuperables. Me tomé, en seguida unas horas de descanso en la finca de las hermanas Oblatas al Divino Amor.
A las cuatro de la tarde, tuve en el Arzobispado una entrevista muy interesante con el Rector de la Universidad de El Salvador y el Rector de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas; a quienes acompañaban elementos de la alta dirigencia de ambas universidades. Conmigo estuvo Monseñor Urioste y el Padre Rafael Moreno. El diálogo fue abierto por el Rector de la Universidad de El Salvador, a cuya iniciativa nos encontrábamos reunidos. Y se orientaba en el sentido de los pronunciamientos que las dos universidades y nuestra Arquidiócesis han hecho a propósito de la situación conflictiva entre el Gobierno y el Bloque Popular Revolucionario, buscando manera de colaborar a solucionar dicho conflicto. Dijeron ambos rectores que veían con muy buenos ojos el llamamiento que el Arzobispo había hecho para que todos los elementos vivos del país pusieran su contribución, a la medida de sus capacidades y competencias, para resolver no sólo el problema coyuntural, sino para ahondar en la solución de raíz de todos los problemas que provoca la injusticia social en el país. El diálogo se prolongó hasta muy entrada la tarde y se acordó promover la participación de todos los elementos a quienes el Arzobispado está llamando, principalmente, las universidades moverán los ambientes profesionales y culturales del país. Se tendrá a este propósito una mesa redonda en que se estudiará el pronunciamiento del Arzobispado y se darán iniciativas de busca de soluciones de nuestros problemas socio-político-económicos. Durante la entrevista con los sectores, llegaba la superiora de las religiosas guadalupanas, a informar al Arzobispado que, dos religiosas mexicanas que trabajan en Arcatao, departamento de Chalatenango, habían sido sacadas por un carro rojo de migración y llevadas con rumbo desconocido. Hemos tratado de investigar de qué se trataba y hasta muy entrada la noche, la superiora había logrado una comunicación con el Ministro del Interior, que le dijo que Migración había recibido muchas quejas contra las hermanas y que las había conducido a la frontera con Guatemala. La radio católica ha emitido la noticia, junto con la protesta del Arzobispado porque se trata de una nueva forma de persecución a la Iglesia y violación de los Derechos Humanos, ya que, no existe ningún crímen comprobado para que las religiosas sean expatriadas en esa forma tan inesperada. Por su parte, las religiosas, tanto las guadalupanas como de otras congregaciones, se están dirigiendo a Guatemala, a sus compañeras religiosas para que se interesen por la suerte de estas hermanas que llegan de manera tan imprevista al país vecino.
Viernes, 18 de mayo
Entre las visitas de esta mañana se destacan la entrevista con televisión española. Un breve diálogo para enterarse de la situación y de la posición de la Iglesia en las circunstancias de este conflicto entre el Estado y la Organización Popular, BPR.
También una visita de la CUTS, cuya confederación de sindicatos, la cual se muestra solidaria con el llamamiento que el Arzobispado ha hecho para un diálogo, y está dispuesta a preparar un Foro que analice en forma de mesa redonda la situación. Una plática muy interesante, sobre todo, para comprender cómo nuestro obrero está bastante promovido y sensible en asuntos políticos y sociales.
Monseñor Rivera también me sorprendió gratamente y con él conversamos sobre el documento secreto de una denuncia de los cuatro obispos contra mí, en el cual, ante la Santa Sede, me denuncia hasta de asuntos de fe, de politización, de una pastoral con bases teólogicas falsas y un conjunto de acusaciones que ponen completamente en entredicho mi Ministerio Episcopal. A pesar de lo grave, he sentido mucha paz. Reconozco ante Dios mis deficiencias, pero creo que he trabajado con buena voluntad y lejos de las cosas graves que se me acusa. Dios dirá la última palabra y espero tranquilo seguir trabajando con el mismo entusiasmo de siempre. Ya que sirvo con amor a la Santa Iglesia.
Por la tarde, visita del Embajador especial de Francia, el cual se muestra muy desanimado porque sus gestiones para liberar la embajada de la ocupación del Bloque Popular Revolucionario ha sido infructuosa. El Bloque se empeña en exigir al Gobierno la liberación o la noticia de tres compañeros que fueron capturados y de los cuales el Gobierno asegura que no los tiene. La opinión pública bajo secreto comenta que ya no existen. En mi llamamiento he dicho al Bloque que ponga término a estas ocupaciones y que de los desaparecidos ya todo mundo sospecha lo fatal y que es suficiente haber presionado al Gobierno. De otra manera, el Bloque también está contribuyendo grandemente a un malestar del país que no compensa el objetivo de sus peticiones. Al señor embajador le comuniqué estos mismos conceptos y le manifesté la buena voluntad de la Iglesia de hacer todo cuanto está a su alcance, pero que aquí lo único era acompañarlo a él en ese sentimiento de impotencia ante el capricho de los hombres. Me contó la triste situación en que se encuentran los rehenes de la embajada de Francia, los cuales tienen hasta que dormir en el suelo. Los tenían retenidos en el mismo cuarto; algo logró mejorar la situación humana, pero siempre es de una emergencia muy dura y ya se prolonga por dos semanas esta situación. Todavía permanece también ocupada la Embajada de Venezuela, pero fue ocupada una semana después de la de Francia. La Catedral también, y ésto se lo hice ver al embajador, está ocupada en igual fecha que la embajada de Francia. La Catedral es un centro del Bloque. A mi no me molesta, pero es también un sentido de impotencia poderla rescatar y dedicarla al culto como se debe.
Tuve una reunión con los seminaristas del Seminario Mayor Arquidiocesano a la que asistió, también, el Rector del Seminario, Padre Gregorio Rosa y resultó sumamente cordial, franca. Tuve ocasión de aprovechar el diálogo, sus preguntas para expresar mis temores de una politización y llamarlos también a un trabajo de colaboración en la unidad de la Iglesia. Y a formarse desde su identidad sacerdotal, a la que los llama su vocación. Fue una junta que me dejó completamente satisfecho al ver las inquietudes de los muchachos y también la oportunidad de dar el pastor sus orientaciones, tal como quisiera, a sus sacerdotes. Prolongué mi diálogo con el Padre Rector, llevándolo a cenar y a pasear un rato en el que tuvo él también una expansión cordial muy grande, no sólo en su oficio de Rector, informes del Seminario, sino como amigo que lo ha sido desde tanto tiempo y muy de fondo.
Por la noche, en el Hospital de la Divina Providencia del doctor Lara Velado, el doctor González de la Crónica y un grupo de estudiantes universitarios nos reunimos para preparar la…
Viernes, 18 de mayo
Por la noche, nos reunimos con el doctor Lara Velado, González, Director del Periódico La Crónica y un grupo de universitarios, estudiantes de derecho, para planear una mesa redonda que este grupo de estudiantes de derecho ha promovido para el próximo 22 de mayo en la Universidad Nacional, sobre Derechos Humanos. A mi me toca desarrollar el tema de los derechos, bajo la perspectiva de la moral y de la Teología. Después de haber planeado esta mesa redonda conversamos grandemente, sobre todo, para comentar el llamamiento que ha hecho el Presidente de la República a un diálogo nacional para aportar elementos a la soluciones del país. Casi todos expresan con pesimismo la poca credibilidad al ofrecimiento gubernamental de libertad y democratización; sin embargo, hay opiniones positivas de aprovechar lo que se pueda y contribuir con buena voluntad a aportar entre todos los elementos nacionales (organizaciones, profesionales, etc.) las luces y fuerzas que el país nos está pidiendo a todos.
Sabado, 19 de mayo
Toda la mañana, hasta como a las tres de la tarde la dediqué a visitar un cantón de la Parroquia de Colón, un pintoresco lugar en la falda del Volcán de San Salvador, donde el Padre Nicolás, párroco de Colón, junto con las hermanas del Sagrado Corazón habían preparado un grupo de jóvenes y niños para recibir la confirmación. El ambiente cuando llegué me pareció muy frío y no logré entrar en un contacto más cordial con aquella gente que se ve muy reprimida. Parece que la situación de tener que trabajar en una hacienda es para ellos esta ocasión de vivir como dependientes del administrador. El cual también me pareció un poco despótico. Le recomendé mucho al Padre Nicolás frecuentar y dar ánimo a esta pobre gente y cuidarse mucho de la alianza con la gente de la hacienda. Bajé con esta tristeza y también con el propósito de no aceptar otra vez una celebración dentro de una hacienda o finca y, mucho menos, aceptar las atentaciones que la gente de las haciendas dá, mientras se deja un tanto marginado al pobre pueblo.
A la hora de cena, tuvimos una reunión con el equipo de información para preparar el informe que semanalmente doy en la homilía. Hubo un poco de controversia en el comentario que había que hacer al discurso del Presidente, pues había que mostrar la buena voluntad de la Iglesia, a pesar del escepticismo de unas promesas que deben de esperar el aval de los hechos, y no creerse, como el pueblo generalmente no lo cree, unas simples promesas del Presidente en un ambiente en que ha prevalecido la mentira, la distorción, el engaño. Recogí las opiniones de uno y otro sector de la reunión y con la ayuda del Espíritu Santo preparé el informe que bajo mi responsabilidad sé dar en la homilía del domingo.
Por la noche visita de periodistas, desde las siete hasta las nueve y casi a las diez tuve que dar una entrevista a la televisión francesa, a la televisión de Guatemala y aún periodista o reportero de una revista alemana. Vino también la Madre Juanita a informarse de un atentado de incendio al convento de Tamanique. No supo darme mayores detalles más que el hecho de haber rociado con gasolina las puertas y haber iniciado un incendio, que gracias a Dios, se controló a tiempo.
Domingo, 20 de mayo
Estando todavía ocupada la Catedral por el Bloque Popular Revolucionario, tuve que pedir de nuevo la hospitalidad de la Iglesia del Rosario para celebrar la Misa de ocho que, gracias a Dios, también estuvo muy concurrida. El canto del Seminario Menor de Chalatenango animó a la muchedumbre que toda ella participaba. Fue una Misa sumamente participada. La homilía fue sobre el tema de la pascua dándonos el don del Amor ya que todas las lecturas nos hablan del Dios que es Amor y del mandamiento nuevo de Cristo, que nos amemos como él nos ha amado. Tuve oportunidad de definir nuevamente la Iglesia como constructora de comunidad en el amor y ésto la distingue de cualquier otro grupo y movimiento de carácter político, social, terrenal. Definí, nuevamente, la posición autónoma de la Iglesia, la cual no se identifica con ningún sistema ni con ningún movimiento o grupo político. Después de la Misa los periodistas y operarios de la televisión que estuvieron muy activos durante la Misa, me invitaron a tener una reunión de prensa la cual con gusto accedí. Entre otros, recuerdo a un reportero de Le monde, de París, a dos canales de televisión venezolana, y después me fuí con mi familia, en Apopa, a tomar unas horas de descanso que fueron muy cordiales.
Por la noche cené con las hermanas Oblatas al Divino Amor en un ambiente también muy cordial y al regresar a mi residencia me informaron de la situación del Embajador de Venezuela que se escapó de la Embajada, ocupada por los del Bloque Popular Revolucionario, y se ha refugiado en la Nunciatura. Hablé al Padre Brito, Canciller de la Curia, para que fuera en ni nombre a ver qué necesidades tenía el Embajador y si hubiera alguna necesidad de ir personalmente que me avisara.
Lunes, 21 de mayo
Después de un breve paso por la Curia Diocesana, donde atendí algunos sacerdotes, religiosas y fieles, principalmente, al grupo de Cáritas de Aguilares, que buscaba como llevar alimentos para repartir en aquella región, ya que, la Catedral, donde está la bodega, se encuentra ocupada. Mi respuesta fue que esperáramos porque era un riesgo en este momento sacar cosas de la Catedral ocupada. Después de este breve paso por la Curia, fui a Chalatenango invitado por el Vicario Episcopal, padre Fabián Amaya, para tener una reunión con las religiosas que trabajan en la pastoral de aquel departamento, a fin de solidarizarse con las religiosas guadalupanas que han sufrido el destierro momentáneo de dos religiosas de Arcatao, llevadas a Guatemala. Regresarán este día o mañana y, mientras tanto, esta reunión evaluó el trabajo de las religiosas y se orientó en la realidad política tan complicada que está viviendo nuestro país. Esta tarde cuando vino el avión de Guatemala, no vinieron las hermanas guadalupanas que se esperaban. Esperaremos mañana.
Esta noche estuvo conmigo el Padre Gregorio Rosa y platicamos bastante profundamente sobre la denuncia de los señores obispos y de la realidad de nuestra Arquidiócesis; es un momento de la verdad, piensa el Padre Goyo, y hay que aprovechar este momento para reafirmar la posición de la Iglesia y quitar todos aquellos obstáculos que impiden una pastoral más auténtica. Las denuncias que se hacen en dicho documento encuentran algo de verdad, que es necesario corregir, pero también hay mucho de exageración y casi calumnioso a lo cual vamos a responder, sino con los hechos de continuar trabándola Pastoral de nuestra Arquidiócesis.
Martes, 22 de mayo
Vino a desayunar conmigo el Padre Chus Delgado, quien me informó del procedimiento de las pláticas con ANEP, Democracia Cristiana y el Gobierno. Según el Padre Chus parece que no hay mayor progreso, porque falta sinceridad y hay mucho interés de grupo. De todos modos, yo le manifesté mi opinión de seguir estando presente, para que no demostremos mala voluntad de parte de la Iglesia.
No fuí a la Curia porque me dediqué a preparar mi intervención en la Universidad esta tarde. A las cinco de la tarde una mesa redonda en la que tomé parte en la Universidad Nacional, junto con el doctor Lara Velado, el Director de La Crónica del Pueblo, un obrero, un campesino. Tratamos de los Derechos humanos. Mi aspecto era el teológico moral. Hubo un lleno completo en el salón de jurisprudencia. De tal manera que, hasta los pasillos estaban repletos y hubo calurosa acogida a mi llegada. Le dí gracias al Señor de poder llevar el mensaje de su nombre a esta Asamblea.
Al final, se informó al público que en esos momentos estaba sucediendo una nueva masacre en la Embajada de Venezuela, donde los rehenes, o sea, el embajador y otros empleados de la Embajada habían salido ya y una manifestación del Bloque se dirigía para acuerpar a los ocupantes que habían quedado dentro. Y el cuerpo de seguridad abrió fuego; anunciaron por lo menos 6 muertos y muchos heridos. En la mesa redonda hubo varios periodistas y también la televisión. Un periodista mexicano me siguió al Hospital de la Divina Providencia para tener una entrevista, se trata del periódico Uno más Uno de México.
Llegaron las hermanas del Sagrado Corazón a preguntar que podían hacer con la masacre de la Embajada de Venezuela que está muy cerca del Colegio Sagrado Corazón. Pedimos informes a la Cruz Roja para ponernos a sus órdenes, pero dijeron de la Cruz Roja que ni ellos habían podido acercarse porque no los dejaban los cuerpos de seguridad.
Avisaron del Colegio Guadalupano que habían llegado ya las dos religiosas que habían sido sacadas a Guatemala. Por teléfono me hablaron la dos muy emocionadas y agradecidas de estar de nuevo en la patria. Les prometí ir a almorzar con ellas mañana.
Miércoles, 23 de mayo
Tuve desayuno de consulta con los sacerdotes y laicos de costumbre. Los temas principales fueron evaluar el diálogo que ha estado sosteniendo la ANEP, Democracia Cristiana y al cual fue invitada la Iglesia. Ultimamente asistió también representación del Gobierno. Se pregunta si conviene seguir, si se saca algún provecho. Concluimos que siempre era conveniente participar y aprovechar para iluminar desde la Iglesia los caminos de nuestra situación; otra consulta fue sobre el foro nacional convocado por el señor Presidente. El parecer general fue que hay que esperar mayor credibilidad para no dejarse manejar por intereses políticos. Y un tercer punto, sobre la relación entre la Iglesia y el Bloque Popular Revolucionario que en el actual conflicto con el Gobierno ha mostrado poca atención al tomarse iglesias y expresarse contra el Arzobispo.
Se dijo que no había que rompe relaciones, aunque hubiere un momento difícil en su defensa de los derechos del pueblo y que había que esperar para decidir estas relaciones, las cuales siempre se han expresado en una autonomía de las dos realidades, la Iglesia y el Bloque.
Llegó, a propósito del Foro Nacional convocado por el Presidente, el doctor Guillermo Ungo y otro miembro de la Democracia Cristiana a conversar con la Iglesia para ponerse de acuerdo en la asistencia o ausencia al Foro Nacional. Aunque agradecí y manifesté buena voluntad, quedó claro que no podíamos presentar como una acción conjunta, como si la Iglesia se asociara a un partido político. Durante esta reunión, nos llegó la trágica noticia del asesinato del doctor Rebollo, Ministro de Educación. Y me parecía con una venganza por el asesinato de los catorce manifestantes, muertos por la Policía y la Guardia en las cercanías en la embajada de Venezuela ayer.
Tuve una entrevista con el periodista español, el cual me expresó sus criterios, y su pena por nuestra prensa. Ya que el fue testigo de los acontecimientos ayer cerca de la Embajada de Venezuela y lee hoy en nuestra prensa una información impuesta por el capital y el Gobierno.
Fui a almorzar al Colegio Guadalupano para conversar con las dos religiosas que ya regresaron de Guatemala, a donde fueron enviadas por las autoridades de migración. Gracias a Dios, han sabido superar esta hora de calumnia y atropello y están dispuestas a trabajar con el mismo cariño en aquel pueblo remoto, Chalatenango.
Por la tarde preparé con el Padre Moreno un comunicado a propósito de la muerte de los manifestantes y del asesinato del doctor Rebollo, para expresar mi solidaridad con el sufrimiento de tantas familias, mi oración por los difuntos; y un llamamiento a que no se encaprichen en sus conflictos, el Gobierno y el Bloque. Y haciendo un llamamiento a quienes pueden interceder para que ésto se arregle pronto, ya que está costando muchas vidas y mucho malestar a nuestro pueblo.
Durante todo este día ha habido en Casa Presidencial una reunión de ministros ante la gravedad de la situación y una reunión también de Asamblea Nacional, lo cual ha dado por resultado el decreto del Estado de Sitio para 30 días.
Con Monseñor Urioste preparamos el diálogo que se transmite por radio y que, esta vez, lo dedicamos a comentar la situación del conflicto entre el Gobierno y el Bloque Popular Revolucionario, expresando las ideas de la Iglesia que ya son conocidas. Un llamamiento a las dos partes para volver pronto a la concordia. También me referí a la mesa redonda de la Universidad y al día del Seminario junto con confirmaciones de jóvenes que se celebrará el próximo día de Pentecostés, 03 de junio. Terminé leyendo el llamamiento a propósito de los acontecimientos trágicos de ayer y de hoy.
Jueves, 24 de mayo
Este día transcurre en la nerviosidad de la situación violenta en el país, más la Ley del Estado de Sitio. No obstante, deberán enterrarse hoy los 14 cadáveres de los que fueron acribillados por la policía y la Guardia en la Embajada de Venezuela y el Ministro de Educación, doctor Carlos Herrera Rebollo. El entierro no fue de los 14 en Catedral, ya que 07 de ellos fueron recogidos por sus familiares. En Catedral se velaron 7 cadáveres y esta mañana fueron enterrados, acompañados por una muchedumbre que se calcula en unas 7 ó 10,000 personas. Aprovecharon esta aglomeración los ocupantes de la Catedral para salirse ellos también y dejar desalojada la Catedral después de tres semanas de ocupación. Gracias a Dios, no hubo incidentes que lamentar durante este movimiento del entierro de las víctimas de ayer.
El entierro del doctor Rebollo fue por la tarde. Su cadáver fue velado en una casa comunal. Era hombre sencillo. Amaba mucho al pueblo y por eso quiso ser acompañado por los pobres en sus últimos momentos.
En los periódicos salió mi llamamiento a hacer un esfuerzo por terminar este conflicto, diciendo que no es hora de mostrar quien es más fuerte, quien vence, sino quien es más humano y es capaz de ceder y perdonar para que no sigan lamentándose tragedias en los diversos ambientes del país.
Tuve una entrevista con cuatro seminaristas mayores que participaron en la manifestación del primero de mayo. Ellos han justificado su asistencia como una solidaridad con los trabajadores y campesinos, clase humana a la que ellos pertenecen. Yo francamente no he visto que haya algún error. Unicamente les hice ver que, dadas las circunstancias tanto del país como especialmente de la Iglesia y del Seminario y de nuestra Arquidiócesis, sería prudente contar siempre con un asesoramiento de quienes pueden dirigirlos bien. De manera especial, les invité a mantener siempre el diálogo con su obispo. Y comprenderles sus inquietudes sin quitarles lo noble que estas inquietudes tienen, pero llamándoles a que sepan expresarlas para que sean eficaces testimonios al servicio de las justas reivindicaciones del pueblo que, como sacerdote, o llamados al sacerdocio, no pueden hacerse más que con un carácter plenamente evangélico.
Esta noche hubo nuevas violencias en el sector de San José de la Montaña, donde el párroco Padre Víctor Guevara, ha quedado sitiado por un cerco de policías que custodia aquella región. Y el Padre Pedraz, encargado de la radio, también fue obligado a descender del carro mientras iba para el Hospital de la Divina Providencia y se le ordenó regresar. Parece que el objeto de esta vigilancia en esta zona han sido atentados del Bloque por ocupar la Embajada de México y que parece que junto con la Embajada de Panamá eran el proyecto próximo de sus ocupaciones, pero que los cuerpos de seguridad no dejaron efectuar.
En una oficina de contabilidad, cerca de la Plaza Libertad, fue asesinado, al salir de su oficina, el contador Montoya, no recuerdo bien el nombre. Pero es alguien que ha trabajado con nuestras cooperativas en la contabilidad de la construcción de Catedral y en el Secretariado Interdiocesano Social. No sabemos los móviles, ni quien fue, quien lo asesinó.
Por otra parte, se celebró con gran fervor la fiesta de María Auxiliadora, hoy 24 de mayo; principalmente, en la Iglesia que lleva su nombre regida por los padres salesianos y en los colegios y demás dependencias de los hijos de Don Bosco.
Viernes, 25 de mayo
Toda esta mañana la hemos dedicado a una reunión del Senado para evaluar la situación de la Diócesis en este marco tan complicado del país. En las relaciones con los grupos organizados, con el Gobierno, sobre todo, para conclusiones de como debe ser nuestra actitud sacerdotal y eclesial. En este sentido, también se preparó la próxima reunión del Clero. La cual se desarrollará presentando primero los hechos que han conmovido al país en este mes de mayo; la actitud de la Iglesia y se pedirá que cada sacerdote exprese con toda confianza y libertad sus sentimientos, su pensamiento, su criterio acerca de la actitud de los sacerdotes y de la Iglesia en general. Se iluminará todo con la luz de los documentos de la Iglesia y se terminará con una síntesis de conclusiones prácticas preparadas, presentadas como fruto de toda la reflexión por el Arzobispo. Me dió mucho gusto la sinceridad y el interés que se mostró para actuar como verdadera Iglesia que evita confusiones y ambigüedades en un ambiente tan crítico como el que estamos viviendo.
Se revisó también el reglamento del senado y se propusieron algunas enmiendas que se llevarán a la consulta del Clero. Se conoció también de un documento que Monseñor Alvarez leyó en la reunión del Clero, en su Diócesis de San Miguel, y que denuncia la actitud del Arzobispo y de la Arquidiócesis. Por mi parte, les dije que aprovecharamos esas críticas para revisar con sinceridad y humildad nuestra actuación.
Por la tarde, visita del Rector de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, quien me expresó con un sincero sentido de amor a la patria, la preocupación ante la ausencia que las universidades deben tener al Foro preparado por el Presidente de la República, ya que no hay un ambiente de confianza y de credibilidad. Por lo cual se cree que asistir es como legitimar actitudes que han causado tanto dolor a la patria. Y que sería como apañar esas injusticias y también las actitudes pretendidas democráticas, pero que, en realidad, niegan esa libertad que la verdadera democracia exige. Le dije que hay ausencias que son dolorosas, pero que son necesarias y que la ausencia a este Foro, en estas circunstancias, no era una negación a la buena voluntad de quienes quieren sinceramente trabajar, sino pedir ambiente apropiado para colaborar con buena voluntad.
Visita también de la encargada de negocios de Panamá para suplicarme una intervención ante la Comisión Negociadora del BPR, para ofrecer de parte de su Gobierno asilo a los que ocupan las embajadas de Venezuela, y de Francia; ofreciendo que también ya están hechos los trámites con la cancillería de El Salvador, para que puedan salir para aquel país. Como los ocupantes del Bloque se niegan a esta intervención de asilo, me piden que haga un trabajo de convencimiento, por su bien, ya que, de no salir asilados para Panamá tendrán que ser juzgados por los delitos de ocupación y de secuestro de rehenes de ambas embajadas ocupadas. He buscado hasta muy noche los medios de hacer llegar esta carta de la Embajada de Panamá a la Comisión Negociadora del Bloque, pero no ha sido posible encontrar este contacto, lo cual se dejará que para mañana, por la mañana si Dios quiere.
Sabado, 26 de mayo
En el Instituto de las hermanas somascas tuve la reunión con los asesores de comunicación social, para informarme y preparar la parte informativa de la homilía con sus respectivos juicios. Resulta muy interesante este estudio que semanalmente hacemos, porque nos dá el pulso de la realidad de nuestro país. Principalmente, analizamos esta vez la continuación de actos violentos en que ha habido muchos muertos y heridos, ocupación de las embajadas de Venezuela y de Francia, la situación del Estado de Sitio decretado desde el 24 de mayo y el Foro Nacional al que el Presidente de la República ha invitado y al cual han respondido muchos con escepticismo y no participando. De parte de la Iglesia, fue invitada la Conferencia Episcopal y los obispos eligieron como representantes a Monseñor Revelo y a Monseñor Freddy Delgado. Por mi parte, expresé que no me oponía al diálogo, pero que desearía una base de confianza con hechos, retornando el Gobierno al respeto de los preceptos de la Constitución que están tan violados y que, por tanto, no hay credibilidad en su sinceridad de buscar el diálogo. Sugerí a la conferencia que no fueran obispos, sino otros las que la representaran.
A continuación tuve una entrevista con un reportero del periódico mexicano Uno Más Uno, el cual se muestra muy asustado de la situación en El Salvador. También tuve una entrevista con la religiosas guadalupanas, la superiora del colegio y las dos religiosas que fueron expulsadas a Guatemala y luego traídas, pero que el Ministro les ha llamado la atención por su labor que no es religiosa, según él, aunque las religiosas pidieron hechos concretos y pruebas y no se les dió. La escuchábamos con el Padre Fabián Amaya y les animamos a continuar su labor basadas siempre en la verdad y en la verdadera evangelización, porque están haciendo mucho bien en aquel remoto pueblo de Arcatao. Pero que durante el Estado de Sitio mejor evitar toda manifestación que pueda provocar alguna reacción desagradable en el Gobierno.
El Padre Brito con el Bachiller Cuéllar se encargaron de llevar la nota de la Embajada de Panamá que ofrece asilo a los que ocupan las embajadas de Venezuela y Francia. Ellos prometieron, según me dijo el Padre Brito, reflexionar sobre el asunto.
Domingo, 27 de mayo
Gracias a Dios la Catedral ha sido desocupada y pudimos tener allí nuestra Eucaristía de las ocho de la mañana, pero lamentablemente la radio YSAX todavía no ha podido ser reparada y la Misa no se pudo transmitir. Se nota que es muy escuchada, porque han sido muchas las preguntas al respecto. Es el domingo de la Ascensión del Señor y prediqué sobre la trascendencia, que nuestra misión y nuestra vocación como Iglesia y como cristianos, es siempre trabajar en este mundo, pero con una intención de trascendencia. En la Misa hubo muchos periodistas y se tomaron también fotografías de televisión. No pude identificar a todos los periodistas, pero me parece que algunos eran de Europa, de México y de otras partes.
La encargada de negocios de Panamá llamó a una colaboración a la Iglesia, ya que ha venido una comisión especial de Panamá, para tratar el asunto del asilo de los ocupantes de las embajadas de Venezuela y Francia. Encargué al Padre Brito para este servicio.
Por la noche, una entrevista con un periodista de la UP. Asuntos de la Iglesia y del país.
Lunes, 28 de mayo
Hoy he acabado de perfeccionar la carta que enviaré al Cardenal Baggio, con copia para el Secretario de Estado, acerca de la sugerencia de Monseñor Quarracino de nombrar un Administrador Apostólico, Sede Plena. He expresado que tal solución no sólo me parece ineficaz, sino muy dañina para la Arquidiócesis, porque acabaría de romper la unidad y expresaría una situación doble de nuestra comunidad arquidiocesana; que no se trata únicamente de resolver problemas personales sino de que sea expresión de todo el pueblo de Dios, la voz del obispo, lo cual se neutralizaría enormemente poniéndole un Administrador Apostólico, cualquiera comprendía que es una desconfianza acerca del propio obispo. He sugerido, como la solución más de fondo, la nominación de nuevos obispos, con criterios del Concilio Vaticano II, para inyectar nuevos criterios pastorales en la conferencia episcopal, evitando así una desunión que no tiene razón de ser, ya que va en contra de esos principios del Concilio.
Tuve la visita de tres representantes de organismos franceses en favor de los Derechos Humanos, que han venido a preocuparse de investigar la situación de los derechos humanos en nuestro país.
Almorcé con los Padres EllaCuria y Sobrino para platicar acerca del proyecto de una próxima carta pastoral sobre la situación del país y la misión de la Iglesia, que espero se publicará para el próximo 06 de agosto. Nos reuniremos dentro de ocho días para concretar el esquema que ya se espera para entonces tener preparado.
Hice una visita a la oficina de los medios de comunicación social para investigar la situación de los trabajos de la radio que todavía está sin salir al aire, mientras hay mucha gente inquieta porque se resuelva esta situación. Parece que falta algo que han ido a traer a Estados Unidos y que se espera que llegue de un momento a otro. Pero supliqué al Padre encargado que apresurara y si fuera necesario alguien fuera personalmente a traer esos repuestos a los Estados Unidos. Me dí cuenta también que capturaron y torturaron a un joven que trabaja en la Imprenta Criterio donde se edita nuestro semanario Orientación y que en el interrogatorio salieron muchas preguntas que denotan la mentalidad persecutoria que se tiene contra nuestra nuestros medios de comunicación social de parte del Gobierno.
Por la noche quise evitar la ultreya de Cursillos de Cristiandad, pero, había…
DIARIO 29 de mayo – 19 de junio
Martes, 29 de mayo
En el desayuno tuve una interesante conversación con el Padre César Jérez, Provincial de los jesuitas, que acaba de regresar de un viaje por América del Sur. Me informó sobre el interés que allá hay por seguir la pastoral de nuestra Arquidiócesis y como se han hecho eco de varias expresiones de nuestro magisterio episcopal. Es interesante escuchar las impresiones de Iglesias y conferencias episcopales tan poderosos como el Brasil, en comparación de nuestra pequeñez; es para expandir el espíritu y ver como esta voz y línea de la Iglesia de identificarse con el pueblo y de enfrentarse, aún por necesidad, a gobiernos que no comprenden al pueblo, y la necesidad de optar, como aconseja Puebla, por los pobres , es un hecho admitido y que van en mucho progreso en una Iglesia que busca auténticamente ser la Iglesia de Jesucristo.
Toda la mañana fue dedicada a la reunión del Consejo naciente de pastoral; fue muy consolador hacer una evaluación, reconocer las deficiencias de que todavía adolecemos, pero con entusiasmo proponer sugerencias para llevar este trabajo del Consejo a una verdadera fuerza pastoral de coordinación, de orientación de la pastoral de toda la Arquidiócesis. Durante la junta pude tener algunos paréntesis para atender a un seminarista de Chalatenango. Y, sobre todo, a un empleado de la imprenta que fue torturado y al que se le hicieron preguntas bastante maliciosas contra la Arquidiócesis. Y con el Padre Martel de Apopa que me da malos informes acerca de un joven sobre el cual hemos estado observando para ver si de verdad se trata de una vocación. Según la conversación, lamentablemente, hay que descartar toda posibilidad, por ahora, de proseguir estudios en el Seminario.
Por la tarde, entrevista con un periodista de la UP y otro de varias revistas de América del Sur y de Norteamérica. Todos los periodistas se interesan en conocer el pensamiento de la Iglesia y sus relaciones con el Gobierno. A lo que trato de ser sumamente claro y sincero; denunciando también los manejos que a veces se advierten en la publicidad de nuestro ambiente.
He estado puliendo la carta para la Sagrada Congregación para los Obispos, que próximamente llevará mi opinión acerca de la sugerencia de un Administrador Apostólico, Sede Plena, y de los posibles caminos de solución de nuestro conflicto eclesial.
Miércoles, 30 de mayo
Nuevamente, ha sido un día muy intenso. Amanecimos con la noticia del asesinato del encargado de negocios, con rango de Embajador de Suiza, en la Plaza Alegre, Paseo Escalón. Fue atacado cuando venía para la embajada y muerto con una ráfaga de ametralladora. El Secretario de la Nunciatura quiso hablar conmigo. Le prometí ir a la Nunciatura por ser más tranquilo, pero no puede llegar dado que este sitio, cercano al asesinato, está bloqueado por retenes de los cuerpos de seguridad. El Secretario de la Nunciatura vino al Arzobispado, para manifestarme confidencialmente, que Francia había pedido a la Santa Sede una intervención para resolver el problema de la Embajada en El Salvador, ocupada por el Bloque Popular Revolucionario, y donde están en rehenes al Embajador y otros colaboradores, cuya condición humana es sumamente precaria y ya se prolonga por más de 25 días. Me surgió algunas ideas y me agradó la sugerencia porque aprovecharé, como pastor, para tocar el crímen que se acaba de cometer y otros atentados contra la libertad y dignidad de embajadores o ciudadanos de otros países.
Vino al Arzobispado también una comisión de dos abogados franceses, el Padre Maurice Bart, que venían en nombre de varias organizaciones de Francia a manifestar su solidaridad de nuestra Iglesia y a tomar datos de nuestra situación. Conversamos ampliamente y me dieron mucha fortaleza con su aprecio que comprende muy bien nuestra situación. Por mi parte, también, les agradecí y les pedí que no nos dejaran, dándonos siempre este apoyo moral que hoy ellos me traían.
Por la tarde, reunión con encargados de comunicación social y el Padre Pedraz, encargado de la radio, para estudiar la situación de nuestra radio. En lo técnico, se espera que pronto sea superada la dificultad que la tiene hoy impedida de salir al aire. Más bien, estudiamos los aspectos ideológicos y se constituyó, para responsabilizar el contenido de nuestras emisiones, una comisión compuesta por el Padre Pedraz, el Padre Fabián Amaya, la señorita Doris Osegueda y el Padre José Luis Burget y el Padre Gregorio Rosa. Todos ellos estaban presentes. Aproveché para consultarles sobre el pronunciamiento sugerido por la Nunciatura y que de mi parte quiero también hacer como un pronunciamiento pastoral. Me dieron varias ideas y el Padre Gregorio me acompañará para terminar la redacción de este documento. Por lo cual, después de la cena, llegó al Hospital de la Divina Providencia donde trabajamos hasta muy entrada la noche. Por esta razón, tuve que renunciar a la invitación que me habían hecho los cursillistas de cristiandad para una cena, que hubiera aprovechado también para muchos asuntos de la pastoral laical. Pero les pedí disculpas y les prometí reunirnos muy próximamente.
Jueves, 31 de mayo
El Padre Gregorio Rosa y yo amanecimos terminando nuestro trabajo, después del descanso nocturno, se siente más fresca la mente y pudimos terminarlo hacia las 10 de la mañana. Invité al Secretario de la Nunciatura y a los encargados de la Embajada de Francia para darles a conocer la redacción. El Secretario de la Nunciatura me hizo varias observaciones y casi me presagió que tal vez no gustaría tanto a los franceses por no dedicarlo casi exclusivamente a ellos. Yo le advertí que era un llamamiento pastoral y que no podía parcializarse sólo con los franceses, sino aprovechar esta circunstancia que había sido asesinado, también, el Embajador de Suiza, para tocar todos los asuntos de los diplomáticos extranjeros y de los ciudadanos extranjeros, por los cuales la Iglesia también tenía un deber pastoral. Después de otras observaciones hechas privadamente con el Secretario de la Nunciatura, llegaron los representantes franceses a quienes dí a leer la redacción del pronunciamiento y ellos me manifestaron su completo agrado. Unicamente me pidieron que si podía acentuar que ya eran 28 días de cautiverio en la Embajada, del embajador y sus colaboradores, entre ellos una señora anciana de 70 años, en condiciones físicas e higiénicas muy inhumanas. Con gusto acepté esta enmienda y se dió a la publicidad el pronunciamiento, tal como lo habíamos preparado. Agregué una observación de la Secretaría de la Nunciatura referente a acentuar la petición al Gobierno de interceder en el asunto de la Embajada de Francia, pero siempre con respeto absoluto a las vidas humanas que estaban implicadas en esta ocupación.
Las primeras impresiones de esta tarde del pronunciamiento que han comenzado a difundirles han sido muy laudatorias.
Por la tarde, tuve un profundo respiro pastoral al aceptar la invitación del Padre Cayo Ayala a celebrar en San José Villanueva, su pueblo natal, los sesenta años de matrimonio de sus padres, don Francisco Ayala y doña Herminia. Coincidía con la clausura del mes de mayo. Y a la Iglesia del pueblo llegaban las flores de mayo de los diversos sectores de aquella parroquia que atienden las hermanas Pasionistas. Un conjunto precioso para una tarde pastoral para hablar de la Virgen, de la santidad del matrimonio y de la fidelidad, del don de la vida, de la fecundidad santa. Temas que un ambiente de sencillez, había también muchos niños que habían llegado de la escuela, llevada en pleno. Un tema con lenguaje pastoral sencillo y un saludo, a la despedida, a todos dándoles la mano, deja en el alma una tranquilidad de estar enraizado y encariñado con un pueblo que sabe corresponder.
Viernes, 01 de junio
En la Curia, compartí un cafecito con los sacerdotes George, Trinidad Nieto y Modesto Villarán, de Soyapango, con quien fue la plática principal, ya que ayer salía difamado en los periódicos como que si el pueblo de Soyapango pidiera su traslado a otra parte, por ser un sacerdote que ofende a la gente del mercado que rodea la Iglesia; lo cual es completamente falso, conociendo al Padre y la simpatía que goza en el pueblo. Lo animé a salir adelante. El también está muy animado, porque estas calumnias, más que todo, logran animar más a los pastores. Le conté, por mi parte, como también a mi me habían llegado llamadas telefónicas amenazándome de muerte y una tarjeta con la cruz swástica UGB, Unión Guerrera Blanca, ordenándome que debo cambiar de modo de predicar, que debo de condenar al comunismo, que debo de elogiar a los muertos de los cuerpos de seguridad, etc, y que si no sigo esa línea, que me van a eliminar. Lo cual comprendo que son como amenazas psicológicas, para detener una voz que siente en conciencia que no se puede callar, para hacer luz en medio de tantas confusiones e intereses bastardos.
A la diez de la mañana tenía anunciada la visita del señor embajador de Estados Unidos, quien vino con el nuevo Secretario de la Embajada, con el encargado de asuntos políticos y el representante de la ayuda internacional para América Latina. Manifestó con mucho respeto su admiración por nuestra Iglesia y tocamos varios tópicos en que estas relaciones de la Embajada de Estados Unidos, con el Arzobispo, puede redundar en mucho bien para nuestro país.
Vino también una representación de los estudiantes de medicina. Dos jóvenes muy entregados a su profesión, ya casi para titularse, me expresaron su asombro ante la podredumbre de la situación de la medicina en los centros asistenciales cuando se trata del origen de la vida. ¡Cuántas mutilaciones! ¡Cuántas esterilizaciones de hombres y mujeres, hechas con suma facilidad y masivamente! Me fue una expresión de estos jóvenes al decirme: “Se está castrando la fecundidad de nuestro pueblo y es necesario hacer algo”. Y me propusieron celebrar una mesa redonda en la Universidad sobre este tema y que participara en ella. Con gusto acepté y los felicité y le pedí a Dios que les conserva siempre esa mente limpia, para ser verdaderos médicos defensores de la vida y no destructores de la humanidad. Quedamos que el 11 de junio, en la proximidad del día del estudiante de medicina, se tendrá este Foro, junto con otros profesionales de la medicina, de la economía para estudiar esta violación del derecho original de la vida.
Tuve también la visita de dos obreros para invitarme o que enviara un representante, a una reunión de unificación de ideales obreros que tendrán mañana. Con gusto acepté por lo menos enviarles un representante, ya que mi tiempo está comprometido con una reunión de religiosas.
Hubo también una visita de un periodista japonés, tuve que usar intérprete, porque él no habla español y yo no hablo inglés. Y se trató también de esclarecer la posición de la “Arquidiócesis en la situación actual política del país.
Por la tarde, una entrevista telefónica con un periodista de Colombia, acerca de la ocupación de la Catedral por el FAPU, que nuevamente la tiene desde ante ayer pero que han prometido entregarla mañana, o sábado. Acerca de ésto platiqué con el Padre Moreno y con el ingeniero Ricardo Navarro, de la Comisión de Derechos Humanos de El Salvador, que vino a visitarme en nombre del FAPU, para explicarme el motivo de la ocupación, es llamar la atención para protestar por la muerte violenta de una de sus compañeras. Y me valí de ésto para que intercediera ante el FAPU, de que para el domingo nos dejaran ya libre la Catedral. Manifestó él que no había mala voluntad contra la Iglesia, sino que se valían únicamente de este medio, para hacerse oír y que me pedían disculpas.
Hoy tuvimos reunión como primero de mes, la Hora Santa que, gracias a Dios, recobra importancia, por la cantidad de gente y más que todo por la calidad de oración que hacemos, por las muchas necesidades de la Iglesia y de la patria. Mi hermano, Gaspar, que trabaja en un puesto importante de ANTEL, ha sido inesperadamente bajado de cargo. Sin duda, es una revancha del Gobierno por ser familiar mío y siento que mi familia sufra consecuencias de un deber profético que tengo que cumplir. He tratado de darle ánimos y de decirle que ante toda situación debemos de estar siempre muy fuertes en la esperanza y estar firmes también en la lucha por la justicia de nuestro pueblo; aunque es difícil que gente sin mucha formación religiosa y cristiana comprenda el papel actual de la Iglesia, que es muy difícil, si quiere ser fiel al Evangelio.
Sabado, 02 de junio
Tuvimos un desayuno de asesoramiento para la homilía. Discutimos bastante el tema de la fe y la política. La necesidad de una pastoral especificada para que puedan cultivarse esas inquietudes de algunos cristianos más promovidos, principios y reflexiones que no se pueden hacer en una pastoral masiva. Mientras tanto, hay que hacer lo que se pueda para que los que se han organizado en las organizaciones políticas populares no pierdan la fe que tal vez fue la que inspiró su compromiso político. Lo que por falta de un seguimiento capacitado de la Iglesia puedan perder esa fe y orientarse por soluciones desviadas.
Desde las nueve tuvimos una reunión con las superioras religiosas para analizar el caso de las hermanas expulsadas de Arcatao; expulsión que fue corregida por el mismo Gobierno y que dá capacidad para que las hermanas puedan volver, aunque se espera un permiso de la superiora general. El relato de una de las religiosas fue muy conmovedor, sobre todo, por su espíritu de entrega con que quiere continuar su trabajo en aquel ambiente donde ella se siente sumamente comprometida y cree que la ausencia sería dañina y haría retroceder lo que se ha progresado en esas reflexiones. Las religiosas de otras congregaciones manifestaron su solidaridad con estas hermanas ejemplares y las invité a que con frecuencia hiciéramos estas evaluaciones y estas reflexiones que nos vayan identificando más con la pastoral de la Arquidiócesis, que no trata de imponer, sino de dialogar para que todos convencidos caminemos por donde el Señor quiere que caminemos.
Fui a almorzar con la comunidad de las religiosas Oblatas al Divino Amor, ya que con tristeza muy grande tienen que despedir a su actual superiora, la Madre Carmen María Scaglietti, que han decidido dejar la vida religiosa y regresar a Costa Rica, su patria. Ví muy consternadas a todas las hermanas y traté de animarlas con espíritu eclesial. Lo mismo que a la Madre Carmen, para que, aunque ya no sea religiosa sea siempre fiel servidora de la Iglesia.
Domingo, 3 junio
La falta de radio YSAX ha hecho llegar más gente a la Catedral para la Misa de las ocho. Además un buen grupo de jóvenes y niños que iban a recibir la confirmación en este día de Pentecostés, acompañados por familiares, padrinos y comunidades, hicieron esta Misa sumamente solemne. Estaba para tomar impresiones de esta liturgia radio-televisión de Inglaterra, la BBC de Londres, quienes estuvieron durante toda la Misa y principalmente a la salida donde me formularon unas preguntas acerca de la opinión que tengo de como se puede encontrar una solución pacífica a la situación del país y cuál es mi pensamiento acerca de soluciones violentas. Las respuestas fueron sugeridas por lo que siempre he predicado, que la mejor solución pacífica es un retorno al amor y un sentido sincero de buscar un diálogo, pero que esté enmarcado en un ambiente de confianza que debe demostrarse con hechos, para que el pueblo en toda libertad pueda expresar sus opiniones y que todos sean admitidos al diálogo que busca esa solución. En cuanto a la violencia, expuse los principios que ya escribí en mi carta pastoral.
Lunes, 04 de junio
Después de Misa, en el Hospital de la Divina Providencia, me esperaban dos representantes del FAPU para proponerme una entrevista y que señalara la fecha. Les dije que consultaría, lo cual hice durante el día, y les ofrecí el próximo jueves a las seis de la tarde. También representantes de FENASTRAS vino a pedirme la Misa para la señorita que murió acribillada a balazos en La Reubicación, de Chalatenango, Misa que ella proponía para el próximo miércoles a mediodía en Catedral. Le dije que ya me habían pedido una Misa por esa misma persona y que la celebraría en la capilla de la Divina Providencia. Ella no estaba conforme porque decía que era necesario hacerlo en público para denunciar el crimen que se cometió. Le dije que lo principal de la Misa era la oración por el difunto y que ya las denuncias se habían hecho en forma muy clara por parte de la Iglesia. Por la mañana, asistí a la reunión de la Vicaría que celebran los párrocos de la Vicaría de Asunción, Flor Blanca. Les expuse mi proyecto de preparar una pastoral de la zona Metropolitana y les pedía su colaboración ya que ellos están enclavados en la plena ciudad, en la parte más distinguida. Fue muy agradable oír un comentario muy positivo en busca de un mejor servicio a esta capital. También les propuse el problema del párroco de San José de la Montaña, y como proyecta un retiro de la República. Aprovecharé más esa ocasión para encargar a la Vicaría, la cual propone o al padre Carlos Mejía, actual párroco de la Asunción de Flor Blanca, o al padre Ernesto Abrego, párroco de San Benito, como una solución para que San José entre en el mismo espíritu de los demás párrocos de la Vicaría.
Un objetivo principal de mi visita a esta reunión era animar, porque he tenido noticias de que hay cierto decaimiento en el ánimo de algunos y les manifesté mi complacencia en el modo como se han organizado y el sentido de equipo que le han dado a todo su trabajo parroquial. Los felicité y les animé a ir adelante.
En la Curia tuve la visita del Padre Jorge Benavides, párroco de Suchitoto, quien me expuso problemas muy interesantes de la división política y de otros aspectos de aquella interesante población. También estuvo el Padre Cazares, de Tonacatepeque y el Padre Julio Orellana, de Cuscatancingo.
Por la tarde, celebré otra Misa en la misma capilla del Hospital en sufragio del profesor P. Ramos, asesinado el 24 de abril después de haber sido torturado. Estuvieron presentes su esposa, sus tres niños y su mamá, lo mismo que otros miembros de la familia y numerosos profesores de diversas escuelas. El sermón fue sobre la palabra de San Pablo: Por un hombre entró la muerte en el mundo, diciendo que toda esta situación nuestra es como un triunfo del pecado, el pecado que se expresa sobre todo en la muerte de los otros, matar a los demás. Pero que Cristo era el principio de una justicia en el cual hemos de apoyar todas las justas reivindicaciones, sin necesidad de llegar a violencias y odios.
Me visitó un periodista de San Juan, Puerto Rico, con alguna dificultad para hablar el español, ya que él habla inglés. Nos hicimos entender en una plática muy interesante sobre la situación de nuestro país. El, al despedirse me expresó grandes elogios, diciendo que era una experiencia para él muy grandiosa haber conversado conmigo. Yo agradezco al Señor que me dé este aire de personalidad que no quiero aprovechar para mi vanidad, sino para el mejor servicio de esta Iglesia.
En el Arzobispado han preparado bastante material para la Junta del Clero que será mañana, si Dios quiere.
Martes, 05 de junio
Esta mañana fue dedicada a la reunión mensual del Clero. Asistieron numerosos sacerdotes de todas las Vicarías y también las religiosas que trabajan en los pueblos en pastoral directa de la Arquidiócesis. Coordinó el Padre Fabián Amaya y habían preparado la reunión los padres Benito Tovar y Trinidad Nieto. Se trataba de analizar los hechos del mes de mayo que han sido tan densos, tan sangrientos, tan complicados. Después de una narración de los hechos preparada por la Secretaría de Información y leída por el Padre Nieto, el Padre Jesús Delgado enfocó con principios teológicos de Puebla, de la exhortación Evangelii Nuntiandi y de la segunda carta pastoral del Arzobispo de San Salvador, los principios de los cuales podían derivarse criterios y luces para iluminar y reflexionar sobre esta realidad. Después se completó toda esta información y toda esta iluminación con algunas aportaciones en el plenario para luego, después del refrigerio, ir a grupos y retornar después a un plenario donde se recogieron interesantes observaciones y sugerencias para una pastoral que nos identifique cada vez más como Iglesia y nos haga discernir perfectamente entre las diversas líneas políticas y reivindicadoras que hoy en el ambiente. Para que desde nuestra identidad como Iglesia, posamos ser lo que Cristo quiso al poner su Iglesia iluminada por su palabra al servicio del mundo. La última intervención me tocó a mí y traté de felicitar por la riqueza que había aportado y darle valor a toda esa reflexión y resumir como consigna todo eso en estas palabras “CLARIFICACION, IDENTIDAD DE LA IGLESIA, UNIDAD SACERDOTAL (para presentar el misterio de nuestro presbiterio como el núcleo y el foco desde donde se ilumina la actividad de la Iglesia) y DISCERNIMIENTO” (para que el Espíritu Santo nos dé capacidad de no confundir a la Iglesia con otras líneas, y de ser auténticamente Iglesia saber comprender a todos los demás desde nuestra propia identidad). Se notaba mucha cordialidad y mucho entusiasmo en la reunión. Me dá la impresión de que nuestro Clero va madurando y solidarizándose cada vez más en el ideal pastoral de la Arquidiócesis.
Miércoles, 06 de junio
Por la mañana, entrevista con periodistas. Un periódico que se encarga de denunciar los abusos y atropellos contra los derechos humanos, gira por El Salvador y ha recabado muchos datos y pidió la información y el criterio de la Iglesia, que ya todos conocen.
Reunión de religiosas que trabajan en la Pastoral. Fue muy animada. El Padre Chus Delgado presentó un panorama de la situación real de El Salvador, aunque me pareció un poco parcializado y político, pero dió base para que luego enfocáramos pastoralmente la labor de construir una Iglesia auténtica que sea capaz de dialogar y de salvar todo lo que Dios nos ha encomendado entre nosotros. Estuvieron presentes casi todas las religiosas y se interesaron bastante también en el caso de las religiosas de Arcatao, expulsadas y regresadas otra vez a su trabajo.
Por la tarde, celebré Misa por Mercedes Recinos. Se trata de una obrera acribillada en su propio hogar por la represión de este momento, ya que ella era dirigente en un Sindicato, y en su propia casa, en la Reubicación, de Chalatenango fue asesinada. A la Misa asistieron, además de su familia, muchos compañeros obreros, el FAPU, organismo político popular en el que están incluidos varios movimientos obreros. Aproveché la homilía para apoyar lo justo de sus reuniones y de su reivindicación laboral, pero orientándoles a la trascendencia, de la que nos habla ya la difunta Mercedes, que morir luchando por una causa en la tierra, sólo tiene un sentido completo cuando no se han perdido las perspectivas de la eternidad. Y que un cristiano debe llevar, para incorporar en la redención de Cristo todas las redenciones por las cuales trabajan estos grupos; aunque algunos después entendieron que yo me oponía a las agrupaciones y que sólo quería cristianos buenos. Les dije: “Aquí se ve cómo es difícil hacerse entender y por eso es fácil criticar a la Iglesia injustamente”.
Por la noche, reunión con las señoras que forman el Consejo Arquidiocesano de CARITAS para que expusieran con toda libertad y franqueza las anomalías y deficiencias que notan en el personal de la oficina y en el asesoramiento del representante de la Iglesia, Padre Rutilio Sánchez. Fueron muy francas y quedé de reunirme con el gerente y con el Padre junto con un representante de la Junta Arquidiocesana, para tratar de orientar y de corregir las deficiencias y hacer que CARITAS sea lo que tiene que ser siempre, una escuela al servicio de la promoción de la caridad y el amor, valiéndose de los programas que ya existen, pero no concretándose sólo a eso sino dando un ejemplo del trabajo de la caridad de la Iglesia.
Jueves, 07 de junio
Nuevamente, una periodista, Jennie Traf, interesada por conocer directamente el pensamiento del Arzobispo y el movimiento pastoral de la Arquidiócesis. Orienté también a una religiosa belga, que trabaja en Cojutepeque y que me ayudará a organizar la oficina de la Pastoral en la Curia y la hemeroteca.
Junto con la Vicaría de Aguilares, el equipo coordinador, compuesto por sacerdotes y religiosas para estudiar el caso de Ciudad Arce, donde el Padre Joaquín Brizuela y la religiosa representan como dos movimientos pastorales antagónicos y ya se ha tratado bastante de organizar, de coordinarlos, pero parece que ya no hay remedio más que sacando a los dos para poner un elemento más unificador. De hecho, llegó la Madre Josefina a la que le explicamos con toda franqueza y está dispuesta a retirarse. El Padre Martel se encargará de avisar al Padre Joaquín y de convencer la conveniencia, por el bien de la Iglesia, de cambiar de parroquia y que exponga sus preferencias para este traslado.
Estudiamos también otros casos de la Vicaría, como el caso de Quezaltepeque, Guazapa y Opico. Me dió gusto ver la buena voluntad de resolver los problemas eclesialmente.
Por la tarde, un grupo de catequistas del Oratorio Ricaldone asistió a una cita que, lamentablemente por no haberse confirmado, no pude atender, pero supliqué al Padre Brito para que él conversara sobre lo que yo quería decirles, o sea, de ver cómo se extiende a la Arquidiócesis el sistema de los oratorios salesianos, pero encarnados en la inquietud de nuestra pastoral.
Desde las cinco de la tarde, en el Hospital de la Divina Providencia, con representantes del FAPU y por nuestra parte con Beto Cuéllar, el Padre Moreno y la Señorita Doris Osegueda, para dialogar sobre algunos puntos de divergencia entre la Iglesia y esta organización. Sobre todo, la toma de templos, las relaciones de su grupo con nuestras comunidades eclesiales de base, sus críticas a las líneas pastorales de la Iglesia. Y la conversación resultó interesante porque también se resolvió una atención de la Iglesia para ciertos movimientos políticos, aunque la Iglesia, no es especialista en política, pero sí puede asistir como invitado, respetando siempre la autonomía y la responsabilidad que los laicos y los partidos y organismos tienen en esta materia. Pero ella como Iglesia, siempre tiene una palabra que decir para apoyar lo justo o para reprobar lo injusto.
Viernes, 08 de junio
Tuve una entrevista con la directiva de la federación de colegios católicos, en la que me informaron su preocupación por la elección de la nueva Directiva que tienen que hacer, ya que llega el tiempo y tienen sus dificultades con el representante de la Conferencia Episcopal, Monseñor Aparicio. Yo les sugerí que procedieran con santa libertad y que pusieran también elementos que favorecieran a la Federación, escogidos de otras diócesis, que ciertamente hay elementos, como algún hermano marista, el Hermano Izquierdo (éste está en San Miguel) y alguna religiosa de la Asunción, en Santa Ana, y que no desmayaran en su esfuerzo por impulsar los colegios por una verdadera pastoral. También les supliqué interesarse para que las escuelas parroquiales ingresen activamente en la Federación. Hay obras en la Federación de concientización y de pastoral que vale la pena continuar trabajando como Federación de Colegios Católicos.
En el almuerzo con el padre provincial de los Padres jesuitas y otros tres de la misma Compañía, para pedirles un asesoramiento acerca de la situación del momento. Fueron muy explícitos y muy sinceros en darme su opinión; también para elaborar una próxima carta pastoral de acuerdo con una encuesta que se ha hecho a todos los párrocos y a todas las comunidades que vengan a ser como el voto, como la opinión de la Iglesia en la Arquidiócesis en el Foro Nacional que ha resultado muy parcial, pero que la Iglesia siente la conciencia de decir, desde su competencia, la opinión para el bien público en esta situación del país. Ya tenemos un esquema y esperamos las respuestas de las comunidades para incorporarlas en la redacción definitiva.
Esta tarde tuvimos una evaluación de los trabajos de organización de la Curia. Nos ayuda al Padre Ibañez con otros cooperadores de la institución de la Fundación de Vivienda Mínima. Y aunque sea un pequeño paso, pero nos dijeron que se notaba ya un caminar hacia la organización de la Curia, que vamos buscando para un mejor funcionamiento de la Institución Eclesial en nuestra Arquidiócesis. Una de las condiciones más útiles fue la de que, los principales responsables de la Curia y de la Diócesis nos reuniremos semanalmente los martes a las ocho de la mañana, con la presencia de un seglar de la Vivienda Mínima, que nos dará su juicio visto desde afuera. A continuación con los mismos colaboradores de la Fundación y el Padre Pedraz, encargado de la radio, conversamos sobre la situación de nuestra emisora y la necesidad de instalar los nuevos aparatos, pero que suponen un gasto de cien mil colones, para la instalación de la nueva antena. Supliqué al ingeniero Galván que redactara en mi nombre, un cable o télex para la institución MISEREOR que nos ha ayudado ya grandemente a la que le pediremos una nueva ayuda para esta instalación ya que el aparato antiguo, que está ahora suspendido por carencia de un repuesto que no se encuentra, no se sabe si lo podremos reparar y urgen tener una radio que exprese el pensamiento de la Iglesia.
Sabado, 09 de junio
Como todos los sábados, tuvimos un desayuno de consulta para preparar las notas de la homilía. Y resulta una reunión muy interesante porque se evalúa el caminar de la Secretaría de Información Social. Criticamos la nueva forma de Orientación, pidiendo que se suspendieran algunas notas muy piadosas y que se diera lugar a informaciones o a criterios que sean más útiles en el momento en que nuestro periódico es la única voz, ya que la radio está sin poder salir al aire. Se acordó que la señorita Doris Osegueda, que dirige Orientación, se asesore de elementos que sean un poco agresivos, aunque se haya que frenar, pero siempre es bueno tener quienes impulsen también en este sentido.
Como de costumbre, dediqué el resto del sábado a preparar la homilía del domingo y otras atenciones espirituales y personales.
Domingo, 10 de junio
Gracias a Dios, la Misa de Catedral siempre muy concurrida, sobre todo, en este tiempo en que nos está fallando la emisora y mucha gente se acerca para escuchar lo que antes escuchaba por radio. Es el domingo de la Santísima Trinidad y aproveché para presentar en la homilía la idea del Dios de nuestros padres, tal como nos los presenta el Antiguo Testamento en la primera lectura, “UN DIOS QUE ACOMPAÑA AL PUEBLO EN SU HISTORIA” y de allí apliqué a nuestra historia, aplicándolo concretamente a nuestra semana, invitando al pueblo a tener siempre aquella fe de Israel en el Dios que iba con ellos hasta en las máximas dificultades del pueblo. El segundo pensamiento fue “EL DIOS DE JESUCRISTO”, la revelación de la Santísima Trinidad, el amor del Padre, un Dios que se hace presente en el hombre que lo encarnó, Jesucristo: Misericordia, amor, entrega por los hombres. Y finalmente, la segunda lectura de San Pablo, que nos habla del ENVIO DEL ESPIRITU SANTO para realizar en los hombres un proceso que lo una a la Trinidad Santísima, haciéndolos hijos de Dios, recibiendo un Espíritu de Amor, no de temor ni de esclavitud, sino de santa libertad y de gran esperanza ya que somos herederos de Dios y co-herederos con Cristo.
Al mediodía, fui a celebrar con las religiosas Oblatas al Sagrado Corazón 25 años de vida religiosa de Sor Ana de Jesús Ovín. Resultó una Misa muy sentida, es decir, cordialmente participada por todos y a la hora de la homilía participaron también unas niñas de alguna comunidad que ellas tienen en Ciudad Arce; lo mismo que la participación de la festejada, la Hermana Ana, fue sumamente emocionante. La provincial aprovechando un llamamiento que yo hice en mi homilía dijo que, con el consentimiento de la superiora general, me ofrecían toda su colaboración para el trabajo de difundir la devoción al Corazón de Jesús, no sólo en El Salvador, sino en América Central. Tal como me lo encomendaron en el reciente seminario del culto del Corazón de Jesús, celebrado en Santo Domingo, donde me hicieron presidente de un pequeño comité para difundir la devoción del Corazón de Jesús en América Central. Quedamos de que muy próximamente nos reuniremos con las hermanas que se van a dedicar a este trabajo y lo creo todo, pues, un regalo del Corazón de Jesús y ojalá que, por nuestro humilde medio, su reino se extienda y profundice más en nuestros cristianos centroamericanos.
Por la noche, en la Colonia Atlacatl celebran también la fiesta patronal de la parroquia, ya que es la parroquia de la Divina Providencia y celebran precisamente el día de la Santísima Trinidad. Los padres redentoristas, que tienen a su cargo esta parroquia, concelebraron conmigo. La Iglesia estaba completamente rebosante, hubo un saludo cariñoso de aplauso a mi llegada y les prediqué el sentido de la Providencia Divina, no exime la colaboración inteligente y generosa de los hombres y cómo la parroquia en los designios de la Providencia Divina es un instrumento que hay que aprovechar para santificarse, ya que la finalidad de la Providencia de Dios acerca de los hombres es hacerlos sus hijos, sus herederos, comunicarles su vida, lo cual es precisamente el trabajo parroquial al que hay que colaborar para que todos vivamos en la gracia de Dios.
Lunes, 11 de junio
Me visitó una representación de la cuarta promoción de bachilleres del Instituto Tecnológico de Usulután, los cuales venían a ofrecerme su promoción y pedirme el permiso de llamarla con mi nombre. Yo les agradecí profundamente y les dije que no tenía inconveniente, que al contrario, era un gran honor y una satisfacción. Sólo les comuniqué que tenía que contar con el obispo de aquella Diócesis, Monseñor Rivera, para poder participar en la fiesta de promoción, que les supliqué me indicaran cuando iba a ser.
El resto del día lo dediqué a preparar mi intervención en la mesa redonda de la Universidad Nacional, que fue esta tarde a las cinco, dedicada al tema del control de natalidad. Participaron en la mesa redonda un médico de la Sociedad Demográfica, un economista, un médico de medicina social. Conmigo iban el Padre Guillermo Gibons, médico, encargado del Centro San Lucas de San Miguel, para orientar el método natural de la concepción, y también la Licenciada de Reyes, encargada del Centro Población y Familia, que es otro esfuerzo de nuestra Arquidiócesis para ayudar en la orientación de nuestras familias. Expuse la doctrina de la Humanae Vitae de Pablo VI, recalcando los derechos humanos, la dignidad del hombre, el respeto a la vida, o sea, todo el aspecto positivo de la Encíclica que parece que impresionó bastante, para deducir de allí las leyes morales que rigen ese acto sagrado de la continuación de la vida humana. Después de las intervenciones hubo un interesante interrogatorio de parte del auditorio que se mostró muy preocupado de la difusión descarada de los medios anticonceptivos. Estudiantes de medicina fueron muy valientes en encarar la política de la Sociedad Demográfica y hasta reclamar en nombre de la ética profesional y de la libertad y dignidad de nuestro pueblo, que no se fuera tan servil a esta política que no es la solución de nuestro problema. Yo lo indicaba en mi intervención al decir que el problema demográfico debe de englobarse en una promoción integral social, que sólo dedicarse a evitar nacimientos, y peor todavía, a fomentar abortos, era nada más poner un parche pecaminoso en un problema tan complicado como es nuestra situación social.
Martes, 12 de junio
Tuvimos a las ocho de la mañana la primera reunión para ir evaluando semanalmente la organización de la Curia. Lo dedicamos hoy especialmente al problema de la YSAX, que preocupa ya mucho a todo el pueblo y hemos tomado algunos acuerdos para apurar que reaparezca otra vez esta Emisora tan necesaria hoy para la Iglesia.
A las diez de la mañana, participé, en Santa Tecla, a una reunión que me invitaron los directivos de la Unión Comunal Salvadoreña. Fue sumamente interesante platicar con estos campesinos de diversos puntos de la República sobre las inquietudes sociales. Admiré su capacidad de autonomía y de respeto y de esperanza que tienen en la Iglesia. Les prometí toda la ayuda y seguir siendo fiel a las consignas de nuestra Iglesia latinoamerica, de la opción preferencial por los pobres, pensando principalmente en los campesinos y en sus esfuerzos de reivindicación.
Algunos sacerdotes vinieron también esta mañana ya que los martes se les consagra especialmente a ellos. A las cuatro de la tarde tuve una reunión con el Seminario Mayor de la Arquidiócesis que me gustó mucho por su preocupación acerca de la liturgia en Catedral y de esfuerzos de unión con los seminarios menores, para los que se preparaba una próxima convivencia con ellos, y otros aspectos que indican ya cierta madurez en esta juventud que se va preparando para renovar las fuerzas sacerdotales de la Diócesis.
Por la noche, interesante conversación con el doctor Castro Salazar, al que han capturado y torturado y está sumamente indignado de lo que es posible en nuestro ambiente actual. Ya dice, “había creído que guardaba los guantes, porque he sido siempre combativo hasta he sufrido el destierro; sin embargo, creo que nuestra patria pide que vuelva a ponerme los guantes y vengo a ponerme a sus órdenes en lo poco que pueda servirle”. Por mi parte, le admiré y agradecí porque este gesto de solidaridad en bien de la patria, es para mí una palabra de mucho impulso.
Miércoles, 13 de junio
Celebré la Misa de San Antonio en la parroquia de Soyapango, que lo venera como Patrono. Hubo gran concurrencia. Concelebramos con los tres padres de Soyapango: Padre Villarán, el párroco; Padre Pedro Cortéz, coadjutor; y el Padre Heliodoro Orellana, que está en la capellanía de la Colonia Guadalupe de Soyapango. En la homilía procuré actualizar el mensaje de San Antonio a las circunstancias de Soyapango, invitándolos desde la doctrina que enseñaba San Antonio, es la misma doctrina del Evangelio, a la comunión, a la santidad y al compromiso. Después de Misa tuve una convivencia con el grupo de jóvenes de aquella parroquia y con toda confianza me hicieron preguntas que me han servido mucho para mi propia reflexión. Les animé a seguir siempre fieles y a tener criterios propios para no ser juguetes de lo que dicen, sino para saber juzgar las cosas con bastante personalidad. Les prometí que dedicaríamos una tarde, de acuerdo con las circunstancias de ellos y mías, para estudiar más a fondo los problemas, sobre todo, de fe y política que parece interesarles mucho a estos jóvenes.
Después dediqué el día a reposo, yéndome a la casa de las religiosas Oblatas al Divino Amor en los Planes de Renderos, donde estuve hasta la noche para venir a cenar con las religiosas de la Asunción que me habían invitado. Allí me encontré con el Padre Fabián y con el Vicario General, Padre Cortés, con quienes conversamos acerca de problemas de nuestro Clero y de la Diócesis. Sobre todo, de las parroquias de Chalatenango, de San José de la Montaña y de otras circunstancias especiales.
Jueves, 14 de junio
Me fui al Arzobispado más temprano que de costumbre para atender a varios seminaristas que quieren una entrevista personal. Es admirable la buena voluntad de estos jóvenes y las inquietudes de vivir según el momento presente. Fácilmente, se puede confundir esta sana inquietud con otros aspectos políticos o revolucionarios y que llegarían a ser peligrosos si no se les sabe orientar. Pero de aprovecharse son impulsos que me parecen muy sanos para un sacerdote actual. Por eso he insistido en su propia identificación como llamados al sacerdocio que sean, ante todo, mensajeros de la trascendencia de Dios en medio de un mundo tan preocupado de lo presente. Pero que sepan, también vivir esta inmanencia con su pueblo.
También conversé con el Padre Pedraz acerca de la radio y con el arquitecto Morales que casualmente llegaba y nos ofreció muy buenas iniciativas para echar a andar pronto nuestra nueva emisora.
Varios sacerdotes también vinieron al Arzobispado con quienes conversamos; lo mismo que religiosas, destacándose la visita de Sor Socorro, Oblata al Divino Amor, inquieta por la situación de su Congregación y bastante deprimida por la salida de la que fue Madre Scaglietti y que ha dejado bastante vacío al renunciar a su congregación. Lo mismo la visita de la provincial de las franciscanas de la Inmaculada que trabajan actualmente como profesoras en el Liceo Salvadoreño, pero que desean una pastoral más directa con el pueblo. Les orienté hacia Chalatenango, hacia Amatepec y últimamente también, hacia una pastoral de enfermos que nos es tan necesaria en la capital. Lo mismo que otra parroquia que necesita pronto una asistencia de religiosas, la de San Juan Opico, con su filial Tacachico.
Por la tarde, hice una visita y celebré la misa en el Asilo Sara. Quinientos ancianos o inválidos viven en aquel lugar, no son muy bien atendidos, pero, gracias a Dios, las religiosas Oblatas del Sagrado Corazón van a ser allí una pastoral muy útil y el fruto se vío en esta misa, bien participada y donde les dejé un mensaje de consuelo y de esperanza cristiana, Entre los inválidos de silla de rueda, me encontré un catequista de la Reubicación de Chalatenango, que quedó inválido precisamente porque un guardia nacional le dió un balazo en la espalda y pensaba, como éste, cuántos casos de inválidos de familias desamparadas por causa de esta insensata violencia en que estamos viviendo.
Visité el Noviciado de las Oblatas del Sagrado Corazón donde cené y donde conversamos acerca de un apostolado que difunda más una devoción al corazón de Jesús, adaptada a nuestro tiempo. Quedaron muy entusiasmadas y tratamos de organizar un pequeño grupo para reflexionar la manera en que vamos a realizar este encargo que se me ha dado para toda Centroamérica en el seminario de la devoción al Corazón de Jesús que se celebró el pasado mes de mayo en Santo Domingo, República Dominicana.
Fuí a visitar a la Policlínica al padre Arce párroco de Jucuapa. Parece que su situación, aunque el médico no se lo ha dicho, es definitivamente para esperar un desenlace que él mismo ya lo presiente. Traté de animarlo y lo veo con muy buen espíritu. Me encargó que si se trataba de su última enfermedad, que hiciera lo posible con Monseñor Rivera, de que fuera enterrado en su Iglesia parroquial de Jucuapa. Yo lo animé a no pensar en estas cosas, pero que contara conmigo en todo y que a él le correspondía ese honor ya que él edificó esta Iglesia y ha sido párroco muy querido por mucho tiempo en aquella población. También visité un enfermo, profesor, que se recupera de una persecución de balas en esta temporada en que están muriendo ya más de 19 Maestros.
Al regresar a mi residencia me encontré la visita del General Medrano, muy interesante conversación. Un hombre muy conocedor de la política actual y que tiene muy buenos principios para criticar las muchas imprudencias, desórdenes y errores que está cometiendo el actual Gobierno y la Fuerza Armada y los representantes del gran capital. Estuvimos muy de acuerdo en muchas cosas y me prometió su ayuda, así como yo también le ofrecí una colaboración siempre en bien del país.
Viernes, 15 de junio 1979
Hubo varias visitas este día. Pero lo más importante me parece la entrevista con el Director y el Gerente de Cáritas Arquidiocesana, Padre Tilo Sánchez y Rafael Medrano, y representando a la Junta Arquidiocesana de Cáritas, el Tesorero, señor Merlos, Mauricio Merlos, con quienes intercambiamos impresiones acerca del funcionamiento de la oficina de Cáritas, reclamando sobre varias imperfecciones; pero al mismo tiempo, evaluando cosas muy positivas que está haciendo en la amplitud de toda la Arquidiócesis. Cáritas está tomando un perfil muy original. Promoviendo reuniones en todas las parroquias y cantones, hasta donde es posible; organizando sus respectivas juntas y promoviendo una caridad que sea verdaderamente una promoción y una escuela de amor en nuestra Diócesis. Yo los felicité, pero al mismo tiempo les exigí un esfuerzo para perfeccionar la oficina, de donde debe irradiar todo este trabajo.
La otra conversación muy importante fue con el Rector del Seminario, Padre Gregorio Rosa, con quien cenamos y salimos en carro hasta La Libertad, platicando de diversos aspectos, tanto de la Arquidiócesis, de los seminaristas, de las relaciones con los otros obispos. Y me parece un elemento muy eficaz para el bien de nuestra Iglesia y la unidad de nuestra jerarquía. Yo le agradecí todas sus sugerencias, al mismo tiempo que le expuse mis pensamientos para mejorar su trabajo como Rector, sobre todo, frente a nuestro grupo de la Arquidiócesis y sus relaciones con el Seminario Menor.
Tuve la grata noticia que ya habían encontrado el repuesto para hacer funcionar la radio que ya lleva tres semanas suspendida por defectos técnicos.
Sabado, 16 de junio
Desayuno con los asesores para preparar los datos históricos de esta semana en mi homilía. Ha sido una semana sumamente densa de atropellos a los Derechos Humanos.
Se destacan asesinatos de profesores, ya suman 19. En fin, puede verse el boletín internacional que prepara la Secretaría de Medios de Comunicación Social.
Después de ver al oculista por un problema de la vista, fui a la Policlínica donde el Padre Abdón Arce, párroco de Jucuapa, acababa de fallecer. Dí mi pésame a algunos feligreses que estaban allí de Jucuapa, lo mismo que a su familia, principalmente, a su sobrina Elena, y he tratado de ayudarles para organizar su traslado a Jucuapa y su sepultura en la Iglesia parroquial. Les he prometido también asistir mañana, al menos un rato, ya que tengo el Corpus por la tarde, hora en que será la Misa de entierro.
Al llegar al Hospital me encontré una representación de Catholic Relief Services, que visitó nuestras Cáritas diocesanas y quería expresarme personalmente su buena voluntad de ayudar y su felicitación por una organización que va rompiendo moldes tradicionales para encarnar una verdadera Cáritas de la diócesis y que estaban dispuestos a presentarnos toda ayuda a nuevos programas que fueran surgiendo en esta inspiración nueva de Cáritas. He sentido gran satisfacción y agradecí esta valiosa cooperación. Por la tarde, fui a confirmar unos 20 jovencitos y jovencitas, preparados por las hermanas de La Asunción en uno de los barrios más complicados, es la Colonia Morazán. He convivido unos momentos muy felices con esta comunidad y al final de la misa los confirmados expresaron sentimientos de solidaridad y de valor pastoral muy valioso.
Domingo, 17 de junio
Comencé a oír la YSAX que transmitía la misa de seis de Catedral, pero muy pronto se volvió a interrumpir, por lo cual no pude transmitir la Misa de ocho, que estuvo muy concurrida, y por ser celebración del Corpus me dió el tema de enmarcar en la fiesta del Cuerpo y de la Sangre del Señor la denuncia de tanto atropello a tanta vida humana, ya sea por efecto de la represión, del terror y también de los pecados contra la vida que nace, el aborto, la esterilización y todos los métodos anticonceptivos criminales. Me referí a este propósito a la Mesa Redonda de la Universidad e hice un llamamiento al pueblo para evitar tanto pecado que, sin duda, influye en el malestar social de nuestro pueblo. Había un periodista de Colombia que sirve para varios medios de comunicación social en América y me felicitó por la homilía. Pidió unas palabras para la Radio Caracol de Colombia.
Después de la misa de Catedral fui a Jucuapa donde había prometido celebrar una Misa al mediodía en sufragio del Padre Arce que estaba todavía de cuerpo presente. Ya que lo enterrarán mañana. Tuve la oportunidad de saludar a muchos amigos y de enviar un mensaje de Corpus ante un sacerdote muerto. Diciéndoles que el sacerdocio no acababa nunca y que la misión, mientras dura la peregrinación de la vida, es a través de signos sacramentales, pero que ya en la eternidad es aquella liturgia de que nos habla la epístola a los Hebreos de este día, donde Cristo Sumo Sacerdote nos hace ver y gozar los bienes definitivos.
Al regresar, eran las cuatro de la tarde, y se comenzó a celebrar la Misa del Corpus en Catedral. Era a la hora de la homilía cuando dí la noticia de que la radio estaba nuevamente en el aire y que nuestra misa estaba siendo transmitida. La gente que llenaba la Catedral aplaudió con gran alegría, ya que ha sido una gran espectativa durante estas semanas el silencio de nuestra radio, por razones técnicas. Aproveché este primer mensaje radial para invitar a las personas que estuvieran en sintonía a que se acercaran a la procesión, que dentro de una media hora iba a salir de Catedral alrededor del parque en honor del Santísimo Sacramento. Y fue efectivo el aviso, porque iban comenzando a llegar muchas personas que en la procesión hicieron un cortejo muy hermoso a Jesús Sacramentado. Después de la bendición, en el atrio de la Catedral, recibí muchas enhorabuenas que yo también comuniqué a mis feligreses ya que juntos gozabamos la alegría de tener la radio al servicio de nuestra comunidad.
Lunes, 18 de junio 1979
El mismo periodista colombiano, a que aludía ayer, me hizo otra entrevista. También un periodista italiano, que más bien estudia problemas de América Latina, quiso entrevistarme para preguntarme sobre la situación y el papel de la Iglesia en nuestro país.
Tuvimos una reunión de Secretarias con la señorita Godoy, especialista en archivos, y con quien estamos tratando de organizar mejor el sistema de archivo de nuestra Curia Arquidiocesana.
Mucha satisfacción me dió la conversación del sacerdote Rafael, que trabaja como Rector del Seminario Menor de Chalatenango. Me emocionó por su confesión sincera de sentirse muy contento en sus primeros meses de sacerdocio. Y que nuestra comunidad y el papel del Arzobispo le dan fortaleza o como él dijo textualmente: “Me confirman en mi fe y en mi sacerdocio”. Tendrá unos días de vacaciones y volverá con nuevos designios siempre en la pastoral vocacional. Me parece un excelente joven que ha de dar mucho honor a nuestra Iglesia.
Igualmente, me consoló mucho el saber que este mismo día estaban reunidos los sacerdotes de la vicaría de Flor Blanca en San José de la Montaña para orientar más pastoralmente la vida de esa parroquia que ha quedado actualmente sin párroco. Y que la Vicaría, en sentido de equipo y de Diócesis, va a orientar por las líneas de nuestra pastoral. Al mismo tiempo, había en el Seminario una reunión de religiosas que trabajan en la pastoral de la Arquidiócesis para analizar y evaluar trabajos de sus propios campos pastorales. Esta labor de las religiosas en la Arquidiócesis va haciéndose cada día más providencial.
Por la noche, participé en la ultreya de cursillos de Cristiandad. Y aproveché para proponerles dos proyectos y pedirles su colaboración: El primero, en la planificación de una pastoral urbana; segundo, cooperación para escribir la carta pastoral. Acerca de la planificación, les mencioné que la zona metropolitana de San Salvador pide un estudio muy serio y ellos como tienen en su Cursillo de Cristiandad como meta el conocimiento de los ambientes, que me ayudarán a orientar esta planificación por ambientes. Y en cuanto a la pastoral, noté que ya en su mismo periódico habían escrito las preguntas que yo he dejado para consultar a las bases y que hay mucho entusiasmo en prestar esta colaboración así como también en ayudarme en la planificación de pastoral. Se concertó una reunión próxima para estudiar más a fondo estas propuestas, pero noté, como les dije, que la “fruta está madura” y que, le doy gracias a Dios, de que cursillos podrán ser de verdad un instrumento de pastoral en la Arquidiócesis.
Martes, 19 de junio
A las ocho tuvimos la reunión que hemos acordado celebrar los martes para evaluar el funcionamiento de la organización de la Curia Arzobispal. Dedicamos esta Junta especialmente a tratar de funcionamiento de la radio y de la Secretaría de Medios de Comunicación Social. El arquitecto Morales se ofreció para resolver el problema del campo en que se instalará la nueva antena. Se aclaró también varios aspectos de la responsabilidad y de las competencias de los diversos componentes que trabajan en la Secretaría de Medios de Comunicación Social. Se platicó también acerca de cambiar el formato de Orientación por razones económicas, pero se dejó para consultarlo al Clero en su próxima reunión.
A continuación, yo tuve una junta con los sacerdotes, religiosas y laicos de la Vicaría de Mejicanos. Resultó sumamente interesante. El Padre Rafael Palacios motivó con una lectura bíblica y una reflexión para proceder a una evaluación del trabajo pastoral de esa vicaría, con verdadero sentido de humildad y de sinceridad. Y así se expusieron dificultades, problemas entre sacerdotes y laicos y todo lo concerniente a un mejor funcionamiento, unificado diversos aspectos de los criterios que deben regir la pastoral de aquella región. La reunión fue tan densa de iniciativas, de discusiones y sugerencias que se acordó continuarla la próxima semana.
Por la tarde, interesante entrevista con el hermano provincial de los maristas y algunos directores de colegios de El Salvador. Se quejaban de la distancia que se ha creado entre su comunidad y el Arzobispo. Expuse claramente mis motivos, mis preocupaciones y ellos también hablaron con toda franqueza de las dificultades; de por medio estuvo, de común acuerdo, la hermana Nelly Rodríguez, que pertenece a la Directiva de la Federación de Centros de Educación Católica, para evaluar con ella las relaciones pastorales de los colegios maristas en el interesante campo de la educación, visto como una pastoral de la Arquidiócesis. Se acordó intensificar las relaciones y procurar entre todos una pastoral verdaderamente de acuerdo con el Arzobispado al servicio de este pueblo de características tan peculiares.
Miércoles, 20 de junio 1979
Mientras preparaba esta mañana la grabación para la entrevista que se transmite por radio este día, me comunicaron la trágica noticia de que habían asesinado al Padre Rafael Palacios, en Santa Tecla, en esos momentos, cerca de las nueve de la mañana. Terminé mi grabación aludiendo a este suceso trágico y me dirigí a la Junta del Senado que estaba reunido en la casa de las hermanas somascas para consultar quE habíamos de hacer ante esta nueva, trágica situación. Me urgía oír el parecer del Senado para resolver las cosas inmediatas de su arreglo funerario y de la participación del Clero y del pueblo. Y luego, un estudio más a fondo sobre la situación que supone este acontecimiento. En cuanto a lo primero, acordamos recoger el cadáver del padre y después de arreglarlo, regresarlo a Santa Tecla, donde se le quiere mucho, para que sea velado en la Iglesia del Calvario. Allí se tendría una Misa por la noche. Y luego, al día siguiente, trasladarlo a las exequias a Catedral y después llevarlo a Suchitoto, por deseo de su familia que es de allá. Y después de otra Misa en Suchitoto ser sepultado en el Templo Parroquial.
Mientras el Senado continuó sus deliberaciones, yo fui a Santa Tecla, donde ya habían recogido el cadáver del Padre. sólo anuncié que regresaría con él para velarlo en el Calvario y que hicieran invitaciones para la noche. De allí me dirigí a los juzgados donde se hacía el examen del forense en el cadáver del Padre, que estaba acribillado a balazos, que le afectaron la cara y otras partes del cuerpo. El grupo de comunidades de base, que tanto lo ha querido en Santa Tecla, estaba allí y lloraba inconsolable. Traté de darles ánimo y regresé a la reunión del Senado, ya habían terminado; sin embargo; en el Arzobispado había gente que quería comentar este acontecimiento; entre ellos sus hermanas, y su hermano y junto con otros sacerdotes y seminaristas conversamos, un comentario muy edificante de lo que fue el padre desde su infancia, en el ejercicio de su sacerdocio hasta la hora de su muerte. Es maravilloso conocer de cerca una vida sobre la cual ha habido algunas dudas y algunos prejuicios. Y creo que enseñaba mucho este reflexión de familia que hicimos en una sala del Arzobispado.
Por la tarde, tuve una entrevista de la televisión brasileña acerca de la situación de la Iglesia y del país.
También me han prestado colaboración para arreglar la sala de reuniones, religiosas y seglares del Colegio de la Sagrada Familia, lo cual agradezco, porque lo hacen con mucho cariño y con mucha técnica también.
Por la noche, fui a celebrar la Misa en la Iglesia del Calvario de Santa Tecla que estaba completamente llena, junto al cadáver del Padre Palacios; había muchos sacerdotes, no menos de 25 de toda La Arquidiócesis que concelebraron conmigo. Y deliberamos acerca de la manera de celebrar el día siguiente. Habiéndose acordado que nos reuniríamos en la Basílica del Sagrado Corazón a las diez de la mañana y de ahí conduciríamos el féretro hacia la Catedral para sus exequias. En mi homilía comenté este pensamiento, que el Padre Palacios había encontrado en Santa Tecla lo que todo sacerdote fiel encuentra donde trabaja, mucho amor y mucho odio. Y testimonio del odio era la trágica muerte por asesinato y que indicaba cómo la Iglesia que tiene que cumplir el deber de denunciar el pecado, tiene que estar dispuesta a sufrir las consecuencias de haber tocado ese monstruo que hace tanto mal en el mundo, el pecado.
Jueves, 21 de junio
Las hermanas del hospital han sido las primeras en recordarme que este día es el aniversario de mi ordenación episcopal y, francamente, hace nueve años fui ungido con la plenitud del sacerdocio. Aunque tenía que celebrar la Misa de cuerpo presente del Padre Palacios, las hermanas quisieron que celebrara una Misa más privada en la capilla del hospital, para darle gracias a Dios y para reflexionar sobre este noveno Aniversario. Me ha parecido muy significativo celebrarlo con un sacerdote asesinado y con la solidaridad en pleno de todos los sacerdotes de la Arquidiócesis y muchos que han venido de otras diócesis, incluso el señor Obispo de Santiago de María, Monseñor Rivera. Por eso, aunque celebré esta Misa privada con mucha intimidad ante el Señor y en representación del pueblo de Dios, un pequeño grupo de religiosas y enfermos, me pareció otra forma grandiosa de celebrar este aniversario, el funeral del Padre Rafael Palacios. Fue traído desde Santa Tecla y en la Basílica del Sagrado Corazón esperábamos todos los sacerdotes, religiosas y numerosos fieles que acompañamos en una procesión de impresionante silencio el cadáver hasta Catedral, donde se ofició una Misa también de carácter muy solemne. Creo que no menos de 60 sacerdotes llenaban el presbiterio y hacían valla al ataúd del Padre Palacios. En mi homilía traté de interpretar la voz de la sangre de un sacerdote asesinado que nos revela esto tres puntos: Primero, el misterio de la iniquidad, señalando la situación injusta de estructuras pecaminosas en nuestro país y el pecado también de la Iglesia, que muchas veces se hace cómplice señalando o dudando de sacerdotes por su esfuerzo de estar al día en la pastoral de la Iglesia. El segundo punto, el misterio de la fidelidad, cómo morir así no es por ser malo, sino por ser fiel, como Cristo al Padre, como la Iglesia a Cristo. Y en tercer lugar, recoger un mensaje de esperanza, ya que esta muerte nos da la dimensión del trabajo de la Iglesia, de formar hombres nuevos en el amor y de abrirlos a la perspectiva eterna que la muerte señala en forma tan evidente. Hacia las tres de la tarde fue trasladado el cadáver del Padre Palacios a su pueblo de adopción, Suchitoto, donde será velado y mañana a las diez la Misa de exequias para ser sepultado en la misma Iglesia. Espero poder acompañarlo.
Esta tarde también fui a cumplir una promesa de celebrar la fiesta patronal de San Luis Mariona, cantón de la parroquia del Padre Julio Orellana, Cuscatancingo, donde hubo una recepción y una celebración muy cordial, muy cariñosa. El Padre había preparado un grupo de jovencitos y señoritas para recibir la Sagrada confirmación. Una buena catequesis, bien preparados; celebramos la Misa del Espíritu Santo y aludimos al patrón del lugar, San Luis Gonzaga, como ejemplo de un cristiano que supo vivir su bautismo y su confirmación.
Por la noche, acudí a una invitación del licenciado Atilio Viéytez junto con el Padre Estrada y el Rector de la UCA, Ing. Ramón Mayorga. Conversación sumamente interesante sobre los problemas políticos actuales del país y de la situación de nuestra Iglesia.
Viernes, 22 de junio
Por la mañana, fui a Suchitoto a celebrar la Misa de cuerpo presente del Padre Rafael Palacios. La amplia Iglesia estaba completamente llena de feligreses de Suchitoto y de otras comunidades que habían llegado. Muchos sacerdotes, muchas religiosas. En mi homilía uní la idea de la fiesta del Corazón de Jesús con la muerte del Padre Rafael. El sacerdote hace presente el Misterio de Cristo que es Misterio de amor. Era la mejor fecha para que Rafael Palacios volviera muerto a su pueblo adoptivo y decir en el día del Corazón de Jesús, “¡Misión Cumplida!”. Tomaron la palabra también el Padre Rafael Barahona y el hermano del Padre Palacios, Carlos. Giramos alrededor del parque llevando el cadáver con una gran concurrencia y después fue sepultado en la Capilla del Corazón de Jesús. Entre cantos pascuales, las lágrimas parecían iluminadas por una gran esperanza cristiana.
Fui a almorzar en la Comunidad de Religiosas Domínicas que tienen allá el colegio o escuela funcionando muy bien. Las felicité y las animé.
Por la tarde, Misa del Corazón de Jesús en la Basílica. Había bastante concurrencia aunque el Padre Cortéz, párroco de la Basílica, me decía que había más gente el año pasado, posiblemente por una lluvia torrencial que cayó poco antes o por el temor general que la gente siente en este ambiente. En la predicación traté de presentar como la Iglesia ya estaba en el Corazón de Cristo histórico. Y el Corazón de Cristo sigue presente en la Iglesia, para santificarla, y para ponerla al servicio del mundo, con la misión que El trajo del Padre. Finalmente, siempre en ambiente de parroquia, fuimos a cenar en la casa de doctor Mario Levy Van Severén, que es miembro del Consejo Parroquial.
Sabado, 23 de junio
Como todos los sábados nos reunimos en el desayuno en casa de las hermanas somascas para revisar la semana y tomar datos para mi homilía. Yo quise exponer un sentimiento casi de frustración ante la frialdad con que se ha visto la muerte trágica del Padre Rafael Palacios. Señalaba, por ejemplo, la partida de basket de dos colegios católicos, mientras el cadáver del Padre yacía en capilla ardiente, antes de su Misa fúnebre en la Catedral y la poca sensibilidad en el ambiente y que era necesario analizar un poco, que pasaba ante estos acontecimientos que debían despertar mayor reacción de solidaridad en toda la Iglesia. Por ésto y por otros puntos que urgen una profundización en la reflexión, acordamos tener una junta el próximo lunes con aquellas personas con quienes solemos consultar. Y vamos a dedicar toda la mañana para que sea un tiempo suficiente y sacar conclusiones, ya que se nos ha encargado también, de parte de la reunión del Clero, la realización de las iniciativas que entonces se dieron. Desde luego, se está llevando a cabo el toque de campanas todas las noches a las ocho, pero se lamentó que la radio, como que sólo fue un cumplimiento, el haberse referido a la muerte trágica del Padre el día de sus funerales; luego no ha seguido haciendo alguna mención, algún reclamo a esta circunstancia.
También se anunció y se está anunciando la Misa única, el sábado, dentro de ocho días, como novenario en sufragio del Padre Rafael.
Fui con el Padre Estrada a visitar al doctor Badía, Rector de la Universidad Nacional, para tratar de animarlo a que no renuncie, ya que su presencia es gran esperanza para la Universidad. Sin embargo, parece que siente muy grande la dificultad ante el desorden de estos grupos de universitarios que son hasta incultos y que parecen manipulados, para fines que no se confiesan, pero que hacen mucho mal a la Universidad y cree que, el doctor Badía, no será él suficiente, máxime que muchos están también poniendo sus renuncias. Insistí en darle ánimo y ofreciéndole también mi apoyo moral.
Domingo, 24 de junio
Celebramos en Catedral la Misa de San Juan Bautista. Hubo como todos los domingos una asistencia que dá mucho estímulo pastoral. A las once de la mañana celebré la Misa patronal en Chalatenango en honor a San Juan Bautista. También fue un gran consuelo espiritual. El Seminario Menor cantó la Misa, cumplía hoy dos años de existencia y está floreciente con la gracia de Dios y bajo la dirección de un vicario episcopal muy activo y un Rector del Seminario, el Padre Urrutia, que es muy comprensivo sacerdotalmente de los muchachos. Después de la Misa compartimos un almuerzo y una fiestesita de familia en el local del Seminario. El ambiente de esta comunidad es verdaderamente cristiano, muy acogedor.
Por la tarde, interesante conversación con la familia donde el Padre Rafael Palacios encontró una acogida muy cariñosa durante todo el tiempo en que vivió en nuestra Arquidiócesis. Me hicieron revelaciones muy importantes que esclarecen algunos aspectos del asesinato del padre, de su modo de ser y de su línea pastoral. Me parece que estamos frente a un caso de un sacerdote que no ha sido comprendido y que ha dejado mucha trascendencia en su trabajo pastoral; sobre todo, en las comunidades eclesiales de base.
Lunes, 25 de junio
Desde el desayuno pasamos toda la mañana en la casa de las hermanas pasionistas, camino de Planes de Renderos, para estudiar a propósito del asesinato del Padre Palacios, la situación de la Iglesia en su vida interna y en su irradiación hacia el mundo que nos rodea. Llevé a la profesora, a quien me referí ayer, que conoció muy a fondo la vida del Padre Palacios, para que nos contara sobre el mismo asesinato y los antecedentes que pudieron llevar a esta situación. Fueron revelaciones muy importantes, sobre todo, cuando se trataba de los detalles que hicieron tan dura la vida del Padre en su relación con la jerarquía y con los otros sacerdotes. Continuamos reflexión. El Padre Moreno hizo un amplio análisis de como ve él la situación intra-eclesial y también de las relaciones de la Iglesia con el exterior. Hubo opiniones muy valiosas y se aclaró un panorama que al mismo tiempo, que nos preocupa, nos dá una perspectiva muy optimista de la vida de nuestra Iglesia que, sin duda, va madurando, pero que tiene serias dificultades, sobre todo, en las divisiones internas y en su relación con el Gobierno y con el pueblo.
Por la tarde, me entrevisté con el Padre Jesús Delgado y con el Padre Rafael Moreno, para ir perfilando el esquema de la carta pastoral que pienso publicar el 06 de agosto. Esperamos abundantes opiniones de los sacerdotes y de las bases, ya que se ha levantado una encuesta acerca de las preguntas que van a tratar de ser respondidas en esta pastoral, como una respuesta al diálogar que ha sido convocado para que opinemos sobre la situación y la salida posible de esa situación en nuestro país. Nuestra carta pastoral pretende ser una voz auténticamente eclesial, pastoral, para señalar las problemáticas y las posibles salidas, como pastoralmente podemos nosotros expresarnos. Esta consulta se continuará llevando en la próxima reunión del Clero de donde se recogerá ese rico material para entregarlo a diversas comisiones que harán la primera redacción de la Carta.
Martes, 26 de junio
Toda la mañana la dedicamos a la reunión de la comisión de pastoral. Es una reunión que, según mi parecer, es la principal ya que la Diócesis vive para la pastoral y esta Comisión ayudará a coordinar, a inspirar, a servir esa pastoral de la Arquidiócesis. Me ha dado mucho gusto que los vicarios, las representantes religiosas y representantes del laicado de cada vicaría van entrando en una compenetración del ideal pastoral de nuestra Arquidiócesis. Hoy estudiamos los objetivos de esta comisión de pastoral y también me dió mucho gusto que hayan recordado la semana de pastoral de 1975, que es la que ha definido la pauta que actualmente está siguiendo la Arquidiócesis, insistiendo en la formación de comunidades eclesiales de base, en la formación de dirigentes o agentes de pastoral. Y en ésto se fue la reflexión en su parte principal. Hubo varios otros aspectos que indican la vitalidad de nuestra Diócesis. Le hemos dado gracias a Dios y hemos pedido que nos siga bendiciendo.
Por la tarde estaba concertada una entrevista con miembros del FAPU. Y de nuestra parte, estuvo el Padre Moreno, la niña Doris Osegueda, el Bachiller Roberto Cuéllar y yo; y dialogamos especialmente para deshacer ciertos prejuicios que el FAPU tiene contra la Iglesia. Creo que ha sido útil si hay sinceridad en aceptar las explicaciones.
Miércoles, 27 de junio
Antes de ir a la oficina, interesantes visitas del Padre Ramiro, que es pasionista y necesitamos que siga prestando sus servicios en nuestra Arquidiócesis; del Padre Urrutia, Rafael, que trae proyectos acerca del Seminario Menor y de la pastoral vocacional en la Arquidiócesis, y Carlos Francisco Palacios, hermano del Padre Rafael Palacios, que me expuso también sus inquietudes de joven que quiere ingresar al Seminario, pero antes de irse, servir pastoralmente. Le señalé el puesto vacío de su hermano Rafael, en la parroquia de San Francisco y sintió mucho gusto de poder trabajar allí. En el Seminario, también, otras visitas antes de entrar a la Junta de la Vicaría de Mejicanos. El Párroco de la Colonia Atlacatl, con problemas de amenazas de organizaciones clandestinas para una familia y quiere ayudarles, como lo está haciendo, gracias a Dios, nuestra Iglesia. También la señora Raquel continúa escondida por amenazas de la Unión Guerrera Blanca.
La reunión de la Vicaría de Mejicanos resultó también sumamente interesante ya que era como una continuación de la que la semana pasada animó el Padre Rafael Palacios y no hay duda que su espíritu estuvo con nosotros, pues, hubo claridad, sinceridad en expresar deficiencias, contrariedades, dificultades; pero que se fueron clarificando en la discusión, de modo que, al mediodía, pude hacer una reflexión muy optimista, pensando en que nuestra reunión de esta mañana se parecía a las de los Hechos de los Apóstoles y que debíamos de buscar aquel ideal de hacer la Comunidad cristiana, que es la mejor manera de resolver todos los problemas, cuando todos nos propongamos a ser, verdaderamente, la Iglesia de Jesucristo. Vinieron también las religiosas Pasionistas que trabajan en San José Villanueva para informarme cómo allá también las han perseguido, les quisieron quemar la Iglesia y han tenido que sacar las imágenes a su residencia particular, para evitar cualquier daño de mayores consecuencias.
Por la tarde, tuve una reunión con los trabajadores de la Tipografía Criterio; era para celebrarles el día de su patrono San Juan y para compartir con ellos un diálogo en que me expresaran su situación laboral. Estuvieron conmigo el Administrador General de la Curia, ingeniero Galván, y la señorita Doris Osegueda, Secretaria de los Medios de Comunicación Social; así como también, María Isabel y Silvia, a quienes les he encomendado fomentar el sentido de comunidad entre estos trabajadores. Logramos un ambiente de confianza para que expresaran una serie de anomalías en las relaciones humanas de la tipografía. Se quejan principalmente de los dos jefes de taller que parece que los tratan bastante mal; aunque les hicimos ver el cumplimiento de su deber y la comprensión hacia los jefes de taller. Les prometí también que atendería sus peticiones una vez que supiéramos analizarlas en un diálogo franco con el sector de los jefes de personal. Fue, creo, muy útil poder decir, sobre todo, que debe de unirnos un espíritu ya que formamos parte de la colaboración de la Iglesia en un sector tan importante como es la edición de un periódico, el sostenimiento de una tipografía que, gracias a Dios, posee nuestra Arquidiócesis.
Por la noche, vino a verme el Padre Rafael Urrutia con el seminarista Joaquín, quienes me expresaron sus evaluaciones acerca del Seminario Menor de Chalatenango. Por mi parte, le pedí a Rafael Urrutia que junto con el actual encargado del Seminario Menor de San José de la Montaña, se encargaran de la Parroquia del mismo nombre, para desarrollar desde ahí una pastoral vocacional.
Jueves, 28 de junio
Inicié mis trabajos de oficina con una interesante entrevista con el Padre Rafael Urrutia y el Padre Sigfredo, ambos jóvenes, a quienes comuniqué mi proyecto de hacer de la parroquia de San José de la Montaña una parroquia central para la pastoral vocacional. El Padre Urrutia lo ha tomado con mucho entusiasmo. El Padre Sigfredo tiene sus reparos por prestar mayor atención al Seminario. Pero creo que unidos pueden llevar esta hermosa labor de una parroquia que nació precisamente en función del Seminario y que se ha desviado únicamente a un culto que se ha concretado sólo casi a decir Misas. El Padre Salvador Colorado, miembro del equipo para el Seminario Mayor, pero perteneciente a nuestra Arquidiócesis, también mostró su buena voluntad de cooperar. Por lo que espero que muy pronto podamos hacer realidad este proyecto. Hubo varias visitas, entre ellas, la del encargado de negocios de Venezuela, el cual con mucha atención, ofreció sus servicios para nuestro Arzobispado. Incluso, si fuera necesaria, ayuda económica. Le agradecí y lo tendremos muy en cuenta.
Almorcé con la señora de Rodríguez, madre de la religiosa Nelly Rodríguez, con quien tuve mucha amistad en San Miguel, en mis tiempos de párroco en aquella Ciudad.
Por la tarde, entrevista con un periodista inglés. También, una reunión con los tipógrafos de nuestra Imprenta Criterio y tratando algunos problemas concretos laborales en que trataré de humanizarles más su difícil situación.
También la visita del señor Arturo Meza quien me habló de situaciones laborales difíciles en la Empresa de La Constancia. Les ofrecí darles los principios cristianos que coordinan, según el pensamiento del Evangelio, la colaboración entre los patronos y los obreros, de lo cual hablaremos, si Dios quiere, la próxima semana.
Viernes, 29 de junio
Este día de San Pedro lo celebré en el Colegio Santa Inés de Santa Tecla, donde las religiosas, profesoras y alumnas celebran el día del Papa. Les hablé de la significación de los dos santos del día, San Pedro como jefe de la Iglesia y San Pablo como representante del mundo gentil, o sea, de todos nosotros que formamos el pueblo no judío, pero que con los judíos cristianos formanos la sola Iglesia de Jesucristo. Después de la Misa hubo un acto muy simpático en que se hacía ver el papel del Papa en medio del mundo actual. Después de compartir algunos momentos de alegría con esa juventud me fui a pasar el resto del día en la casa de las hermanas Oblatas al Divino Amor, en Planes de Renderos.
Sabado, 30 de junio 1979
El acontecimiento principal de este día fue la Misa única, acordada en una reunión plenaria del Clero, como un gesto de solidaridad de toda la Arquidiócesis a propósitos de la muerte del Padre Rafael Palacios. Se han terminado los nueve días de oraciones en varias comunidades y este día, al mediodía, tuvimos una gran concentración de comunidades de toda la Arquidiócesis, sacerdotes en un número que se aproxima al centenar. Fue muy solemne, muy participada. Se sentían comunidades bien cultivadas que unidas en una Catedral daban una impresión magnífica de estar participando muy activamente en la Eucaristía. En mi homilía interpreté esta Misa única como un gesto de solidaridad de la Diócesis para tres fines; primero, para revalidar el valor infinito y divino de la Eucaristía, a la cual se profana con muchos individualismos y celebraciones por fines que no siempre están de acuerdo con la mente divina del Señor. Segundo, también expresábamos nuestro aprecio al sacerdote, precisamente en memoria de un sacerdote difunto, asesinado tan vilmente, y manifestando lo que es una Iglesia vacía de Eucaristía y de sacerdocio como se habían quedado todas las Iglesias de la Diócesis, este día de la Misa única. Y en tercer lugar, manifestar también la voz del pueblo de Dios unido, pueblo que ora, pueblo que protesta por el atropello que se le ha hecho, pero no con venganza ni odio sino pueblo que clama conversión a los pecadores.
Esta mañana en el desayuno tuvimos, como de costumbre, los sábados, la revisión de la semana para preparar las noticias que debo de enfocar en mi homilía. Y por la noche, una reunión con la comunidad de base que cultivó el Padre Rafael Palacios, en Santa Tecla, para darle orientaciones pastorales.