Urge ayudar a «CHAPARRASTIQUE»
Una formidable batalla de ideas estremece hoy a América. Dejemos las palabra al enemigo que nos habla con la elocuencia de las cifras.
El 5 de julio el barco neerlandés «Kadsedyk», 166 cajas y 83 bobinas de papel que equivalen respectivamente a 16186 u 23,864 quilos. Rusia dispone de mil millones de francos anualmente para propaganda de prensa en América Latina; en estos últimos años ha difundido 150 millones de libros y folletos. En Alemania comunista, en Checoslovaquia y Rusia estudian periodismo unos 300 jóvenes de los países en vía de desarrollo, muchos por tanto latinoamericanos.
En cambio los «hijos de la luz» gastamos diez veces menos en sostener nuestro apostolado de la Buena Prensa. Qué escándalo! Y qué paradojas de dos ideologías irreconciliables: el comunismo que proclama una filosofía materialista se dedica generosamente alimentar el espíritu con esa formidable campaña de lectura…En cambio los católicos que proclaman la supremacía del espíritu sobre la materia son tan negligentes en llevar pábulo de verdad y de amor en una intensa campaña de Buena Prensa.
Un misionero expresó gráficamente este pecado que casi se convierte en estupidez: nos preocupamos de ayudar a los necesitados y les damos solo alimento terrestre a los hombres, los comunistas les alimentaba con errores y odio el espíritu; nosotros les enseñamos a leer a los hombres y los comunistas les proporcionan periódicos y libros; nosotros les damos dinero, limosna, y ese mismo dinero sostiene la prensa del enemigo…estamos perdiendo la batalla de las ideas!.
Estamos a fin de año. Es oportuno pensar en renovar suscripciones o en suscribirse a un periódico católico «CHAPARRASTIQUE» representa en San Miguel esa batalla de ideas de parte del catolicismo. Los católicos migueleños y salvadoreños tienen el grave deber de sostener su prensa católica. «Hay que oponer arma a arma» era la batalladora consigna de aquel valiente Pontífice Pío XI.
El periódico católico se encarga de orientar cristianamente los sucesos mundiales…de dar a conocer la vida de la Iglesia que es mensaje y fuerza de salvación…de enfocar los problemas sociales con las certeras normas del Evangelio y de las Encíclicas sociales.
Colocar una suscripción de «CHAPARRASTIQUE» en un hogar, equivale a dar a ese hogar un arma para defender su herencia espiritual contra los invasores del error y del odio.